El regreso de Fabio Santana al Gran Canaria generó mucha ilusión en una afición que esperaba que un canterano como él, que hizo el camino de ida y vuelta, alcanzara protagonismo en la plantilla profesional del conjunto claretiano. Por lo pronto, le está costando entrar al base. Disfruta de pocos minutos en un puesto donde el veterano Omar Cook es titularísimo, donde Niko Radicevic empieza a contar después de tener colgando el cartel de descarte, y donde el polivalente Demonte Harper echa una mano.
A pesar de este panorama, con poco tiempo para demostrar su valía, el director de juego grancanario no desfallece: "Es lo que toca, tengo que estar en positivo, no me puedo estar rayando la cabeza, sino estar preparado para cuando me toque entrar. Tengo que estar en positivo siempre, pensar en lo bueno".
"Cada vez me encuentro mejor. Me he integrado muy bien en la plantilla y en los sistemas del entrenador. Siempre que salgo intento dar lo máximo atrás para meterme en partido, y organizar y hacer lo que se me solicita desde el banquillo en ataque", revela.
"Pero los minutos son los que son y hay que intentar aprovecharlos al máximo. Desde luego que es una situación complicada, porque sabes que dispones de pocos minutos ya que existe bastante competencia en este puesto. Omar es el titular, Demonte también juega de base, Nico, yo... Lo que no puedo hacer es venirme abajo y seguir trabajando para lo que viene por delante", apunta.
Tras la primera victoria de la campaña en casa, cosechada ante el Morabanc Andorra, y con un balance de 2-2, Fabio Santana cree que el equipo empieza a carburar: "Nos ha costado bastante. Era un equipo prácticamente nuevo con nuevo entrenador. Teníamos también algo de presión encima por lo ocurrido la temporada pasada".
"Es importante haber logrado el primer triunfo en casa. Espero que sea la primera de muchas. Ahora tocar jugar contra el Barcelona en su feudo, un encuentro muy complicado", explicaba.
Ante esa inminente visita al feudo blaugrana, el domingo a las 19.00 horas, el base amarillo le otorgaba aún más importancia al último triunfo contra el cuadro andorrano en el Arena.
Considera que se trataba de un duelo "clave", porque de ponerse con un 1-3 podría instalarse el negativismo alrededor del conjunto grancanario al tener que visitar una pista como el Palau, "aunque allí también se puede competir". "Está claro que es muy difícil vencer al Barça en su casa; tenemos que hacer las cosas perfectas y que a ellos no les salgan también", argumenta.
Aunque la mejoría del Herbalife Gran Canaria a medida que avanzan las semanas resulta evidente, Fabio Santana reconoce que "todavía falta conocernos al 100% cada uno" para poner bien a punto el engranaje.
"Hay muchos jugadores que han llegado tarde por culpa del Mundial, pero eso se va cogiendo con los entrenamientos. Día a día, el entrenador nos está inculcando qué quiere de nosotros; todo es cuestión de tiempo. Al final seguro que va a salir", expuso el canterano del Granca.
