Javier Carballo se ha acostumbrado a pasar las semanas en tránsito entre aeropuertos, a enganchar un vuelo tras otro, y a descansar lo justo para conducir el baile en numerosos clubes europeos y americanos. La música electrónica es su norte. Lo fue desde que con 15 años pudo agenciarse unos platos y una mesa de mezclas. A los 18, ya mostraba unas formas de encarar la cultura de baile, y ahora en 2018, celebra las dos décadas de profesión como un deejay y productor que hace tiempo se ganó el respeto y el reconocimiento del público que lo ha tenido a su lado.

Carballo reside en la actualidad en Londres, ciudad a la que se trasladó por razones profesionales. "Hace dos años me mudé a Londres, mi agencia y el mánager son ingleses, y vi la oportunidad de estar en un circuito nuevo y con bastantes contactos para hacerlo", explicaba el pasado martes. Lleva unos días en la Isla con la familia aprovechando el tiempo libre que le queda entre trabajo en estudio y las sesiones que tiene en agenda. En la ciudad londinense se encuentra cómodo, y tras haber cubierto etapa en Berlín, decidió cambiar de aires. "No tengo una residencia [en clubes] en Londres porque ni me apetece ni tengo tiempo, estoy viajando todas las semanas entre Europa y América, y normalmente lo que hago es trabajar mi música en el estudio y gestionar los sellos que llevo. Y los fines de semana actuando".

Se refiere Javier Carballo a los sellos Overal Music, que puso en marcha en 2010 junto al productor Hanfry Martínez; y Under Your Seat, "que nació como productora de eventos en Gran Canaria hace diez años y desde el año pasado decidimos abrir un sello con esta marca", explica.

Artista de la escudería Vatos Locos, en 2016 se le presentó a Javier Carballo a primera gira por Estados Unidos y Latinoamérica, mercados en los que ha tenido un notable éxito, y en los que repite con la frecuencia que le permiten otras citas nacionales y europeas. El público de Berlín, Munich, Moscú, Kiev y Libano, entre otros, han bailado con sus beats. En su maleta cabe de todo. "No tengo un estilo muy definido, entre house y tecno cuando pincho, y según el público, las energías y las horas, suelo hacer mi discurso. Cabe de todo, deep, broken beat, latin, más underground", subraya Carbalo, al tiempo que rehuye de estos términos por cuanto entiende que "clasificar o etiquetar la música electrónica por estilos o subestilos es complejo y obsoleto".

Tras pasar unos días en la Isla, regresa a Madrid y según avanza, "me tomo un descanso y vuelvo a Gran Canaria a celebrar mi 20º aniversario", en un evento a celebrar el próximo 17 de noviembre en la Sala Cactus, en Barranco del Águila, y que comparte con los dj's Sonja Moonear, Hanfry Martínez, Jordan, Berna y Aniano. Una visita fugaz a la Isla para cruzar el Atlántico y afrontar una gira doce días por Argentina, Santo Domingo, México y Estados Unidos. De cara a 2019, Carballo asegura que "será otro punto de inflexión en mi carrera", porque tal como razona, "si quiero crecer en otras escenas necesito mejorar".

El dj grancanario disfruta de un excelente momento profesional en un mercado en el que abunda la competencia, y en el que hay que renovarse con un discurso propio, y ser posible, original por encima de la media o lo que suele ser tendencia.

La adolescencia fueron años de aprendizaje, de estudiar e investigar, y lo más importante, dejarse aconsejar por los veteranos. "Connoci a gente de Inglaterra que venía a veranear aquí, algún dj mítico como Mark Stanley, que me explicó que todo tiene la misma raiz y que se ha bifurcado entre house, tecno, eurobeat y un montón de estilos", detalla Carballo.

"La primera vez que pinché con público fue cuando me dieron la oportunidad los chicos de Protone, Luis Ortiz, La Capria y Vicente Rodríguez, en la sala Cuasquías". Era menor de edad y su padre tuvo que autorizar el estreno. De aquella noche recuerda que lo que mandaba era "una electrónica más conceptual, un lado que siempre lo he tenido, y que he recuperado con los años con Terms", su proyecto más oscuro y experimental.

"Mi idea era vivir de la música -, relata Javier Carballo- y comencé en locales de Playa del Inglés con público extranjero y tenía que pinchar de todo, y la última hora ya podía poner la música que me interesaba". Encontrar su camino en la escena electrónica le llevó hasta Titto La Rocka, quien le cedió la apertura en fiestas; y a frecuentar salas de la Isla. "Empecé a hacer ruido en pequeñas fiestas hasta que me llamaron de la discoteca Chic, y me dieron la residencia en 2004. Ahí fue cuando descubrí la industria que había aquí, que era muy buena en aquellos años, y el potencial que yo tenía".

En Chic estuvo dos años que "me sirvieron para aprender bastante, mi nombre ya sonaba por la Isla, me veía bien pero no quería estar detrás de una gran marca, quería mi propia marca", sentencia Carballo. Fue entonces cuando entró como director artístico del Club Velvet. "Fue la primera vez en que pude plasmar el concepto que yo tenía de música y de club". Dos años después, en 2008, creó Under Your Seat, con Berna, "que es mi socio ahora mismo". Puso en marcha el club Rebel Electronic, en San Agustín, con artistas internacionales, y comencé a engordar la marca Under Your Seat con eventos más masivos y exclusivos".

Sostiene Carballo que "gracias a todas esas fiestas y los contactos que pude hacer, cuando comencé a hacer música lo tuve más fácil; a mucha gente le gustó lo que hacía, y vio talento, me han ayudado mucho y me han abierto puertas como poder actuar fuera de Canarias, y editar con sellos como One Records, cositas pequeñas que al final fueron sumando y que me permitieron tener un hueco en el circuito europeo".

Por todo ello se mudo a Berlín. "Aquí no había mucho más que rascar; estar de fiesta en fiesta no era una solución de futuro. Tengo muchos amigos que si lo hicieron, se quedaron aquí, y han terminado por hacer otras cosas, porque pierdes esa frescura, el feeling".