"Siempre digo que soy lo que siempre he querido ser y eso es un privilegio". Así de claro es el chicharrero Fernando Cabrera quien, a sus 45 años, puede presumir de haberle puesto la voz a personajes tan conocidos del panorama cinematográfico como Sheldon Cooper (personaje de la serie 'The Big Bang Theory' que encarna Jim Parsons), Alfredo Linguini ('Ratatouille'), Chris Griffin ('Padre de familia') o Doug ('Up'). "Pero todo eso no me lo ha regalado nadie", sentencia el tinerfeño que vivió en Santa Cruz hasta los 21 años.

Cabrera explica que, desde el momento en que descubrió que el doblaje existía, le llamó la atención. "Ya entonces quería dedicarme a ello" puesto que entendía esa actividad como una faceta más de ser actor. Sin embargo, desde el principio supo que una profesión así no podría desarrollarla en Canarias y, por eso, comenzó a hacer teatro y a "estar en contacto con el mundillo de la interpretación", comenta. Así, tras realizar la mili, tomó la decisión de dar "el gran paso" y viajar a Madrid, donde tuvo la oportunidad de averiguar todo lo que había que hacer para entrar en el mundo del doblaje. Fue de esa manera como pasó a estudiar interpretación y técnicas actorales en diferentes talleres, así como técnica de doblaje.

Tras tantos años de profesión, explica que por lo general le gusta ver el trabajo terminado, "sobre todo si dejo pasar algo de tiempo para verlo desde la perspectiva del espectador y, así, hacer autocrítica", sentencia. Aunque añade que también es muy importante que le interese la trama de la película o la serie en el momento de doblarla.

Desde hace ocho años tiene la responsabilidad de doblar a uno de los personaje más singulares del panorama televisivo actual: el protagonista de 'The Big Bang Theory', Sheldon Cooper. A pesar del éxito de este personaje, Cabrera reconoce que la vida le ha cambiado poco porque "por el simple hecho de hablar nadie me reconoce". Sin embargo, no puede dejar pasar que, de vez en cuando, "me llaman de algún medio de comunicación para entrevistarme", bromea.

Pero antes y después de Sheldon Cooper hay muchos otros. Cabrera destaca algunos como Walter White Jr. (el hijo del protagonista, Walter White, en la serie 'Breaking Bad'), Alfredo Linguini, Doug, el Príncipe Caspian ('Las crónicas de Narnia'), Bolt o Chris Griffin... Explica que "todos son perfectamente reconocibles por casi todo el mundo y, además, gracias a ellos he recibido bastantes halagos y felicitaciones".

De todos ellos, además, destaca que uno de los que más se le ha resistido ha sido Walter White Jr., el hijo discapacitado del químico que se mete a producir metanfetamina. "Me daba mucho miedo que el resultado quedase algo ridículo", explica y añade que lo que buscaba era encontrar "el punto adecuado a su voz". Actualmente, el santacrucero espera el estreno de la nueva película de Pixar 'Del revés', que se centra en explicar cómo funcionan los sentimientos dentro de la mente de una niña. Fernando Cabrera se encarga de doblar a Miedo.

Aunque su voz se ha convertido en su herramienta de trabajo más importante, Cabrera afirma que no cuenta con ningún truco en especial para cuidarla. "Solo procuro evitar alimentos o bebidas muy fríos o calientes", cuenta de forma simple.

Ahora, Cabrera combina sus interesantes trabajos con su familia. "Tengo tres hijos, dos de ellos muy pequeñitos, de 2 y 4 años, así que mi mujer y yo no nos aburrimos". Son justamente los más pequeños de la casa los que cada cierto tiempo le ponen en un apuro cuando le piden que ponga la voz de alguno de los personajes a los que dobla.

"Mi hijo el mayor, cuando era mas pequeño, me ponía en el compromiso de hacer alguna voz ante algún amigo de su colegio", recuerda el chicharrero, que ahora espera a que sus hijos menores crezcan un poco para que la historia vuelva a repetirse. Así, aunque no tanto como cabría esperar, en más de una ocasión ha tenido que oír la pregunta de "¿Y tú a quién doblas?" porque, explica, "en general, es verdad que llama la atención esta profesión".

Desde que llegó a Madrid han sido pocas las ocasiones en las que ha abandonado la capital por trabajo. "De vez en cuando me llaman para hacer alguna locución publicitaria para Canarias con acento pero, claro, la mayoría de las veces esas locuciones también están grabadas en estudios de Madrid", relata. Así, reconoce que, por motivos laborales, "no tiene sentido vivir en Santa Cruz si quiero seguir dedicándome al doblaje".

"Si inventasen de una vez el teletransportador molecular no lo dudaría", bromea Cabrera, que recuerda que ya ha vivido los mismos años en Madrid que en Santa Cruz y, por eso, reconoce que "Madrid me ha tratado bien y ya es mi segunda tierra". Fernando Cabrera ha conseguido consagrar su vida a la profesión que realmente le gusta. Por esta razón, recomienda a cualquier persona que quiera dedicarse a lo que sea que de "los pasos necesarios para cumplir con su vocación".