La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La penúltima palabra

Infinito

Infinito

“Lo infinito no es aquello fuera de lo

cual no hay nada, sino que el infinito es aquello

fuera de lo cual siempre hay algo”

Aristóteles

Anaximandro pensaba que la materia original del mundo era lo apeiron (ilimitado, sin límites), un fondo infinito de material expandiéndose en todas direcciones.

De lo infinito, acepción de lo indeterminado, de lo que no tiene límite, -por tanto un concepto negativo, amorfo, incompleto, confuso- Aristóteles da prueba de su existencia: el tiempo, los números enteros, la división de las magnitudes.

Para Leopardi, "un parto de nuestra imaginación, un sueño, no una realidad" porque no tenemos una sola prueba de su existencia, ni siquiera por analogía. Él, que escribiera el más bello poema: L'infinito ("interminables espacios de allá lejos", "sobrehumanos silencios", "hondísima quietud"). El infinito, así, es la existencia de una contraposición entre un espacio interno y un espacio externo (Lotman) que, sin embargo, se intercambian, transfiriéndose el espacio exterior en el interior y viceversa. Estamos en pleno romanticismo.

El caminante sobre el mar de nieblas de Friedrich puede que sea la más perfecta iconización del sublime romántico con un hombre ensimismado, elegante con bastón, en total soledad, de espaldas al espectador, que escruta el ilimitado mar de niebla acaso observando cómo se representa lo irrepresentable, cómo significa un infinito, tan vacío de símbolos y alegorías como pleno de presencias o marcas (Givone).

Inmensidad sobrecogedora que carece de límites al punto que pareciera como si no existiera, negación que apunta a lo vacío, con eterno silencio, a nada. Infinito como nada. (Leopardi).

Mar de niebla como el mar de nubes, por ejemplo en La Palma causado por los vientos alisios, sugieren como en El caminante, la idea de viaje como aventura (ad ventura hacia el futuro) y la metáfora del naufragio: Y naufragar me es dulce en este mar. (L’infinito)

El infinito se manifiesta entonces como espacio. Como espacio es el futuro necesario que esperamos en el horizonte bien que sepamos que es una línea imaginaria que retrocede cuando avanzamos. El futuro, espacio de todos los estados posibles.

Compartir el artículo

stats