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10 series míticas quetratan de chicas ‘teen’

De ‘Es mi vida’ a ‘Dos balas muy perdidas’

Imagen promocional de The wilds

¿Y si fuera The wilds esa serie-fenómeno que tanto necesita Prime Video ahora mismo para birlar algunos globos oculares a Netflix?

No sería tan extraño. De entrada, este estreno de pasado diciembre parte de una premisa bastante irresistible: ¿Y si en la isla de Perdidos solo hubieran caído chicas adolescentes de lo más diferentes? Creada por Sarah Streicher (del equipo de guionistas de Daredevil) y con muchas directoras involucradas, The wilds se dirige, además, en direcciones inesperadas e intensas: es tanto un misterio fantástico como una exploración de lo que significa ser una chica adolescente en la sociedad occidental contemporánea. Su estreno brinda la oportunidad de repasar algunos grandes precedentes, desde la rompedora Es mi vida hasta la infravalorada Dos balas muy perdidas.

ES MI VIDA

Lejos del romance rosa - ES MI VIDA (1994-1995)

Fue la serie juvenil que nos descubrió a Claire Danes y Jared Leto a mediados de los noventa. La primera era Angela Chase, inteligente y despierta quinceañera de clase media que parecía cargar a sus espaldas con todo el angst del mundo. Leto era Jordan Catalano, objeto de fascinación de nuestra heroína: la promesa de algo insuperable e indefinible. Lejos del romance rosáceo, esta creación de Winnie Holzman exploraba con respeto los dramas que acompañan a la adolescencia, de la confusión al anhelo, de los cotilleos innecesarios al simple abismo de la inercia. Aunque éxito de crítica, no arrasó en audiencia. Solo duró 19 episodios. La penúltima tragedia para Chase. 

BUFFY, CAZAVAMPIROS

Metáfora de las ansiedades - BUFFY, CAZAVAMPIROS (1997-2003)

Su creador, el ahora todopoderoso semidiós geek Joss Whedon (uno de los principales artífices del Universo Cinematográfico de Marvel), la describió como un cruce de, precisamente, Es mi vida con Expediente X. El instituto se convierte aquí en (literalmente) una película de terror, con criaturas y fenómenos que resultan sorprendentes y que funcionan como metáfora de las ansiedades inherentes a la adolescencia y primera juventud. Era fácil identificarse con su heroína, Buffy Summers (Sarah Michelle Gellar), aunque no todas las chicas de 16 años maten a vampiros cuando nadie las ve. O no al menos vampiros con todas las letras.

VERONICA MARS

Buena detective y buena persona - VERONICA MARS (2004- 2019)

Antes de la celebrada película Brick de Rian Johnson, Rob Thomas propuso ya una mezcla del contexto de instituto con la épica neo-noir. Entre 2004 y 2007, Kristen Bell encandiló a bastantes espectadores en su papel de la estudiante/detective del título, la clase de referente que uno querría para sus hijas adolescentes: buena en sus pesquisas y buena también como persona; ajena a los comentarios de la gente supuestamente guay y concentrada en la búsqueda de la verdad. Un buen puñado de fans costeó, a través de Kickstarter, la secuela cinematográfica del 2014. Y en año 2019, Hulu estrenó una interesante cuarta temporada de ocho episodios. 

GOSSIP GIRL

Culebrón adolescente - GOSSIP GIRL (2007-2012)

La narradora titular de Gossip girl es, precisamente, Kristen Bell, alias Veronica Mars. Codesarrollada por Josh Schwartz y Stephanie Savage, ya colaboradores en O.C., Gossip girl es el mejor culebrón adolescente de la historia, una maravilla con clase y veneno sobre chicas y chicos ricos del Upper East Side de Nueva York. Las mejores son ellas: esa Reina Abeja llamada Blair Waldorf (Leighton Meester); su amienemiga Serena van der Woodsen (Blake Lively), o la cada vez menos apocada Jenny Humphrey (Taylor Momsen). Bailes de debutantes, falsos noviazgos para enmascarar romances adúlteros, secretos, secretos, secretos: esta serie lo tiene todo. 

