Aldama y los nuevos galones

Corría el verano del año pasado cuando la selección española de baloncesto se presentó en el Eurobasket en pleno proceso de reconstrucción después de la última hoja de servicio de los hermanos Gasol en los Juegos Olímpicos de 2021. Con un perfil bajo y con Rudy Fernández como el único integrante de la vieja hornada triunfal, el equipo de Scariolo se alzó con la medalla de oro continental. Ahora, un año después, España ha caído eliminada antes de los cuartos de final del Mundial 2023 y la duda que se disipó hace un año con el triunfo europeo vuelve a escena sobre la nueva savia.

En este sentido, Santi Aldama, que el año pasado descartó ser parte de la selección española para centrarse en su eclosión con los Memphis Grizzlies, se ha erigido como la gran esperanza para la próxima década en las filas del conjunto nacional en el estreno con la camiseta absoluta.

En un debut con los focos mundiales puestos sobre su rol en la rotación de Sergio Scariolo y que ha demostrado que a pesar de tener que ganarse el puesto de titular en la selección en su lucha directa con Juancho Hernangómez, es uno de los líderes del equipo nacional junto al hermano de este.

Hay juego interior para rato entre Aldama y Willy, aunque todavía falta por terminar de completar la regeneración de la selección con los adiós definitivos de Sergio Llull y Rudy Fernández, que aguantarán hasta la posible participación de España en los Juegos Olímpicos de París si acceden por la vía del preolímpico.

Así pues, con la regeneración en ciernes dentro del vestuario de La Familia y el papel que ha jugado Aldama en los cinco partidos disputados hasta la fecha en el Mundial hasta caer eliminados, se vislumbra un futuro en el que el ala-pívot grancanario tiene los galones de líder en su mano.

De menos a más

El debut con la absoluta de Aldama en torneo oficial dejó un papel tímido. «No salió como hubiese gustado, por supuesto, pero al final conseguimos la victoria, que es lo más importante», transmitió el jugador formado en el Colegio Canterbury sobre su primer partico contra Costa de Marfil, en el que anotó 8 puntos y 5 rebotes.

Ya contra Brasil en el segundo choque del torneo se destapó con una actuación destacada en el momento justo para sellar el billete de la selección a la segunda fase del Mundial. Ahí, el insular alcanzó los 15 puntos, con los mismos 5 rebotes, y además anotó su primer triple en Yakarta.

Contra Irán, en un partido en el que España ya estaba clasificada para el grupo que equivale a los octavos de final, Aldama se quedó en 11 puntos, además de rubricar 8 rebotes –cuatro de ellos en el aro del combinado asiático–.

Llegada la hora de la verdad se pudo vislumbrar la importancia que tiene Aldama en la pista de juego. Contra Letonia, en el primero de los dos partidos que España debía disputar en la segunda fase, Scariolo solo le dió ocho minutos de juego. 2 puntos y 1 rebote y primera decepción del combinado nacional, con un Hernangómez que se iba diluyendo.

Pero con el último envite, en el que la selección dijo adiós a los cuartos de final, quedó claro que Santi es una de las piezas determinantes de este equipo. Scariolo se dio cuenta de que tenía que echar mano del grancanario y le dio 25 minutos, al salir a pista casi al final del primer cuarto y empezar a meter canastas hasta los 20 puntos, gracias cuatro triples. España perdió, pero Santi ganó galones.

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