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Cambios en el Granca: Savané presidente, Juan Díaz, vicepresidente

La destitución de Enrique Moreno, en la presidencia desde 2017, abre la nueva etapa en el club que explica hoy Antonio Morales | Miguel Ángel Pérez del Pino se encargará de la gestión económica del club

Taph Savané en las instalaciones del Gran Canaria Arena

Ahora sí. Se acabó la era de Enrique Moreno al frente del CB Gran Canaria. Llega el fin de lo que hubiera significado una gestión inasumible en cualquier empresa privada. Solo el empeño de Antonio Morales por mantenerle en lo más alto de la cúspide de la directiva le alargó la vida un último año después de haber creado el mayor agujero económico de la historia del club con 1,8 millones de euros y que con una nueva condena de 1,4 millones este curso ha terminado por derribar su pirámide. Empieza la gestión de Sitapha Savané, llegan nuevos aires y una capacidad gestora con mimbres.

Decisiones tomadas en el reino de los cielos cabildicios. Con el adiós de Enrique Moreno se va también Francisco Castellano. El consejero de Deportes y por tanto titular de la Fundación Canaria del Deporte y dueño del club, acepta dar un paso a un lado por orden del PSOE y entra en acción Juan Díaz para intentar arreglar el desaguisado que se ha gestado en el Granca en las dos últimas temporadas. Miguel Ángel Pérez del Pino se encargará de la gestión económica del club.

El Instituto Insular de Deportes tuvo que inyectar 1,8 millones en 2021 para tapar todas las deudas

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Aun así, el consejero de Deportes mostraba desconcierto ayer y evitaba pronunciarse al respecto de tal decisión. Castellano nunca ha negado que el Granca le ha supuesto un quebradero de cabeza en su legislatura y con el empujón que le dan desde su partido político para poner a Pérez del Pino en su lugar acepta su incapacidad para hacerse con el control del club en detrimento de un Moreno que siempre actuó como telón de acero en el pacto político entre PSOE y Nueva Canarias.

Ahora, con la figura de Savané en el plano de la gestión deportiva, codo con codo con Pérez del Pino se comienza a hablar de un proyecto que caminen de la mano entre la parte política y la deportiva. Dos hombres que controlarán la gestión financiera al frente del club. Un acuerdo entre directiva y Cabildo para caminar en un mismo sentido. Se acabaron las bicefalias y los enfrentamientos, llega la concordia para sentar las bases de un proyecto sólido y comenzar a tomar decisiones drásticas por el bien del Granca.

Moreno, un superviviente

La espada de Damocles ha estado continuamente pendiente del cuello de Enrique Moreno desde que Ángel Víctor Torres, por entonces consejero de Deportes le colocó como presidente al frente del Granca. El ahora mandamás del gobierno canario aceptó que fuera el primer presidente de la historia del club que cobrase y al final la factura le está saliendo cara al contribuyente insular.

Siempre cuestionado, Moreno pasará a la historia del club por haber sido el presidente del Granca que en los cinco cursos que estuvo al frente de la entidad, en tres de ellos dejó pérdidas millonarias y otra la salvó gracias a que la temporada tuvo que suspenderse a mitad de la misma por la irrupción del covid-19 cuando todo apuntaba a que la cuenta saldría con números rojos.

En total, 4 millones de déficit repartidos en los 800.000 euros con los que se excedió en 2019 y que el club pudo asumir gracias a los fondos propios del mismo y perdiendo un 22% de su valor; el desfase de la temporada pasada con 1,8 millones de euros después de que confeccionara un presupuesto que no se ajustaba a la realidad que vivía la sociedad; más los 1,4 millones de euros que se calcula actualmente después de cometer los mismos errores del pasado e hipotecar la entidad a la venta de unos jugadores que todavía permanecen en las dependencias del Granca.

Todo ello se recordará con el eslogan con el que llegó a la presidencia. «No aceptaré bajo ningún concepto que el incremento presupuestario proceda del Cabildo», pronunció en 2018 antes de que el equipo se dispusiera a competir en la Euroliga tras recoger los frutos de la gestión anterior con Miguelo Betancor en su puesto. 

Tres meses después de esas palabras llegaba el primer dopaje del erario público procedente del Patronato de Turismo con una inyección de 600.000 euros. 

Esa temporada 2018-19 se cerró con la pérdida del valor del club tras despellejar los fondos propios para cubrir los 800.000 euros de déficit tras una retahíla de jugadores utilizados en el curso, récord de la entidad con 21.

