Lo del Herbalife ya no se sabe por donde coger. En Fuenlabrada firmó una de las peores actuaciones de la temporada y volvió a encajar otra derrota por encima de la centena (102-81) para alcanzar la decimotercera en la Liga Endesa.
La derrota es más dolorosa aún contra el conjunto madrileño porque supone que los de Fisac ceden el basket-average con el Fuenla, después de que en la primera vuelta vencieran por 16 puntos y ahora hayan perdido por 21.
Leo Meindl, con 44 de valoración, tras 28 puntos, 11 rebotes, 5 asistencias y 4 robos, fue un rodillo para la confianza del Granca, que aguantó hasta el minuto 15 con opciones de sacar un triunfo en el Fernando Martín. Los últimos 25 minutos fueron escandalosos, con un parcial 68-47, y una actitud impropia de un equipo construido con un presupuesto por encima de los 8 millones de euros.
Una de las claves del encuentro recaería en el papel de los bases insulares frente al máximo anotador de la Liga Endesa, Melo Trimble. En el choque de la primera vuelta al director de orquesta fuenlabreño le consiguieron desquiciar entre Albicy y AJ Slaughter para que cometiera cinco pérdidas. Desajustando al americano, media victoria estaría conseguida.
Precisamente el francés comenzó dando una de cal y otras de arena, como suele acostumbrar en lo que va de temporada. Si bien cometió dos pérdidas en apenas un minuto -acumuló tres en el primer cuarto-, también tiró del carro para coger la delantera por primera vez en el partido con un triple para poner el 8-10 en el luminoso.
“Melo, más defensa, no puedes quedarte mirando el rebote tampoco”, Javi Juárez quería mayor compromiso de su estrella, desacertado en los compases iniciales y teniendo el Fuenlabrada que mantenerse en la brega gracias a la aportación de los hombres de banquillo y un enchufado Christian Eyenga.
Concluyó el primer episodio con 22-21 después de un triple a una pierna de Jovan Novak. El juego insular se basaba en el acierto de AJ Slaughter y a su efervescencia. 8 puntos para el polaco, aunque con dos tiros libres errados, una de los aspectos que tiene que mejorar el Granca y que le ha costado partidos durante la temporada -14º en la Liga con un 73,1% de acierto-.
Cara y cruz en lo que se había jugado entre AJ, con 17 puntos antes del descanso, y Melo Trimble, en el fondo del banquillo sin poder sumar créditos a su tarjeta. Cariacontecido desde la banqueta, al igual que Olek Balcerowski, calentando asiento tras sumar dos faltas rápidas. El canterano todavía le falta por ganarse el respeto de los árbitros para que no le sancionen roces con sus rivales.
Abusaba del tiro de tres el Herbalife para competir el partido. 18 lanzamientos en la primera parte, con 6 anotados -3 de AJ-; por parte de los madrileños, más acertados metían 6 en sus 11 primeros intentos -3 convertidos por Cheatham.
Los últimos cinco minutos del segundo cuarto fue un páramo para los claretianos. Desde el último triple de Slaughter, solo sumó dos puntos más en su haber, con tiros libres de Albicy, mientras el Fuenlabrada le regalaba un parcial 12-2 con el que cerrar la primera parte gozando de un colchón de 10 puntos (46-36).
Meindl, MVP
El fondo de armario de Juárez estaba triturando al Granca en la primera parte. 31 puntos de los jugadores menos utilizados por el técnico que forjó a Luka Doncic en categorías de formación del Real Madrid. Si el scout de Fisac había estudiado como frenar a Trimble, Novak, con 8 puntos le estaba supliendo a las mil maravillas.
“Paciencia chicos, máximo orgullo en defensa, no tenemos carácter para defender el 1 contra 1, pues vamos a ponernos en zona”. Fisac paraba el partido para intentar frenar la sangría que estaba sufriendo su equipo. Pero entre el acierto de los madrileños, que parecían un conjunto de Playoff, y el poco amor de los claretianos, la paliza estaba siendo de órdago con todavía 15 minutos por jugar y la diferencia aumentando minuto a minuto.
La siguiente mitad del cuarto solo sirvió para reafirmar la confianza del Fuenlabrada y que pusiera la máxima diferencia a su favor en 25 puntos (75-50) y ya la sensación por entonces era de que el Granca debería pelear por mantener el basket average (+16 en la primera vuelta) con un equipo que dado como está el equipo insular puede resultar uno de sus rivales por la parte baja.
Leo Meindl tuvo gran culpa del estado de ánimo en el que se gustaba su equipo. Con 33 de valoración en 25 minutos jugados antes del último cuarto, sumaba 19 puntos, 10 rebotes, 3 asistencias y 4 robos. Superaba así todos sus topes estadísticos en la ACB.
Al brasileño le salía todo lo que pretendía y no dejaba que el Herbalife se enganchara al encuentro. La desesperación era máxima entre los jugadores insulares, que por mucho que lo intentaran, se chocaban contra una pared de hormigón armado. Miedos, dudas, nervios, todo negatividad para un conjunto que vuelve a estar hundido en moral.
Consiguió bajar el Granca por primera vez de los 20 puntos tras un largo tiempo en la lucha por mantener la dignidad sobre la cancha. Lo consiguió por un instante con un triple de Albicy (86-67), pero todavía quedaba más vergüenza que asumir hasta el pitido final.
Si pudo igualar el average en los últimos segundos el conjunto amarillo tras un intento de triple de AJ Slaughter al robar un balón en media cancha, la negatividad que rodea a este equipo evitó la canasta y acto seguido anotó el Fuenlabrada para poner el definitivo 102-81 y que los madrileños se coloquen a un triunfo, con el parcial favorable en caso de un desempate final. ¡Ojo!
- Ficha técnica:
102 - Urbas Fuenlabrada (22+24+29+27): Trimble (2), Emegano, Meindl (28), Eyenga (9), Alexander (8) -quinteto inicial-, Sharma (13), García (10), Novak (11), Urtasun (4), Cheatham (17) y Samar.
81 - Herbalife Gran Canaria (21+15+17+28): Albicy (13), Dimsa (3), Okoye (6), Shurna (6), Stevic (5) -quinteto inicial-, Slaughter (23), Kilpatrick (9), Balcerowski (2), Beirán (8), Burjanadze (6) y Diop.
Árbitros: Carlos Cortés, Jordi Aliaga, Joaquín García. Eliminado por cinco faltas personales el local Josh Sharma (min. 35)
Incidencias: partido de la vigésima primera jornada de la Liga Endesa disputado en el Pabellón Fernando Martín de Fuenlabrada sin espectadores por la pandemia de coronavirus.
