Un jovencito con experiencia traumática, superhéroes alejados de lo convencional, un malvado enmascarado y un robot muy peculiar con el que el protagonista intenta superar la ausencia que deja una tragedia que le golpea muy de cerca. Así se planta Big Hero 6 ante nosotros, sin originalidad pero con las ideas muy claras. Su brillante mezcla entre el universo Marvel y el mundo Disney, aparentemente hostiles, funciona a las mil maravillas. Sin renunciar al toque emocionante y con una fusión de estilos visuales de lo más suculento "Big Hero 6" tiene la gran virtud de crear personajes humanos atractivos, un villano inquietante y un protagonista memorable.

Bob Esponja ya no goza de tanta popularidad como en sus inicios porque la competencia es enorme y creciente y porque se han emitido tantos capítulos repetidos una y otra vez que se ha producido cierto "empacho". Pero sigue siendo una serie que divierte tanto a niños como a adultos porque su ingenio está fuera de toda duda y sus personajes siguen siendo un acierto del primero al último. Además de ser graciosa en la mayor parte de los capítulos, encierra no pocos mensajes interesantes sobre la avaricia, el abuso de poder, el egoísmo (en el fondo del mar como un elocuente y acertado espejo de lo que ocurre con los seres humanos en la superficie) y la necesidad de tener un buen amigo y respetar a los débiles.

Es el gran héroe de los tebeos españoles para muchas generaciones que aprendieron a pasar muchos fines de semana viviendo a tope sus aventuras legendarias. EN tiempos en los que no había tantas películas de superhéroes ni cientos de canales ni novelas gráficas por doquier, nuestro guerrero nacional ofrecía pudibundas historias épicas en las que el heroísmo iba acompañado de saludable sentido del humor y estupendos personajes secundarios. Políticamente incorrecta vista hoy, se impone una mirada libre de prejuicios para disfrutar de unos guiones a menudo ingeniosos en los que las argucias para salir bien librado de empresas harto peligrosas se acompañaba de una capacidad pasmosa para pelear.

'Stoner' es uno de esos libros que, de repente, aparecen en tu vida y se quedan en ella. El autor, ya fallecido, se llama John Williams. Sí, como el compositor de Tiburón. La historia no puede ser más sencilla. La protagoniza un hombre común y doliente, profesor de Literatura, al que acompañamos desde sus comienzos como estudiante hasta su jubilación. Desencantos, fracasos, ilusiones rotas, sientimientos doloridos, pasiones quebradas... La vida misma en un relato de prosa tensa, brillantísima de apabullante sencillez, emocionante sin recurrir nunca a excesos de sentimentalidad. Una obra maestra absoluta que no se puede olvidar una vez leída.