Regresa Fito Páez a los escenarios españoles, que no frecuentaba desde 2010, con una gira por Madrid, Barcelona y Las Palmas de Gran Canaria, y lo hace en formato solo y al piano. ¿Cómo afronta estos conciertos y que repertorio, si es posible avanzarlo, se va encontrar el público?
Este formato te permite una gran libertad. Generalmente no repito las listas y el repertorio suele ser muy variopinto. Con mayoría de canciones de la música popular de todo el continente americano pero mechadas con músicas instrumentales y algunas favoritas europeas.
Su última visita al Alfredo Kraus fue en junio de 2010 en el festival Arrecife de las Músicas, en el año que publicaba el álbum Confiá . Decía usted entonces que le apetecía trabajar de nuevo con banda tras haber estado dos años en solitario y a piano. ¿Por qué regresa ahora nuevamente a este formato?
Del 2010 a esta parte grabé Yo te amo, Rock and roll revolution, El sacrificio, Dreaming Rosario, Locura total, con Paulinho Moska, y recientemente La ciudad liberada. Todos con formato de banda eléctrica y arreglos de orquesta y metales. Extrañaba volver un poco al piano solo. Aunque eventualmente en todos estos años también me pego un refresco en medio de las giras electrificadas.
La ciudad liberada (2017) descubre 18 canciones. Según ha manifestado, llegó a la discográfica con canciones para armar diez discos y tuvo que recomponer el trabajo. ¿Cómo fue el proceso de depuración y de selección?
Fue un trabajo misterioso sobre todo. Nunca sabes en qué aguas estás nadando cuando estás en aguas profundas. Hay que sortear muchos obstáculos, surfear con las olas cuando te lo permiten y mantener la guardia alta por si en algún momento te crees mas cosas de las que debes. Fue muy divertido y agobiante a la vez. Siento que podría escribir una enciclopedia sobre la construcción de La ciudad liberada.
La pieza Tu vida mi vida le reportó el sexto Grammy Latino en su carrera. ¿Supongo que a estas alturas de su carrera, con 24 discos de estudio desde su debut con Del 63 en 1983, un nuevo galardón no le va a cambiar ni el pulso ni el carácter al artista?
En realidad es el séptimo por que la Academia me brindó uno en Buenos Aires como reconocimiento a la carrera. Siempre se agradecen los premios. Nobleza obliga. Desconfía de quien te diga que no le interesan los premios o los reconocimientos. Igual que de la gente que no bebe. Todo eso no hace mas que forjar mi temperamento y reconfirmar que para bien y para mal uno se parece cada día mas a sí mismo.
¿ La ciudad liberada le mantendrá en gira durante este año en otros países? ¿Tiene proyectado nuevo disco en el horizonte?
Nos faltan Perú, Ecuador, Centroamérica, parte de EEUU, y ojalá España. La idea por el momento es poder grabar un nuevo álbum sobre finales del 2019. Ya veremos.
¿Qué le motiva para seguir componiendo y esquivar el fantasma de la repetición?
Una suma de fracasos hace un estilo [risas]. La repetición es inevitable. Eso es el estilo. Luego están las infinitas maneras de adentrarse en el maelstrom de la música e ir incorporando nuevos elementos a tu trabajo de composición e interpretación.
¿Qué percepción tiene de la música que se trabaja en Argentina entre las nuevas generaciones? ¿Hay pasión por defender el rock y el pop en el idioma de uno frente al envite anglosajón?
El rock y el pop en español no forman hoy parte del maisntream. En todos los países de habla hispana existen artistas nobilísimos que cultivan el género, que también encuentra extensiones en el rap y en el trap. De alguna manera en el rock anida la esencia del conflicto con las expresiones más establecidas en el gusto ampliamente popular. Para los que no comprendan de qué hablo siempre aconsejo una buena sacudida con Cold Turkey de Lennon o Nos siguen pateando debajo de Charly García. O simplemente un review de My Way de Sid Vicious [risas].
Las nuevas músicas urbanas que se propagan por el continente latino son tendencia entre los jóvenes, en clave reguetón o trap, con sus excesos, letras machistas. ¿Qué opinión le merece este fenómeno y si considera que es una deriva peligrosa de cara al futuro?
No encuentro ningún peligro en que cada cual se exprese como pueda y como quiera a veces. El tiempo pone todo en su lugar.
En distintas geografías latinas se apuesta por nuevos discursos sonoros a partir de la música tradicional, caso de Argentina, Brasil, Colombia o Chile. ¿Qué le parece?
Esa tarea se realiza en Argentina desde los años 60. Desde el trabajo del Chango Farías Gómez, a las revisiones modernistas de Manolo Juárez, o la obra inmensa de Dino Saluzzi, o las incursiones de Spinetta o García en el tango y el folclore, las composiciones de Jorge Fandermole, hasta mis trabajos con Liliana Herrero. En todos estos casos fueron tareas disruptivas y de invención. No pensado como una vuelta de tuerca sino como una manera honesta y audaz de conversar con el pasado. Tarea que países como Brasil, Cuba, Perú, Colombia, Venezuela, México, Chile y Uruguay realizan con la misma intensidad desde hace mas de cinco décadas.
