El músico Jordi Savall aseguró ayer que "la música es el único puente que queda entre civilizaciones" y al respecto, Canarias representa como ningún otro territorio esta condición de lugar de encuentro multicultural. Jordi Savall ha realizado estas consideraciones este viernes en una rueda de prensa en Santa Cruz de La Palma con motivo del concierto Las rutas de la esclavitud 1444-1888, con el que se clausura la 35º edición del Festival de Música de Canarias y que correrá a cargo de su formación Hespèrion XXI.

Jordi Savall es una de las personalidades más sobresalientes en la difusión internacional de la música antigua como investigador, concertino, pedagogo, musicólogo, y creador de nuevos proyectos, que lo sitúan entre los principales artífices de la revalorización de la música histórica, en la que se ha volcado a lo largo de más de cuarenta años.

La presentación del concierto de clausura del Festival de Música en Canarias 2019,contó también con la participación del presidente del Cabildo de La Palma, Anselmo Pestana, el consejero de Cultura, Primitivo Jerónimo, el alcalde Sergio Matos, el director del festival, Jorge Perdigón, y de la directora de la Fundación DISA, Sara Mateos, empresa que se suma este año al festival con su apoyo para este concierto.El musicólogo, director de orquesta e intérprete, que también conducirá el mismo programa hoy sábado en el Auditorio de Tenerife y el domingo en el Alfredo Kraus de Gran Canaria, ha señalado que la música, a veces, emprende extraños recorridos. "Sorprende cómo ciertas músicas colonizaron el Nuevo Mundo desde la Hesperia y el trayecto de vuelta de otras muchas", ha continuado el intérprete, quien ha indicado que la idea de esta obra le surgió cuando visitaba la llamada "Jungla de Calais", un campamento de refugiados, ya desmantelado, en el oeste de Francia.

Las rutas de la esclavitud intenta explicar la historia de los esclavos con música y textos que abarcan cuatro siglos con cantos y bailes que salieron de África hacia América y las colonias europeas. Sobre el escenario, unos 40 músicos junto a Hespèrion XXI, pues Las rutas de la esclavitud se representa con artistas invitados procedentes de México, Mali, Colombia, Madagascar, Venezuela, Marruecos, Brasil, Argentina, Venezuela y España.

Reconocimientos

La fecunda carrera musical de Jordi Savall ha merecido las más altas distinciones nacionales e internacionales. Entre ellas cabe destacar el título de Doctor Honoris Causa por las universidades de Évora (Portugal), Barcelona (España) y Lovaina (Bélgica), además del prestigioso galardón Léonie Sonning 2012, considerado el Premio Nobel de la Música.

Su labor junto a Hespèrion representa uno de los motores del renacimiento de la música antigua en Europa, el Nuevo Mundo y el área mediterránea; Un referente de primer orden en el estudio, la interpretación, la dirección y la difusión de las tradiciones musicales. En 2008 fue nombrado embajador para el diálogo intercultural y junto a su compañera Montserrat Figueroa recibió en 2009 la encomienda de Artistas por la paz, dentro del programa Embajadores de buena voluntad de la Unesco.