El actor Scott Wilson, conocido por dar vida a Hershel Greene en la serie 'The Walking Dead', ha muerto a los 76 años a causa de la leucemia que padecía. Tan solo unas horas antes del fallecimiento, los productores de la ficción de AMC habían anunciado en la Comic-Con de Nueva York que su personaje volvería en la novena temporada para despedir a Rick Grimes, protagonista encarnado por Andrew Lincoln.

La fatídica noticia del intérprete, que participó tres temporadas de 'The Walking Dead', la comunicó la propia cadena desde la cuenta oficial de Twitter de la serie. En el comunicado agradecen su gran profesionalidad y, sobre todo, su forma de ser con los que le rodeaban. "Scott siempre será recordado como un gran actor y mejor persona", comienza.

"El personaje al que encarnó en 'The Walking Dead', Hershel, vivió en el núcleo emocional del espectáculo. Nuestros corazones están con su esposa, familia, amigos y con los millones de seguidores que le amaban", continúa.

También, algunos compañeros han querido darle su adiós más personal.

Scott Wilson nació en Atlanta en 1942 y desde un principio tuvo claro que la interpretación era su gran pasión. Tanto es así que decidió abandonar sus estudios en la universidad, en los sesenta, para conseguir atrapar su sueño de ser actor, lo que le llevó a viajar haciendo autoestop desde Georgia hasta Los Ángeles.

Una vez en la gran ciudad de la costa oeste consiguió debutar en la gran pantalla en 1967 con dos películas: El calor de la noche (Norman Jewison), cinta oscarizada en la que dio vida al sospechoso de asesinato Harvey Oberst, y en A sangre fría (Richard Brooks), en la que encarnó al pederasta y asesino Dick Hickock. Asimismo, estos dos papeles como criminal le abrieron la puerta de El gran Gatsby en 1974 (Jack Clayton), donde continuó como homicida en las carnes de George Wilson.