Los verdaderos líderes del brit-pop

Shed Seven pudo ver como pubicaban cuatro discos fabulosos entre 1994 y 2001 que resumían mejor que ningún otro grupo la esencia del pop británico de los sesenta, mientras las medallas se las colocaban a Blur, Verve o Travis. Pues bien, ahora, 16 años después de su disolución, la banda de York regresa con este magnífico trabajo que comienza con un tema, Room in my house, que acoge todas las caracterísicas de su estilo formado por buenas melodías con el protagonismo absoluto de las guitarras y con un cierto toque soul. Todo ello, por supuesto, sin perder su admiración por Beatles ( Said I'm sorry) y con melodías deudoras de Kinks ( Victoria).