El pianista canario Iván Martín presentó ayer en la capital grancanaria su último trabajo Mozart & Schröter. Piano Concertos, en el que recupera tres conciertos de Mozart compuestos en su etapa de juventud, casi inéditos y hasta ahora excluidos del repertorio oficial del concertista austriaco.El trabajo, fruto de una intensa labor de investigación por parte del músico canario, incluye un concierto de las mismas características orquestales del célebre compositor alemán Johann Samuel Schröter, coetáneo de Mozart.

"Es un disco muy interesante porque, nos ofrece algo prácticamente inédito de un compositor como Mozart. A mis manos llegaron hace algún tiempo una serie de manuscritos, de forma muy casual, de algunos compositores del siglo XVII y XVIII, y entre ellos estaban estos tres conciertos de Mozart, y automáticamente empecé a investigar en el repertorio y en el compositor", indicó Iván Martín.

Como resultado de sus estudios descubrió que se trataba de obras no reconocidas dentro de los 27 conciertos de Mozart de Piano y Orquesta oficialmente catalogados, y ahí comenzó a poner en marcha el nuevo disco, enmarcado inicialmente dentro del proyecto de capital cultural 2016 de Las Palmas de Gran Canaria.

Martín explicó que se trata de orquestaciones basadas en tres sonatas para teclado de Johann Christian Bach a quien Mozart conoció cuando tenía 8 años en su viaje a Londres. "Otro dato que despertó mi interés fue la controversia con respecto a la datación de estos conciertos ya que, en un primer momento, se pensaba que eran ensayos o borradores, ya que se trata de música escrita cuando Mozart contaba con apenas 15 años, hasta que musicólogos como John Irving o Dennis Pajot descubrieron que eran obras originales datándolos en 1771; por esta razón, otras reputadas ediciones los han incluido recientemente entre los conciertos para piano y orquesta a pesar de que en años anteriores no los contemplaron como tales".

También destacó como dato curioso que en el manuscrito, la parte solista y el bajo continuo estén transcritas por Leopold Mozart, mientras que la caligrafía de la orquestación pertenece a su hijo Wolfgang. Algo que no cuestiona la autoría de Mozart de la totalidad de los tres conciertos, según explicó Iván Martín que tuvo que recurrir a otros manuscritos y manuales de padre e hijo, para aclararse sobre cómo enlazar unas partes y otras de cada concierto.

"Ha sido un proyecto apasionante. Para ello ha habido que crear un conjunto instrumental, y he tenido la inmensa suerte de montar un grupo muy ecléctico, Galdós Ensemble, compuesto en el 90% por músicos canarios", informó el compositor canario.

El lugar elegido para grabar su segundo trabajo discográfico fue el Teatro Pérez Galdós. "No es ninguna casualidad, ya que con otros colegas de profesión en Alemania, Inglaterra e incluso Estados Unidos, he tenido la posibilidad de admirar las cualidades acústicas que tiene este teatro, cuyas dimensiones hacen posible que disfrutemos muchísimo con ese retorno que nos da el teatro en el escenario".

Las partituras revisadas por Iván Martín serán editadas próximamente por The Music Sales. "Estarán disponibles muy pronto para que este repertorio pueda ser interpretado también por otros pianistas, otras orquestas, otros músicos, y así poder contribuir con mi granito de arena para dar a conocer un repertorio que es importantísimo en el desarrollo de la historia de la música. Demuestra que hoy en día algo nuevo de Mozart es posible".

El trabajo combina el uso de instrumentos barrocos y contemporáneos, como es la tiorba alemana que no entra en conflicto con el piano moderno. "Algo que defenderé siempre es que la música antigua, de principios del clasicismo, no forzosamente ha de ser interpretada por músicos eruditos o gente especializada, sino que es una música que, respetando el estilo, suena igual de fresca tocada por un piano moderno, un chelo antiguo o cualquier instrumento. Los mismos compositores decían en el manuscrito que este concierto es para instrumento de teclado. Ellos ya tenían esta abertura de miras a la hora de componer una pieza musical", concluyó Martín.