La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Entrevista | Daniel Waters

"Creáme, yo no inventé la correción política con 'Demolition Man"

"En EEUU la correción política ya estaba ahí en los 90, pero no pensé que la cosa fuese a volverse tan loca", señala el guionista

Se estrenó en 1993 en Estados Unidos, pero a las pantallas españolas llegó ya iniciado el año siguiente. En aquel momento, la crítica la ignoró o despreció abiertamente, y apenas encontró público más allá de los incondicionales del cine de acción y de su protagonista, el pétreo Sylvester Stallone, siendo las valoraciones más positivas sobre este título aquellas que lo calificaban como simpática gamberrada para lucimiento del italoamericano. Pero el tiempo ha sabido reivindicar a Demolition Man (Marco Brambilla, 1993) como una obra tremendamente visionaria en sus tesis, siendo en la actualidad aclamada por numerosos fans que consideran que esta historia sobre un policía (Stallone) y un peligroso criminal (Wesley Snipes) criogenizados en 1996 y revividos en un futuro próximo en el que reina una corrección política extrema predijo acontecimientos e incluso leyes que han sido aprobadas en la realidad o han amenazado con hacerlo, y que el universo de Demolition Man, que en 1994 parecía de chiste, se ha vuelto peligrosamente parecido a nuestro presente, en especial en la crecientemente distópica España. Su guionista fue Daniel Waters, autor también del libreto de la aventura fílmica más surreal y gótica del Hombre Murciélago, Batman vuelve ( Batman Returns, Tim Burton, 1992) o de las obras de absoluto culto Escuela de jóvenes asesinos ( Heathers, Michael Lehmann, 1988) y Las aventuras de Ford Fairlane ( The Adventures of Ford Fairlane, Renny Harlin, 1990), y que ha tenido a bien responder a diversas cuestiones sobre la profundidad de este filme que se revela mucho más profundo de lo que puede parecer a simple vista.

¿Cómo entró a formar parte de Demolition Man

Había trabajado para el colorido y grandilocuente productor Joel Silver en los filmes Las aventuras de Ford Fairlane y El gran halcón. ¡Ambos largometrajes son de culto, ¡ahora, pero fueron odiados entonces!. A pesar de todo eso, a Joel y a mí nos gustaba trabajar juntos. Demolition Man era una película de acción que ya traía asignada a Sylvester Stallone e iba a empezar su producción pronto, pero a Joel le pareció que necesitaba algo que lo hiciese menos típico y tenía esperanzas de que mi salvaje e inusual punto de vista pudiese hacer más frescas las cosas. Le dije que no. Él me dijo que me iba a pagar una cantidad de dinero de locura por solo tres semanas de trabajo. ¡Le dije que sí!

¿Qué porcentaje del guion es atribuible a usted y qué porcentaje a Peter M. Lenkov y Robert Reneau? ¿Cuál fue su contribución en el resultado final?

Peter Lenkov creó una historia de acción bastante sólida sobre un policía y un criminal descongelados para luchar en el futuro y creo que Robert Reneau creó el mundo subterráneo. No había prácticamente nada de humor en sus versiones. Es obvia cuál fue mi contribución y por qué, aunque solo escribí por un par de semanas. El mío es el primer nombre que aparece en la lista de guionistas. Me deleité en convertir el filme de acción en algo más satírico... Incrementando el contraste entre nuestra violenta sociedad contemporánea y una futura engañosamente mejor y más políticamente correcta. Solo recuerdo haber pensado qué pasaría si el único sitio donde un criminal pudiese conseguir balas fuese en un museo. La ridícula nostalgia de Sandra Bullock por la violencia, el canto de viejos jingles publicitarios, Taco Bell conquistando el mundo y, lo que es más popular, las tres conchas en el cuarto de baño fueron todo chifladuras creadas por mí. ¡Lo siento, pero ni siquiera yo sé cómo se usan las tres conchas!

¿La película Demolition Man que se filmó fue fiel al espíritu del guion o fue cambiada sobre lo que se planteó inicialmente? ¿Hubo alguna parte significativa que resultase eliminada?

Seré el primero en admitir que mi guion era demasiado cómico, no muy diferente del filme de Woody Allen El dormilón. Stallone hasta se asustó de algunas de mis tonterías. Un elemento clave que estaba en mi guion y que hasta se rodó, pero fue luego cortado, tenía que ver con la búsqueda de su hija por parte de Stallone. La encuentra en el campamento subterráneo y ella es más vieja que él. La escena rodada era demasiado sentimental y ralentizaba el filme. Por desgracia, al cortar la escena muchos espectadores piensan que Sandra Bullock va a ser revelada como la hija, convirtiendo la escena de sexo y los flirteos en muy incómodos.

Algo que siempre me he preguntado es si el personaje de Simon Phoenix era específicamente un hombre negro en el guion. Siempre he albergado esa duda, porque una de las cosas que me gustan particularmente sobre Simon Phoenix es que se desmarca completamente de los esquemas fijados por otros villanos negros del cine. No solo porque es el villano principal, sino porque es completamente diferente al resto: se revela como una enloquecida mezcla entre un villano tipo Ivan Drago y el Joker.

