Cualquier vecino del norte de Gran Canaria conoce el apellido y muchos incluso conocieron a mister Leacock, pero muy pocos saben que su hijo Richard, fallecido el pasado mes de marzo, fue uno de los documentalistas más prestigiosos del mundo e inició su carrera detrás de la cámara en las plataneras de Santa María de Guía y Gáldar. Para recuperar su figura, los Mayordomos de las Marías han incluido en la fiestas de este año un homenaje a Ricky Leacock, como le conocían sus amigos de Becerril. Esta noche, a las 20.00 horas en el teatro Hespérides de Guía, se proyecta el documental Canary Bananas, realizado en el año 1935 en las fincas familiares del Agujero de Gáldar y el edificio del Sindicato Agrícola del Norte en Guía.

Gustavo Álamo, mayordomo de las Marías e investigador del papel de los Leacock en el desarrollo agrícola de la isla, lamenta el desconocimiento de los grancanarios sobre este "personaje de película", pero confía en que este homenaje sirva para llamar la atención sobre "su apasionante vida y su brillante obra", que incluye una veintena de grandes documentales sobre historia, naturaleza, guerras, música o política.

Ricky Leacock nació en Londres el 18 de julio de 1921, pero vivió en Becerril de Guía hasta los ocho años, en la casa de sus padres junto a sus hermanos Lizipita, Felipito y Ursulita. A esa edad fue enviado interno a estudiar a Londres, al Dartington Hall School, donde coincidió con las hijas del prestigioso documentalista Robert Flaherty.

A los 11 años, un profesor le mostró una película muda titulada Turksib, sobre la construcción del ferrocarril transiberiano, y se quedó tan impresionado se dijo se dijo a sí mismo: "Sólo necesito una cámara de cine para dar la sensación de estar ahí". Con tan sólo 14 años y con el objetivo de enseñarles a sus compañeros de clase a qué se dedicaba su padre y cómo se vivía en las Islas Canarias, pensó que lo mejor era rodar un documental y para ello aprovechó la vacaciones de verano de 1935. Acompañado de sus compañeras de curso Polly Church y Noel Florence escribió un guión y filmó una película sobre el cultivo, manejo y transporte del plátano, grabada en 16 milímetros, muda y de diez minutos de duración. "Así nació Canary Islands Banana, conocida mundialmente después como Canary Bananas", señala Álamo.

Fue el primer documental grabado en el noroeste de Gran Canaria y posiblemente el primero en todo el mundo sobre el cultivo del plátano. Tras esa experiencia, ya no paró. Estudió Biología con el ornitólogo David Lack y con él viajó a las islas Galápagos en 1938 para filmar lo que había visto Darwin un siglo antes. Con el fin de dominar la técnica del cine, estudio Ciencias Físicas en la Universidad de Harvard (Estados Unidos), donde conoció al compositor Leonard Bernstein, con quien formó una pequeña orquesta universitaria, alternando los estudios con trabajos como camarógrafo y asistente de cine.

Durante la Segunda Guerra Mundial se alistó como fotógrafo de combate en el Ejército estadounidense, sirviendo tres años en Birmania y China.

Tras varias películas, se embarcó en uno de los proyectos más conocidos. Eligió a un joven senador llamado John F. Kennedy e hizo un documental sobre cinco días de su campaña, desde que se levantaba hasta que se acostaba. Había nacido el Cinema Verité. Hace pocos años ideó poner sonido a Canary Bananas, con música de Néstor Álamo, y en 1983 hizo grabaciones de la Rama de Agaete para un posible documental, pero la muerte le sorprendió el 23 de marzo en París.