Además de que ya ahí una subida salarial de Enrique Moreno del 21% respecto a la temporada anterior alcanzando los 4.100 euros mensuales levantó escamas entre los miembros del consejo de administración del club.

Miguel Ángel Pérez del Pino, vicepresidente del Cabildo de Gran Canaria.

Pero sin ninguna duda el mérito que tiene Moreno es el de haber sobrevivido a todas las decisiones que ha tomado a «asumido» como él mismo ha utilizado para excusarse ante determinaciones que pudieron hacer desaparecer al club en estos cinco años.

La más surrealista de todas fue cuando casi entrega el club al fondo de inversiones fantasma HMK Holdings. El 8 de mayo de 2019 salió a la palestra para anunciar a bombo y platillo que se iba a proceder a la venta de parte del club con un comienzo de patrocinio publicitario de un millón de euros. Cinco días después la operación se fue al traste después de que este periódico destapara la inexistencia del fondo económico y Arthur J. Lewis nunca apareciera en escena. 

A pesar de ello en las auditorías de las cuentas de la entidad sigue apareciendo el fondo fantasma denominado como deudor de dudoso cobro y Enrique Moreno mantuvo hasta el último día que él se iba a encargar de cobrar ese dinero firmado.

Tal fue la magnitud de los hechos y el hazmerreír público de lo que supuso no haber ni investigado con quien se iba a relacionar a la marca Granca que ahí Moreno estuvo a punto de concluir su etapa como presidente después de que el tándem que iban a formar Ariel Ortega y Manuel Sánchez tuviera en sus manos la posibilidad de controlar el club. 

Finalmente Enrique Moreno sobrevivió al cisma después de que el tándem se rompiera por desavenencias entre ambos y el PSOE aceptara su continuidad con tal que el pacto de gobierno en el Cabildo no se viera afectado.

En 2020, la entidad pasó de deber 600.000 euros a rozar los 2 millones en apenas un curso

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Una vez superado el primer strike arrancó la temporada 19-20 y ya en enero la situación era crítica con retrasos en los impagos a los jugadores y empleados del club hasta que una carambola financiera le salvó el resultado tras la irrupción maldita del coronavirus para saldar la campaña con un superávit de 33 mil euros.

Sin embargo, el despido improcedente de Fotis Katsikaris, ya juzgado y con sentencia favorable al griego se saldó con un pago de 328.291 euros, otro agujero negro en la gestión de la era Moreno, que si bien por entonces se brindó como algo positivo dos años después se convirtió en una deuda, al igual que los 95.000 euros que se le deben a Berdi Pérez.

A pesar de ello lo peor estaba por llegar, pues con el adiós de Berdi Pérez y la llegada de Willy Villar y Porfi Fisac al club se sembró la semilla de una de las peores etapas de la historia del club en cuanto a las relaciones internas del aparato directivo y deportivo.

La sola confección de la temporada y el presupuesto imaginario que se aprobó en el consejo de administración a pesar de las advertencias por parte de la oposición del grupo de gobierno del Cabildo resultó en lo que todo el mundo esperaba que ocurriese con unas previsiones de taquillaje y abonados imposibles debido a la persistencia del coronavirus e incluso con la variante ómicron en ciernes de impactar en la sociedad.

La disolución, evitada

Así pues con el desarrollo de la temporada 2020-21 el déficit se elevó hasta los 1,8 millones de euros, una cantidad monetaria que tuvo que asumir el Instituto Insular de Deportes para evitar que el club entrara en causa de disolución. El Cabildo tuvo que abrir una línea de crédito extraordinario para salvar al club. Una situación que no era nueva en el Granca.

La causa de disolución ya amenazó a la entidad claretiana en 2002, cuando Moreno ostentaba el cargo de vicepresidente del club con responsabilidades económicas y el Granca evitó la causa después de que el Cabildo acudiera al rescate -como siempre- después de que le concediera la concesión de la Vega de San José en usufructo durante 50 años.

Así, el club, en 2021 tuvo que solicitar un adelanto de la subvención del ente insular de cara a la siguiente temporada para poder disponer de liquidez una vez más y con retrasos en impagos a sus empleados. Una situación a la que Moreno quiso referirse como «tiranteces» y «modificación en la forma de pago».

Todo ello aderezado con la pérdida del patrocinio principal de Herbalife de la primera plantilla del club. Incapaces de retener a la firma alimenticia, Enrique Moreno también explicó este adiós porque los californianos «continuarían en otra esfera». La pérdida de ese músculo financiero se tradujo en 450.000 euros menos por cada temporada.

