El homenaje a las familias que batallan contra la alargada y dolorosa sombra del Alzheimer es el motor de la versión teatral de Siempre Alice, que dirige el canario Víctor Formoso, con la actriz Mari Carmen Sánchez en el papel protagonista de una prestigiosa profesora en Harvard a la que diagnostican un Alzheimer precoz a los 50 años. Basada en la adaptación teatral de Christine Dunfords sobre la novela de Lisa Genova, que cristalizó en la gran pantalla con la oscarizada interpretación de Julianne Moore, esta apuesta teatral se dibuja "como un acto de amor a esos seres queridos a los que les ha tocado pasar por esta enfermedad difícil", toda vez que "rompe con los tabúes que todavía pesan sobre el Alzheimer", en palabras de Formoso.

"El Alzheimer es como tirar una piedra en un estanque, porque genera unas serie de ondas que va tocando a todos a su alrededor, de manera que se van creando muchos conflictos y los personajes evolucionan a partir de ellos".

Los veteranos Luifer y Blanca Rodríguez y las jóvenes Marta Viera y Nati Vera completan el elenco canario de este montaje, que debutará los próximos 20 y 21 de enero en las tablas del Teatro Cuyás y sobre el que el equipo afirma que "hemos puesto toda la carne en el asador". "Con este estreno queremos demostrar que estamos capacitados, que hemos hecho un trabajo muy comprometido, no solo con la causa social del Alzheimer, sino también con esta profesión, porque hemos puesto toda la carne en el asador para hacer un gran montaje", declaró Formoso. A este respecto, Luifer Rodríguez añadió que "agradezco al equipo el haber puesto tanta carne en el asador porque en teatro no se puede ser vegano". "Y esta obra va de eso, de sentimientos y de familia", apuntó.

Un importante despliegue tecnológico en materia de iluminación, sonido y videocreación; la música original de Germán Arias, la reflexión de teatro dentro del teatro y un cuidado trabajo escenográfico "que va acompañando a Alice en el proceso desde que le diagnostican la enfermedad hasta el final" vertebran este ambicioso montaje en el que "hemos hilado muy fino", apunta Formoso.

Por su parte, la actriz Mari Carmen Sánchez asegura que "va a haber un antes y un después en mi carrera después de este personaje". "Alice no es un personaje sobre el que se pueda caminar superficialmente, sino que requiere de un proceso de espeleología en las emociones", afirma. Y sobre el contenido dramático de la obra, revela que "hemos querido contar el drama de esta enfermedad y de cómo devasta a una familia, no desde la tragedia, sino como un acto de amor, porque todos tienen que poner de su parte y hacer piña para salir adelante, en esta época marcada por el individualismo".