El largometraje Blanco en blanco, segundo trabajo del director hispano-chileno Theo Court, llega a la cita trufado de talento isleño. A la condición de responsable de la productora de la película, El Viaje Films, el cineasta tinerfeño José Alayón suma también el rol de director de fotografía. Otro compañero y colega, Samuel Delgado, firma el papel de coguionista, mientras el compositor grancanario Jonay Armas le ha puesto música y sensibilidad a una historia que en el capítulo de la interpretación cuenta con el grancanario David Pantaleón y la joven tinerfeña Esther Vega.

El próximo 3 de septiembre, a las 14.15 y en la Sala Darsena, se exhibirá esta película recién nacida, que ha sido seleccionada para participar en la sección Horizontes, donde se medirá a otras producciones españolas.

La productora El Viaje Films se ha caracterizado por su forma de hacer en un pilar dentro del panorama audiovisual español, y además con proyección nacional e internacional, gracias al recorrido de sus películas por diferentes festivales como el casoo de Venecia, Berlín, Locarno, Estados Unidos... "Eso genera un nombre", señala José Alayón, que está al frente de la productora. Ahora bien, subraya que "Venecia es uno de los grandes escaparates del cine, junto con Cannes y Berlín", y cómo más allá de alfombras rojas y glamour estos espacio se convierten en una enorme plataforma profesional a la que acuden muchos críticos, agentes de ventas y distribuidores. "Suelo explicarle a la gente que para nosotros los festivales son ferias, de manera que representan el arranque de nuestro producto, el lugar donde presentamos nuestros trabajos con el propósito de que viaje por el mundo".

La sección Horizontes, el espacio en el que se proyecta Blanco en blanco, recoge aquellos trabajos más innovadores y radicales. No obstante, Alayón la califica como "una película de época, con factura western y con su particular tempo y forma de narrar".

Lo cierto es que ha sido complicado gestionar un proyecto con un presupuesto alto y, sobre todo, la logística para rodar en una zona alejada de Tierra del Fuego, a 300 kilómetros del punto habitado más cercano y en pleno invierno con temperaturas de 15º bajo cero.

El director y actor David Pantaleón (Valleseco, 1978) es también protagonista. Licenciado en Arte Dramático por la Escuela de Actores de Canarias, desde 2005 comenzó su andadura como director y no ha parado la pata.

"Es cierto que mi perfil ha estado inclinado hacia la dirección", explica, "pero hay ocasiones en las que uno se enfrenta a situaciones ante las que no puede decidir". Ahora bien, también descubre, con cierta sorpresa, cómo en los últimos años "ha habido directores amigos que me han visto en mi perfil de intérprete y se los agradezco".

En este largometraje se mete en la piel de Arturo, "uno de tantos mercenarios al servicio del poder, de los que protagonizaron las matanzas de los indígenas de Tierra del Fuego".

Afirma Pantaleón que después de mucho tiempo sin actuar suelen aparecer ciertas inseguridades, "pero siempre esa idea de que una película no es sino un espejismo y terminas volviendo a la realidad: lo mejor es estar tranquilo, atento, diligente y animoso".