Uno, dos, tres... Así hasta 509 triples convirtió Fletcher Mcgee durante los cuatro años que estuvo defendiendo la camiseta de la Universidad de Wofford Terriers para ostentar el récord de lanzamientos de tres de la NCAA que poseía Travis Brader anteriormente con 504.
El sanguinario de Orlando, a pesar de ser una metralleta desde más allá del arco no fue drafteado por ninguna franquicia de la NBA y tras jugar la Liga de Verano de Las Vegas con los Milwaukee Bucks, donde promedió 4 puntos y 2,7 rebotes en 12 minutos por encuentro, no convenció a ningún ojeador de la liga americana. Fue ahí donde entró el Monbus Obradoiro y su director deportivo José Luis Mateo para firmarle su primer contrato profesional y traérselo a Galicia para que hoy tenga la oportunidad de jugar contra el Granca (12.00 horas, Movistar Deportes).
Mcgee dejaba atrás cuatro años en la universidad de Carolina del Sur con la que pocos éxitos a nivel colectivo cosechó, pero en la que el año pasado le sirvió para ganarse el seguimiento de los medios especializados le siguieran más de cerca para ver si batía el récord de triples.
Bleacher Report hablaba con el escolta hace dos años y le preguntaba por la fórmula mágica para torpedear tantas veces el aro desde la línea de 6,75 metros. "Trabajar duro, repeticiones... y Youtube". La plataforma audiovisual de internet le servía a Mcgee para "estudiar a J.J. Reddick", de quien decía ver "muchos vídeos" para "ver como lee las situaciones y abrirse huecos de tiro".
Un estudioso del Siglo XXI, que ahora con la camiseta del Obradoiro continúa con vicio triplista. En la ACB promedia 13,3 puntos por partido con un acierto del 36,3% en tiros lejanos.
Y es que el conjunto dirigido por Moncho Fernández le viene como anillo al dedo al jugador de Florida, pues es el equipo que más triples lanza de la Liga Endesa con 29,5 por partido de media, de los cuales anota 10,8 (un 36,7% de acierto).
Fotis llega a los 300
Pero más allá de las amenazas desde la línea de triple, Fotis Katsikaris advirtió de las otras armas con las que cuenta el Obra, poniendo especial atención en la aportación de Dejan Kravic, de quien dijo que para él es "la revelación de la Liga".
El pívot nacido en Bosnia, pero con pasaporte serbio, es el séptimo jugar mejor valorado de la competición con 17 unidades, gracias a sus 14 puntos y 6,6 rebotes de mediapor partido.
"Es un jugador clave para el Obradoiro por cómo genera, por como mueve las dos manos... es muy eficaz", expresó Katsikaris en la rueda de prensa previa al partido de hoy, que será a su vez el 300 de su historia en la ACB.
El entrenador griego puede hacer estas afirmaciones después de su larga trayectoria en la liga española, después de defender los banquillos (además del Granca) de Valencia Basket, Bilbao Basket, UCAM Murcia e Iberostar Tenerife. Equipo al que precisamente Dejan Kravic le ganó el año pasado la final de la Champions League con el Segafredo Virtus Bolonia del mítico Sasha Djordjevic.
El homólogo de Katsikaris en el banquillo rival, Moncho Fernández, advirtió por su parte "de la grandeza del Granca", pues para el entrenador gallego, la plantilla claretiana "está confeccionada para jugar la Eurocup como se pensaba en verano", y por ende, "tiene doblados los jugadores con gran calidad en todas las posiciones".
Aun así, por tan larga que sea la plantilla insular, al menos hoy volverá a sufrir la baja del mejor asistente de la Liga Endesa, Omar Cook, que continúa lesionado de sus molestias en el cuádriceps derecho; mientras Javier Beirán jugará algo lastrado por una lumbalgia, a pesar de que las pruebas médicas le dieron el alta deportiva al madrileño.
Por parte del Obra, Fernández dispondrá de todos sus jugadores salvo a Kostas Vasileiadis.