El ladrido del Granca se impone al rugido del Lions (57-60)

Los claretianos certifican la clasificación para octavos de final tras vencer en Londres y sumar su décimo triunfo en la Eurocup

John Shurna lanza un tiro libre frente al London Lions

John Shurna lanza un tiro libre frente al London Lions / Eurocup

David Rodríguez

David Rodríguez

El Granca está en los octavos de final de la Eurocup gracias a su triunfo frente al London Lions por 57-60 en un choque que no fue “bonito” para el espectador canario que se acercó al Copper Box para apoyar a los insulares, tal y como definió el partido Jaka Lakovic a la conclusión del mismo. Décimo triunfo en Europa y el liderato más que asentado tras la derrota del Turk Telekom ante el Hapoel Tel Aviv y aventajar ahora en dos victorias a los dos equipos, que son precisamente sus perseguidores.

Encima, Sam Dekker tuvo la oportunidad de mandar el partido a la prórroga con un triple final que erró para alivio claretiano, que se había metido en problemas tras no anotar una sola canasta en los últimos cuatro minutos hasta que Nico Brussino rompió el parcial 7-0 con el que dar un poco de tranquilidad hasta el fallo londinense.

El porcentaje de acierto del encuentro dejó que desear y fue el fiel reflejo de un marcador tan corto. 37% en tiros de dos (13 de 35) y 26% en triples (siete de 26), además de totalizar 17 pérdidas ante un rival que dejó claro que no pudo aprovechar tantas concesiones insulares.

Y ya había advertido Jaka Lakovic a sus jugadores en la previa del encuentro frente a los británicos de que tenían que jugar al 100%, que no podían bajar la guardia en cuanto a la intensidad después de festejar la clasificación copera en la competición nacional el fin de semana pasado y ese fue el mayor reto con el que se encontraron los jugadores insulares, pues la superioridad que posee sobre la plantilla rival era más que patente. No sólo en la clasificación continental, sino por la confección de la plantilla y la profundidad del banquillo.

Con el hándicap de tener que exprimir al máximo la energía de los ex NBA como Kousta Koufos o Sam Dekker, las dos grandes bazas londinenses, la resistencia que le ofrecieran a la escuadra claretiana iba a tener que poner mucho de su parte en el arranque del partido y ofrecerle dudas a los insulares. El primero anotó 15 puntos y capturó 11 rebotes en más de media hora; y el ex de los Rockets sumó 18 puntos y 6 rebotes en 36 minutos.

Nueve de los once puntos del primer cuarto fueron de los dos espadas de Ryan Schmidt –entrenador de los Lions– , el devenir del encuentro ya iba a quedar en sus manos frente a toda la plantilla del Granca. Quienes se repartieron los 17 del inicio sin que ninguno de los hombres amarillos sobresaliese en demasía, más allá de los cinco de John Shurna, quien se erigió el hombre más destacado de los insulares con 13 puntos a la conclusión del encuentro.

Rotación

Tanta rotación dispone Jaka Lakovic en su plantel, que en los partidos de la Eurocup se puede permitir darle minutos a los jugadores que menos protagonismo tienen durante la temporada. Así, Jovan Kljajic volvía a sentir lo que es el ritmo de competición y saltaba a la pista después de su última aparición, el 11 de enero frente al Slaks Wroclaw.

Además, el esloveno se pudo guardar a Andrew Albicy en la participación de la duodécima jornada de la Eurocup dado que a Badalona viajaron catorce jugadores, con Rubén López de la Torre y David Mutaf en la expedición claretiana y así pudo este último se parte de la partida en el Viejo Continente, donde Lakovic le da oportunidades al turco.

No fue la mejor de las primeras partes que ha desarrollado el Granca en lo que va de temporada. Y es que si fue por delante en el marcador fue precisamente porque delante tenía a un rival de calado menor. El acierto en el lanzamiento brilló por su falta de efectividad y solo había que mirar el apartado de tiros libres locales para percatarse la falta de puntería: cinco anotados en catorce lanzamientos.

