El timplista Benito Cabrera, que días atrás decidió denegar al Gobierno canario el uso del villancico Una sobre el mismo mar, composición suya con la que el Ejecutivo regional ha venido diseñando la campaña institucional navideña en los últimos años. La decisión de Cabrera se produjo como gesto de protesta ante el recorte de un 65% en la inversión cultural en 2012 que contempla el proyecto de Ley de Presupuestos autonómicos, cuyo trámite parlamentario da comienzo la próxima semana.

La protesta de Cabrera fue mayormente aplaudida por los agentes culturales, productores, promotores, asociaciones culturales, y artistas canarios de distintas disciplinas. Sin embargo, la actitud del timplista recibió voces en contra, como las declaraciones el pasado domingo del también timplista grancanario Totoyo Millares. Éste no sólo desaprobó el gesto de Benito Cabrera, sino que lo acusó de haberse aprovechado del apoyo económico del Gobierno para sus distintos proyectos profesionales.

"Un maestro"

Ayer, Benito Cabrera reconocía su admiración y respeto al trabajo de Totoyo Millares y "el de los 13.000 creadores, incluído usted Sr. Millares, que han recibido ayudas del Ejecutivo canario" (en una carta que se reproduce en esta misma página), a la vez que reitera que su negativa a la cesión de los derechos es un "gesto personal". Según explica, "la cultura canaria es mucho mas que un villancico y un timple". En este sentido, sugiere a Totoyo Millares, que "no olvidemos lo importante, no entremos en el juego del divide y vencerás".

Respecto a Millares, a quien le rebate parte del argumentario de sus manifestaciones, Benito Cabrera afirma: "Nunca recibí clases de Totoyo, aunque lo seguiré considerando un maestro y tendrá mi apoyo, tal como lo ha tenido siempre. Si me piden una vez más estar en un homenaje en su honor, allí estaré de nuevo para demostrarle mi sincero respeto como músico. A él y a los grandes timplistas de su generación".