Morales: «Este título hace que Gran Canaria avance»

El Cabildo de Gran Canaria, con su presidente Antonio Morales a la cabeza, recibió ayer en su sede al CB Gran Canaria para celebrar la consecución de la Eurocup el pasado miércoles tras vencer en la final del torneo al Turk Telekom. El ente insular, que a su vez es el propietario del club deportivo, quiso reflejar a través de su máximo representante que la consecución del título «hace que la Isla avance» en la línea de llevar el nombre más allá de las fronteras para «asentarse en Europa».

Con la llegada de la guagua que trasladaba al equipo a la Casa Cabildo sobre las 12.30 horas de la mañana de ayer, empezaron a romper los primeros aplausos de la mañana a unos héroes que han llevado el orgullo de Gran Canaria fuera de la pista. «Mira, esos son los que ganaron ayer», decía una transeúnte a la que debía ser su nieta por la diferencia de edad. Un sentimiento de orgullo que inundó el edificio capitalino junto a sus trabajadores que no dejaban de inmortalizarse con los jugadores y a los que les brindaron numerosos reconocimientos verbales y vítores.

El primero en coger la palabra para poner de relieve el significado de la conquista del primer título continental de la historia del club fue el propio Morales, que iniciaba su discurso con humor al excusar «los ojos chiquititos» que tenían los jugadores en el acto matutino: «Se merecen todo, seguro que en la celebración se lo pasaron muy bien», exclamó.

Acto seguido, defendió la labor del Cabildo «por sostener al club tras los malos momentos de los últimos años», y por ende sacó pecho por las decisiones tomadas «hace ocho meses». «Veíamos que la sociedad demandaba un cambio en la dirección, propiciamos el cambio con Miguel Ángel Pérez y ha supuesto un revulsivo en la parte profesional», sentenció para agradecer a Sitapha Savané sus logros prematuros al frente del club –además de por hacerle de «guardaespaldas en su enfrentamiento con el presidente del rival, el Turk Telekom turco–.

Celebración de la Eurocopa del CB Gran Canaria en el Cabildo grancanario

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El senegalés rememoró las palabras que transmitió a la afición cuando se retiró su dorsal a lo más alto del pabellón. «Recuerdo que le dije a la afición que confiara en el grupo y que con el apoyo de la grada íbamos a ser felices. La gente respondió en estos partidos y ha llenado el Arena. Nos han callado la boca porque yo era de los que decía que el pabellón era demasiado grande y ayer –por el miércoles– se demostró que se quedó hasta pequeño», admitió.

Asimismo, el presidente remarcó que el Granca no es un club «normal» porque va más allá de los resultados deportivos y tiene la responsabilidad de «ser embajadores de la Isla». Lo que lo trasladó a la plantilla, de la que espera «que sientan Gran Canaria como su segunda casa» y pase igual que se hizo con él a denominarlo como hijo adoptivo. Además de poner el foco en dos productos de la Vega de San José como Olek y Khalifa y a los que les mandó un mensaje claro de cara al futuro: «Espero que sigan mucho... muchísimos (haciendo énfasis) años aquí».

Finalmente, el último en coger el micrófono en la recepción cabildicia fue el entrenador del equipo Jaka Lakovic, que si bien quiso dejar claro que no le gusta hablar «mucho» en público, aprovechó para engrandecer el impacto de la conquista de la Eurocup «por lo que se construye alrededor de la sociedad y la enseñanza que supone para ella el camino que ha recorrido el equipo hasta la final».

Además, hizo un guiño a los jugadores, entrenadores y directivos del pasado. «Sin ellos nada de esto hubiera sido posible haberlo logrado hoy, son parte de la historia del club y son partícipes de este título», sentenció.

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