La Noche Sabinera estará en mayo en el Teatro Víctor Jara de Vecindario, para repasar el cancionero de Sabina mediante los músicos de cabecera del músico de Úbeda: Pancho Varona, Antonio García de Diego y la voz de Mara Barros. La cita con el universo Sabinero será el próximo 10 de mayo, a las 20.00 horas y, en este caso, tendrá como artistas invitados a los cantautores Víctor Lemes y Nany Jiménez. Las entradas, al precio de 15 euros, están en www.entrees.es y en la taquilla del Ateneo Municipal de Santa Lucía.

El repertorio que tocan García de Diego, Varona y Barros está exquisitamente cuidado y los amantes de la música de Sabina pueden acudir a sabiendas de que en este espectáculo se toparán con sus grandes e inolvidables canciones.

Destacar que Varona y García Diego son coautores, junto a Sabina, de más de cien canciones que, en la voz áspera del cantautor de Úbeda, han desafiado las barreras del espacio y del tiempo. Dos manos derechas que, además de ser productores de varios de sus discos, también han participado en éxitos de artistas como Ana Belén, Víctor Manuel, Luz Casal, Quique González, Miguel Ríos o Christina Rosenvinge

En el repertorio t figuran grandes clásicos como A la orilla de la chimenea, Aves de paso, Contigo, Corre, dijo la tortuga, Peor para el sol, Resumiendo o Y sin embargo..

Acompaña a Varona y Antonio García de Diego la corista habitual de la banda, Mara Barros, incorporada a la banda de Sabina sustituyendo a Olga Román para el disco y la gira Vinagre y Rosas. Esta Noche Sabinera se divide en dos partes. En la primera, la banda toca parte del repertorio sabinero; en la segunda, el público puede subir con ellos a cantar el tema que elijan para sentirse "Sabina por un día" arropado / a por sus propios músicos; al mejor que lo haga se le obsequia con un bombín, el sombrero característico que Sabina emplea.

El germen

La idea de la Noche Sabinera nace el año 2006 de manera espontánea cuando desde Les Nits de l'Art se le propuso a Pancho Varona, mano derecha de Sabina, que un día antes del concierto que Joaquín Sabina iba a dar en el Palau Sant Jordi, asistiera con toda la banda a tocar a un pequeño club de Barcelona. Esa noche, se unen a la fiesta varios artistas de la ciudad condal.

Poco después se hizo lo mismo en Madrid y fue ahí cuando a Pancho Varona y los demás fueron un poquito más allá y se les ocurrió la idea de invitar al público a subir a cantar con ellos algunas de las canciones más "sabineras". A raíz de ahí han sido multitud de muchos días y muchas "quinientas noches" a lo largo y ancho de toda España y Latinoamérica.