El personaje, definitivamente, no fue concebido como negro. Desde luego había cierto miedo de que al darle el papel a Wesley Snipes se nos acusara de estar diciendo "¡Oh, traed un tipo negro y todo un futuro perfecto es arruinado!". El propio Wesley nos tranquilizó, básicamente diciéndonos que era un papel de villano molón que nada tenía que ver con la raza. ¿Quién quiere hacer solo papeles de juez a lo Morgan Freeman?

Actualmente Demolition Man es un tema de moda entre muchos fans porque creen que predijo la llegada de la corrección política imperante en la actualidad, hasta el punto de que un youtuber incluso parodió la película cuando en España se intentó multar a la gente por decir tacos o palabras como negro o abuelo. Para ser justos, ya existían obras como 1984 o Un mundo feliz que apuntaban en la misma dirección. ¿Por qué cree que la gente considera que Demolition Man afinó más el tiro? ¿Cuál es su opinión sobre la relación entre Demolition Man y los tiempos actuales?

¡Ja!, eso me hace reír. Créame, yo no inventé la corrección política... En Estados Unidos ya estaba ahí en los 90, pero tío, no pensé que la cosa fuese a volverse todavía más loca. Algo parecido pasó con mi primer filme, la sátira de instituto Escuela de jóvenes asesinos, que llevó una violencia extrema a ese mundo. En ese momento parecía una absoluta locura pero ahora es normal. Supongo que tengo más de Nostradamus de lo que pensaba. El personaje de Sandra Bullock se llama Lenina Huxley por la protagonista y el autor de Un mundo feliz así que sé quién es el verdadero maestro del género. Creo que la gente responde a Demolition Man porque es más fácil aceptar una visión aterradora del futuro a la vez que te ríes.

Siguiendo con la lectura política, siempre me he preguntado si el villano de ese mundo representa una especie de extrema izquierda. Mientras Simon Phoenix es algo equiparable al anarquismo y John Spartan representa el típico héroe de acción fascistoide tan en boga en los 80.

No trataba de ser específicamente político en cuanto a derechas e izquierdas, sino más bien lanzar el mensaje "teme siempre la ilusión de perfección". Tanto Spartan como Phoenix aportan un necesario anarquismo a una sociedad solo-tranquila-en-la-superficie. El ser humano siempre tendrá sus demonios, deseos y sentimientos caóticos y negar esto es muy peligroso. Como dice Stallone, tanto a los del subsuelo como a los de la superficie, tú ensúciate un poco y tú lávate. Me encanta ver a Stallone a través de los ojos de Sandra Bullock. ¡Él cree ser solo un tipo corriente, pero Sandra lo convierte en un arquetipo, quiera él o no!

En este sentido, creo que Demolition Man puede tener una lectura muy interesante sobre un sistema político dictatorial que se inventa una falsa amenaza para reforzar su dominio y hegemonía, pero que se le escapa de las manos y acaba por convertirse en una amenaza real, dejando a la sociedad como presa de un monstruo o del otro. Cosas así han sucedido y suceden a lo largo de la historia. ¿Le inspiró algo así para hacer que el villano despertase a Phoenix como algo más peligroso que nunca?

Pienso menos en Phoenix (y en Spartan, dicho sea de paso) como monstruo que como el término más amistoso de trickster, aquellos que usan trucos y engaños con fines subversivos. Siempre me ha fascinado la figura del trickster. Cada cultura tiene uno. Cada vez que una sociedad se vuelve demasiado confiada, mojigata y represiva, necesitas un creador de diabluras que irá demasiado lejos, que romperá tabúes, que causará daños. Los héroes protegen el status quo y restauran el orden. ¡Aburrido! A veces la sociedad no necesita ser protegida

Otra cosa que siempre me he preguntado es si los nombres Phoenix y Spartan tienen algún tipo de connotación mitológica. Después de todo, estos personajes me parecen algo del pasado que resurge en el futuro para continuar su lucha, casi como seres legendarios.

Tenemos una expresión, aquí en Estados Unidos, para eso: ¡Hazlo a lo grande o vete a tu casa!

¿Qué lugar otorgaría actualmente a Demolition Man dentro de su carrera?

Los cinco primeros guiones que escribí fueron convertidos en películas... Algunas mejores que otras, pero aun así, guau. Demolition Man fue la última del ciclo. Decidí que tenía que regresar a una escritura más personal, pero, tío, ¡esas cosas es mucho más difícil que las produzcan! En retrospectiva, le tengo mucho cariño a Demolition Man y a mi filme de Batman, Batman vuelve... Tenían una mezcla de tonos que no creo que se siga haciendo. Sí, los filmes de superhéroes de Marvel tienen humor, pero no la sátira estrafalaria y lo filosófico. No estoy diciendo que ambas películas no tuviesen problemas, pero al menos eran originales.

Compartir el artículo

stats