La obra El gran secreto de Súper Abuela, que se representa del 2 al 6 de enero en el Teatro Pérez Galdós de la capital grancanaria, abordará el tema de la crisis medioambiental, como indicó su director Mario Vega durante la presentación. La obra se representa del 2 al 6 de enero en diferentes horarios. Así, los tres primeros días será a las 19.00 horas, las del 4 y 5 a las 12.00 horas, y la del 6 de enero tendrá lugar a las 18.00.

Se trata del primer espectáculo concebido para el teatro del popular y entrañable personaje Súper Abuela, un apasionante y divertido montaje que combina música en directo, proyecciones audiovisuales danza y teatro para disfrutar estas navidades con toda la familia. La obra recurre a una genuina historia que plantea al público el empeño de unos personajes que se proponen alcanzar un mundo mejor desenmascarando a los culpables que han generado la crisis medioambiental en que nos vemos sumidos. Dirigido por Mario Vega, El gran secreto de Súper Abuela, está inspirado en un guion escrito por la actriz y psicóloga Cristina Bermúdez y cuenta con un reparto actoral integrado por la propia Bermúdez, Ruth Sánchez, Abraham Santacruz, Andrea Zoghbi, y los dos bailarines pertenecientes a la escuela de Natalia Medina, Sergio Aguiar y Ángeles Perea. De la iluminación y el sonido se responsabiliza Ibán Negrín y de la ayudantía de dirección, Marta Viera.

Trilogía

"Los poderes de Súper Abuela no son sobrenaturales", explica Cristina Bermúdez, que encarna en esta obra de teatro musical a la maestra Nora, que terminará por convertirse en Súper Abuela para ayudar a los dos hermanos Roberta y Luis a lograr sus objetivos. "Son poderes súper naturales y orgánicos que tienen que ver con la inteligencia emocional, la creatividad y los hábitos saludables", señala la actriz que se verá acompañada sobre el escenario por una banda integrada por seis músicos que interpretarán el amplio repertorio de canciones en riguroso directo. "Está lleno de sorpresa, aventura, acción y magia, pero la magia que hay en la realidad, porque no recurrimos a la mentira de los efectos especiales para sorprender. Optamos por rescatar la magia que hay en la realidad", sostiene Bermúdez.

El mensaje es que "para intentar transformar el mundo exterior, hay que empezar por cambiar nuestro mundo interior y que el amor constituye la mayor y más grande herramienta para solucionar los conflictos más cotidianos y los más aparatosos del mundo mundial", advierte Bermúdez, que puntualiza que este espectáculo gusta "tanto a los niños de cuatro años como a los de diez, a padres y madres y, por supuesto, a los abuelos y abuelas. Sus distintas capas de lectura nos permiten considerarlo un montaje para ser disfrutado como una experiencia enriquecedora familiar y motivo de encuentro".

Por su parte, el director Mario Vega, explica que esta obra de una hora de duración "tiene que ver con una gran aventura concienciadora que explica por qué estamos tan distraídos frente al cambio climático. Hemos trabajado el espectáculo desde el rigor dramatúrgico y sin ningún tipo de concesiones porque el mismo esté destinado a un público familiar. Hemos trabajado desde la verdad, desde la interpretación física y empleando conceptos sobre el movimiento, sin perder de vista los códigos del tipo de espectadores al que se orienta".

El músico Daniel Negrín explica que el repertorio no está infantilizado y responde a la narrativa planteada en la obra. "La música cuenta la historia y arropa a los actores con una amplia paleta de sonoridades homogénea", avanza Negrín, "cuyos siete temas son interpretados con estilos variados que van desde el rock and roll al swing, pasando por el pop, el rap o los sonidos étnicos". Con letra de Bermúdez, música compuesta por Negrín y arreglos de Luis Merino, la banda la forman Luis Merino (guitarra), Rafa Santana (teclados), Carlos Meneses (bajo), Elio Moreno (saxo), Emilio Diena (batería) y Daniel Negrín (percusión).