El Herbalife Gran Canaria continúa con la reestructuración a marchas forzadas de su plantilla, después de que el entrenador Porfi Fisac, como él mismo reconoce, se equivocara en la confección inicial de la misma y las salidas de hombres que a priori iban a ser importantes, como el italiano Amedeo Della Valle, el primero en hacer las maletas, y Frankie Ferrari, quien se desligaba del club el pasado viernes para luego firmar un contrato temporal con el Unicaja.
Tras la vuelta al redil de Javi Beirán, apartado hasta hace una semana por el técnico, y los fichajes de A.J. Slaughter, para reforzar el perímetro, y de Oliver Stevic, para fortalecer el juego interior, el Granca anunciaba un día después de la importante victoria cosechada ante el Fuenlabrada dos operaciones del tirón.
Una de entrada y otra de salida, en principio provisional pero con tintes de definitiva. Llega a la Isla el escolta norteamericano Sean Kilpatrick y se marcha a su país, Estados Unidos, el pívot Jacob Wiley, con quien se cerraba también ayer un acuerdo para la suspensión temporal de su contrato.
El nuevo integrante del plantel amarillo ocupará la plaza de extracomunitario que deja vacante el interior, que vuelve a su tierra natal para recuperarse de las consecuencias de la Covid-19, virus contraído hace unas semanas cuando iba a estrenar su recién conseguido pasaporte comunitario con la selección de Macedonia del Norte.
“El club le desea la mejor de las suertes en su recuperación física y anímica, deseando que se produzca lo antes posible, y aguardando su pronta reincorporación a la dinámica amarilla”, rezaba el comunicado emitido desde la entidad claretiana.
Por lo que se refiere a Sean Kilpatrick, si todo sale según lo pautado, el jugador de incorporará el jueves en Madrid a la expedición del Granca, que juega el miércoles en Italia frente al Dolomiti Energia Trento el último encuentro de la primera fase de la Eurocup, donde los amarillos se juegan pasar a la siguiente ronda como primeros de su grupo. Tras someterse a las pruebas de detección del coronavirus y pasar el pertinente reconocimiento médico, viajaría junto a sus compañeros a San Sebastián, donde el sábado la escuadra de Porfi Fisac tiene otro compromiso vital ante un rival directo de la zona baja de la tabla, el Gipuzkoa.
El escolta norteamericano llega procedente del Tofas Bursas turco, con el que había promediado en los diez partidos que había jugado 18,4 puntos, cuatro rebotes y 3,3 asistencias en 32 minutos de media por encuentro.
Se trata de un jugador con experiencia en la NBA. Tras un buen rendimiento en su etapa universitaria con Cincinnati, no fue elegido en el draft de 2014. Pero no tardó en encontrar acomodo en la liga. En cuatro temporadas, entre 2014 y 2018, disputó 157 partidos pasando por Minnesota, Denver, Brooklyn, Milwaukee, Los Angeles Clippers y Chicago. El curso 2016-17 firmó su mejor temporada promediando 13,1 puntos, cuatro rebotes y 2,5 asistencias en 25,1 minutos con Brooklyn.
En enero de 2019 daba el salto a Europa de la mano del Panathinaikos griego. En el continente europeo, además de la del cuadro heleno, ha defendido la camiseta del Buducnost de Montenegro y del ya mencionado Tofas Bursa turco.
En cuanto a Jacob Wiley, el club se quita de encima momentáneamente a un jugador al que ya se le buscaba salida. El Granca esperaba que al debutar con Macedonia y convertirse en comunitario tendría más opciones de colocarlo en el mercado. Pero cogió el coronavirus y su debut con los macedonios se retrasa, en principio, a febrero en la segunda ventana FIBA.
OPERACIÓN DE ENTRADA Y SALIDA
Continúa la renovación en la plantilla del Herbalife Gran Canaria ante la necesidad acuciante del conjunto isleño de revertir su pésima situación clasificatoria en la Liga Endesa, aliviada un poco tras ganar al Fuenlabrada. Este lunes se comunicaba una doble operación. Llega Kilpatrick (6 de enero de 1990, Yonkers, Nueva York). El escolta vestirá la casaca amarilla, que cuelga temporalmente Wiley, que se va a su país por ahora a recuperarse del virus.
