Cine y sólo cine. Con esta premisa se inauguró anoche el 13º Festival Internacional de Cine de la capital grancanaria en un sencillo acto en el salón dorado en el Gabinete Literario, bien poblado de representantes de la vida política, económica, cultural, y por supuesto de la industria del celuloide. Las cosas de la crisis que ha llevado al certamen que dirige Claudio Utrera a recortar en todos frentes sin mermar el norte programático. Menos películas, pero con la sección informativa mas completa de su historia, según Utrera, y un paso mas en su trayectoria de cubrir la geografía del cine independiente.
Adiós a la alfombra roja, a los grandes focos y a la pasarela que presidía el Alfredo Kraus. Anoche, el hall primero y el salón dorado después, fueron el espacio para la apertura oficial, con una presentación de contenidos a cargo de los actores Pino Luzardo y Lamberto Guerra. "Pensábamos que era en el Auditorio", dijeron los dos conductores de esta gala "coherente" gestada en el "año de los recortes", que pese a los equilibrios presupuestarios, no se ha llevado por delante al Festival capitalino. Otros si acusan lo que Luzardo y Guerra definieron como "la irremediable desaparición", como ha ocurrido con el Festivalito palmero o el tinerfeño Miradas Doc. Para estos dos eventos fueron los primeros aplausos que se escucharon en la institución.
Los cuatro grandes ciclos sobre los que se vertebra el festival, los dedicados a Bernard Émond y Sergei Loznitsa, que hoy sábado y a media tarde presentan los respectivos espacios que les brinda el Festival; la selección de Film Comment y el homenaje a los maestros del cine mudo, Los modernos, trenzaron el alegato de los dos presentadores, que en unos 50 minutos recorrieron todas las ventanas del certamen con sus secciones habituales, y las nuevas que se estrenan caso de África Hoy y la puesta de largo de la Cátedra de Cine Josefina de la Torre.
Nadie quiso faltar a la inauguración. El alcalde Juan José Cardona, la concejal de Cultura, María Isabel García Bolta, y el director Claudio Utrera, a pie de Gabinete dando la bienvenida a los asistentes, por allí pasaron por orden de importancia del evento, el jurado internacional que preside Vicente Aranda que ayer acusó la baja del crítico de Film Comment, Kent Jones; la delegada del Gobierno, María del Carmen Hernández Bento; el presidente del Cabildo, José Miguel Bravo de Laguna; el consejero insular de Cultura, Larry Álvarez; el director de la Fundación Galdós, Juan Cambreleng; y la directora del Festival de Música, Candelaria Rodríguez, entre otros. No faltaron los habituales como el pintor Pepe Dámaso, el cineasta Damián Perea, así como los invitados al 13º Festival.
Poco más hubo salvo una fugaz copa de champán que templó gargantas para que la comitiva tomara rumbo hacia el Teatro Guiniguada y sentarse en butaca con la proyección de El exótico Marigold, de John Madden.
