¿Su trabajo en Hulka fue una propuesta de Marvel o parte de su interés en este personaje?
Cosa de Marvel. Hacía un tiempo les había comentado de mi interés en hacer una serie regular, supongo que les parecí adecuado para la serie.
¿Cuánto le ha llevado terminarlo y qué supone dentro de su trabajo sobre superhéroes?
Un año, un etapa de doce números. Desde el punto de vista profesional creo que ha supuesto un paso adelante, he aportado más a nivel narrativo y de guión que en mis trabajos anteriores, bastante más. Además, tener mi trabajo en las librerías tantos meses seguidos me ha hecho más visible al lector medio.
¿Le gusta hacer trabajos sobre superhéroes no muy mediáticos, como sucedió hace poco con Robin y ahora con Hulka?
Es una cuestión más de proyectos que de personajes, en realidad. Si el proyecto me interesa pues lo hago. Respecto a los personajes, a veces tienes más cosas que aportar a los que son menos conocidos o mediáticos que a otros más importantes, que suelen estar más controlados a nivel editorial, y que han pasado ya por muchas manos.
¿Qué le parece el personaje de Hulka dentro del catálogo Marvel? Parece que no lleva una vida tan atormentada como la de su primo Bruce Banner
Es completamente diferente a Hulk. Tiene superfuerza y es también verde, pero no tiene ningún tipo de problemas con su alter ego, de hecho el personaje humano, Jennifer Walters, prefiere su forma superheróica a la humana. Es un personaje divertido, yo la veo como la mujer liberada del catálogo de Marvel. Se podría decir que las historias de Hulk son dramas, mientras que las de Hulka se acercan más a la comedia.
Su estilo resulta atractivo para un lector de cómic europeo ya que no sobrecargas las viñetas como suelen hacer otros autores de Marvel o DC. ¿Hay un interés especial por hacer dibujos de líneas muy definidas?
El dibujo viene definido por la información que debe aportar, una vez que sé lo que tengo que contar normalmente la solución final es simple. Lo importante siempre es saber lo que estás contando, el dibujo en sí es poco más que técnica, y el estilo es parte del proceso narrativo.
¿Cómo ha sido el trabajo con el guionista y la coloradora?
Con el guionista no tengo casi contacto, una vez que tengo el guión mi trabajo es hacer el cómic, en el proceso en realidad el guionista no tiene mucho que aportar. Con la colorista sí que tengo comunicación continua. El color es un factor muy importante en la narración, trabajo con Muntsa para que todo vaya en la misma dirección.
¿Cuáles son sus autores de referencia?
Muchos, continúo interesado en el medio y cada cierto tiempo descubro gente nueva que hace cosas interesantes. O descubro cosas en clásicos que antes no sabía ver. Todo son influencias.
¿Qué cree que agradó a los directivos de Marvel para incluirle en su nómina de dibujantes?
Habría que preguntarle a ellos. Supongo que mis últimos trabajos les habrían parecido lo suficientemente interesantes como para proponerme la serie. Siempre es así, lo último es lo que vale.
¿En qué otros proyectos estás trabajando en estos momentos?
Estoy acabando el último número de Hulka, luego tengo otra cosa para Marvel, aún no puedo hablar de ello.
