Si el Granca experimentó contra el Unicaja que estaba inmerso en una transformación positiva y quería dejar atrás la paupérrima imagen que perpetró en la Liga Endesa, frente al Bursaspor en la competición continental llegó la confirmación al vencerle de forma cómoda por 76-94 con un juego coral en el que cinco jugadores llegaron a los dobles dígitos en puntuación -Okoye, Dimsa, Shurna, Costello y Beirán-.

Todo salió a pedir de boca desde el primer balón al aire. Se olvidaron los encontronazos en el vestuario y todos los jugadores se unieron a una. Como diría Luis Aragonés, el único objetivo que tenían en mente los insulares era: "Ganar, ganar y ganar". Miedos despejados de un plumazo y el talento del Herbalife desplegado en el Tofas Spor Salonu.

Shurna estuvo magnífico duante el primer cuarto con 10 puntos, taladrando el aro desde la larga distancia. Dos triples del americano con pasaporte lituano despejó todas las dudas que se cernían sobre él en las últimas derrotas del Granca, en el que no cuajó como se le espera al jugador con una actitud impoluta más allá de los números.

A la par del ala pívot, sus compañeros afinaron la puntería desde la línea de 6,75 metros. 7 triples de 9 intentos en el primer cuarto elevaron el marcador hasta el 18-33. Juego coral y las sonrisas volvían a los de la camiseta amarilla. Aun así, todavía tenían que apretar un poco en la pintura, donde Kenny Kadji se notaba a gustoo con 8 puntos.

Para frenar al pívot del conjunto turco, Porfi Fisac le dio minutos de peso a Khalifa Diop. Los primeros instantes se le notó un tanto despistado, pero a medida que pasaron los segundos, la torre senegalesa se fue aclimatando a la pista y dando lo mejor de sí, con un tapón al más puro estilo Tavares. "Vete de aquí Malik Newman".

Desafortunadamente, el pívot canterano se cargó de faltas y llegó a las tres en el ecuador del segundo cuarto. Periodo en el que el gatillo se le encasquilló a los claretianos. Después de cinco minutos jugados solo habían sumado dos puntos, hasta que Costello y Beirán sacaron su fusil y abrieron de nuevo la lata desde la línea exterior para dejar la diferencia en dieciseis puntos arriba (25-41).

El alero madrileño regresaba a la competición después de los vaivenes verbales con el entrandor segoviano, quien decidía en el último duelo liguero ante el Unicaja Málaga, dejarlo en el banquillo sin minutos.

Tanto la lucha por el rebote, como el acierto desde el triple permitían al Granca tener una renta cómoda en la primera mitad del partido. En cuanto a los rechaces, los hombres de Fisac alcanzaron 20 rebotes (seis ofensivos) por 13 del Bursaspor; mientras que en el tiro de tres, el Herbalife firmó un 50% de acierto con 11 triples conseguidos, por 4 de los otomanos (36,4%).

De esta forma, y con alegría en el juego, la misma con la que Dimsa sacó un 2+1 en la última acción del segundo cuarto se llegó al descanso con 33-53. Veinte puntos de ventaja.

La hora de reivindicarse

El escolta lituano demostró con creces por qué Willy Villar cogió el teléfono y llamó a Kaunas para conseguir su cesión. En la reanudación del choque se encargó de incrementar su cuantía personal y la del Granca. Con dos triples y dos canastas de dos puntos llegó a los 16 en su tarjeta individual.

Junto a Shurna, que también alcanzó los 16 y Beirán, con 11 hasta el minuto 30. Mantuvieron la ventaja los insulares respecto al conjunto local, que parecía emular al Herbalife en su peor versión vista hasta ahora. Pérdidas, juego trabado y escasez en los rebotes. Poco espíritu para una posible remontada y sumar su primera victoria en la Eurocup. Tanto que en 30 minutos no habían conseguido ni un robo -por 7 de los de Fisac-.

Con un cómodo 60-76 encaró el último periodo el equipo claretiano y con ganas de demostrar que la mejoría mostrada frente al Unicaja se podía traducir en el tercer triunfo de la competición continental.

Se encontró en el tramo final el equipo de Porfirio el problema de las faltas con los pívots. Costello se fue eliminado en el minuto 33 y Costello y Khalifa acumulaban cuatro en su haber. Cuestión delicada y que tuvo que demostrar como moverse en el alambre.

Finalmente el aeroplano de California también finalizó el partido en el banquillo, cuestión que supieron solventar la nave claretiana hasta el 76-94 con el que el Herbalife mantiene el pulso a la clasificación y continúa segundo en la tabla con tres victorias y una derrota.