Una tónica de fallos que se contagió a ambos equipos en prácticamente todos los apartados. Nueve de diecinueve en tiros de dos para los locales, por ocho de veintiuno insular; y uno de nueve en triples londinenses, por tres de catorce claretianos. El último, convertido por John Shurna para sumar su décimo punto y reflejar un escaso 26-32 en el luminoso del Copper Box antes de marcharse a vestuarios.

Precisamente el ala-pívot claretiano indicó en la entrevista del descanso que para sumar su décimo triunfo de la fase de grupos debían “seguir moviendo el balón” tal y como lo estaba haciendo el Granca “y mantener el nivel defensivo”, para así “inclinar la balanza” a favor amarillo en la segunda mitad.

Más acierto

“Hay que poner más energía en la zona defensiva y aprovechar las opciones ofensivas que nos permite el rival”, indicó Ryan Schmidt antes de iniciar la segunda mitad. El técnico del conjunto británico sabía que el Gran Canaria no se estaba desplegando con la mayor de su potencialidad e intentaría poner en apuros a los insulares al regreso de la caseta.

“Tenemos que mantener la fuerza defensiva y seguir reboteando como estamos haciendo. Tenemos que buscar los tiros abiertos para nuestros lanzadores”, añadió el técnico esloveno sobre su lectura de los primeros veinte minutos de juego.

En esta línea de las palabras del balcánico, necesitaba el Granca del acierto de AJ Slaughter y Vítor Benite, ambos con 1 de 6 en lanzamientos (un triple) y cero de cinco (tres de dos y dos triples). Sin las canastas de sus escoltas, los puntos no iban a caer como churros ante un rival que invitaba a darle una paliza con tanto error en su juego.

Slaughter sí le hizo caso a su técnico y se destapó con cinco puntos en el cuarto y sin apenas forzar su lanzamiento exterior, sin embargo el brasileño, que se muestra más suelto en su rendimiento en la competición continental, seguía sin encontrar su tiro y solo anotó un tiro libre para llevar tres puntos a la conclusión del tercer periodo.

Una sintonía que cuajó el propio Granca, incapaz de imponer su superioridad frente a un London Lions que seguía fallando y fallando tiros y solo se mantenía en la pelea gracias al coraje de Sam Dekker con sus 14 puntos para seguir vivos con el 40-51 con el que se encaró el último cuarto.

Errores

Los errores bosquejaron la totalidad del encuentro. Tantos como el que le dio por perpetrar Damien Inglis en el ecuador del último gajo de la naranja. El de la Guayana Francesa se le peló el cable, al igual que hizo la temporada pasada con la camiseta del Bilbao precisamente frente a su actual club. Tras una pérdida entró en cólera y la tomó con los árbitros.

Protestas y más protestas que le valieron dos técnicas y directito al vestuario eliminado y concediéndole dos tiros libres al London además de mantener la posesións. Unos puntos gratis con los que el los británicos se asentaron en un parcial 10-3 con el que no quería dejar de creer para intentar dar la campanada (50-55).

Entró en una situación comprometida el Granca después del show de Inglis. Las dudas por un momento arreciaron y los claretianos se metieron en problemas en los últimos cuatro minutos de juego, cuando el Lions se puso a tiro de piedra para igualar la contienda. Una vida extra que le había puesto en bandeja de plata el conjunto amarillo porque él mismo quiso, no por mérito londinense.

Siete errores seguidos en cuatro minutos permitieron a los de casa firmar un parcial 7-0 para ponerse 57-58 y dejar cariacontecidos a los insulares a escasos cinco segundos del final del encuentro, momento en el que Nico Brussino deshizo el intervalo negativo con dos aciertos desde la línea de 4,60 metros y certificar el triunfo amarillo.