Sin encontrar ningún patrocinio principal para la última campaña y torpedeadas las negociaciones con Lopesán, el club compitió la pasada temporada sin naming más allá que el del propio club y con el fantasma de Isla Europea del Deporte como solución a la incapacidad en el apartado de márketing.

Por todo ello el Granca tuvo que asumir una deuda a corto plazo triplicada en tan solo un año. De 600.000 euros que debía en 2020 pasó a tener que pagar 2 millones debido a una línea de crédito y un adelanto de otros 800.000 euros al Cabildo.

Así y con las cuentas del último curso todavía por cerrar, la previsión con todas las decisiones tomadas es de que contrajo una deuda de 1,4 millones, a expensas de poder acrecentarse. Por ello y sin más excusas con las que convencer al Cabildo, la etapa de Enrique Moreno llega a su fin y empieza la era Sitapha Savané.

Cronología 

21 de septiembre 2017

  • Es nombrado presidente del Granca, el primero remunerado, tras el paso de Óliver Armas y Miguelo Betancor. Comienza la era Enrique Moreno


1 junio 2018

  • El Granca se clasifica para la Euroliga y aparece en la foto de celebración junto al equipo en el vestuario tras ganar en la prórroga al Valencia Basket. Un forofo más.


17 junio 2018


  • «No aceptaré que el Cabildo incremente el presupuesto bajo ningún concepto». El 25 de septiembre anunciaba una inyección de 600.000 euros del Patronato de Turismo del Cabildo.


28 de octubre 2018


  • Comienza el malestar en el Consejo de Administración por su subida salarial, un 21% respecto al año anterior, alcanzando los 4.100 euros. Es el primer presidente remunerado en la historia del Granca. Su salario iba relacionado al presupuesto de la entidad.


8 mayo 2019


  • Anuncia un acuerdo de patrocinio con el fondo fantasma HMK Holding. El 13 de mayo el fondo se retira. Todavía se espera el millón de euros en las auditorías del club. La marca Granca fue el hazmerreír tras las negociaciones.


25 junio 2019


  • Tensa la relación con la Euroliga y le deniegan al club la invitación para jugar la Eurocup 2019-20.


18 septiembre 2019


  • El PSOE acepta que siga como presidente para no poner trabas al pacto en el Cabildo con Nueva Canarias después de que el tándem Ariel Ortega-Manuel Sánchez se rompiera por desavenencias entre ellos.


12 diciembre 2019


  • Cubre el déficit de 800.000 euros con fondos propios. El club pierde un 22% de su valor patrimonial


25 junio 2020


  • Berdi Pérez despide a Katsikaris con el club jugándose la vida en la fase excepcional. Opta por el silencio


2020-21


  • Niega retrasos en los pagos en las nóminas y tilda la falta de liquidez como «tirantez». Pide un adelanto de la subvención al Cabildo. Herbalife rebaja su patrocinio en 450.000 euros. Deja un déficit de 1,8 millones. Sin relación con Willy y Porfi.


25 junio 2021


  • El Cabildo emite una línea de crédito extraordinario para evitar la causa de disolución de la entidad después de que el Granca debiese 1,8 millones de euros.


29 junio 2021


  • El Cabildo no da el paso para destituir al presidente del Granca mientras continuaba buscando a su sustituto como plantearon en un consejo de administración


19 de diciembre 2021


  • El club asume que ha pasado de deber 600.000 euros a finales de 2020 a rozar los dos millones. Triplicaba así su deuda a corto plazo en solo un año después de pedir un préstamo, la línea de crédito extraordinaria y un adelanto de 800.000 euros del Cabildo.


2021-22


  • Su último servicio fue el de presionar para que Porfirio Fisac no continuara como entrenador del Granca al ganarle la batalla a Willy Villar, con el que tuvo que ceder y ampliarle su contrato dos temporadas más. Aun así, en la esfera económica el curso apunta a que se cerrará con un déficit de 1,4 millones de euros después de que Khalifa Diop, Olek Balcerowski y Jean Montero no hayan ido a la NBA y sus ventas no solucionaran el hueco económico.


25 de agosto 2022


  • El Cabildo se harta de Enrique Moreno y acuerda que Sitapha Savané sea su sucesor en el cargo de presidente, a la vez que Miguel Ángel Pérez del Pino asume la vicepresidencia del CB Gran Canaria.


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