SKINS

Montaña rusa emocional - SKINS (2007-2013)

Posiblemente el examen de la adolescencia más realista y doloroso, además de divertido, jamás visto en televisión. Sus guionistas cambiaron el género de las series juveniles casi sin querer. O al menos eso dijo uno de ellos, el gran Jack Thorne, en el transcurso de una entrevista reciente: “Tan solo nos preocupaba hacer una serie que nos gustara a nosotros mismos. Después, todo se convirtió en una montaña rusa increíble”. Para montaña rusa, los episodios dedicados a Cassie (Hannah Murray), chica con anorexia nerviosa, entre otros trastornos mentales; la talentosa clarinetista Jal (Larissa Wilson), o un enigma llamado Effy (Kaya Scodelario). 

EUPHORIA

Las ‘rayadas’ de la edad - EUPHORIA (2019-)

La serie de esta selección con la que, quizás, mejor conecta The wilds en su tratamiento de la adolescencia femenina. La misma ansiedad, la misma lucha por trascender, la misma lucha por entenderse y hacerse entender. El mismo combate diario con los cajones donde la sociedad quiere encerrar a las mujeres jóvenes. Aún más atrevida, Euphoria cuenta con un núcleo emocional poco común: la amistad romántica entre Rue (Zendaya), cisgénero, y Jules (revelación Hunter Schafer), trans. El pasado 7 de diembre se estrenó en HBO el episodio especial de Navidad Las rayadas no duran eternamente, considerado por sus seguidores poco menos que la luna. 

PEQUEÑAS MENTIROSAS

Supense y crimen - PEQUEÑAS MENTIROSAS (2010-2017)

En algún lugar entre Gossip girl y Mujeres desesperadas este éxito sorpresa de la cadena ABC Family inserta a cuatro chicas ricas, horrorosamente privilegiadas, en una trama de misterio, suspense y crimen. Distanciadas desde hace tiempo, Aria (Lucy Hale), Emily (Shay Mitchell), Spencer (Troian Bellisario) y Hanna (Ashley Benson) se vuelven a hermanar tras recibir mensajes de un misterioso personaje que parece estar al tanto de todas sus pequeñas transgresiones. Todas mienten como cosacas (el título de la serie no engaña) y ocultan secretos: Hanna, por ejemplo, es cleptómana, como las chicas de la reivindicable Cleptómanas.

DERRY GIRLS

Humillaciones universales - DERRY GIRLS (2018-)

Esta creación de Lisa McGee se desarrolla en un espacio y un lugar muy concretos: Irlanda del Norte en la tercera década de los Troubles. Pero las pequeñas humillaciones que sus jóvenes heroínas sufren día a día resultan bastante universales. Es fácil sentirse cerca de Erin Quinn (Saoirse Monica-Jackson), cuyos sueños literarios son remojados día a día con jarros de agua fría; o su excéntrica prima Orla (Louisa Harland); o ese manojo de nervios gay llamado Clare (Nicola Coughlan), o la calenturienta Michelle (Jamie-Lee O’Donnell). En su país de origen es la serie más exitosa de la historia. Fuera de él todavía es un secreto (demasiado) bien guardado. 

SKAM

Un clásico que ha innovado - SKAM (2015-2017)

Además de un influyente sello electrónico, Skam es el nombre de una serie noruega que ha marcado época y dado pie a infinitas adaptaciones, sobre todo europeas, incluyendo SKAM España. La más memorable es la original. Ahora igual estamos más acostumbrados, pero en su día tampoco había demasiadas series adolescentes que abordaran temas delicados (relaciones tóxicas, luchas feministas, conflictos de fe) y lo hicieran, además, con sensación de verdad y delicadeza de matiz. La creadora Julie Andem también innovó en cuestiones estructurales: un episodio podía durar 18 minutos y el siguiente ser de media hora y el siguiente de casi una entera. Clásico, se mire por donde se mire.  

DOS BALAS MUY PERDIDAS

Una explosiva rareza - DOS BALAS MUY PERDIDAS (2020)

Netflix ha cancelado injustamente esta creación de Kathleen Jordan, explosiva rareza que merecía larga vida. En esta imposible comedia de acción, Maddie Phillips y Anjelica Bette Fellini encarnan a unas mellizas que no se saltan una clase de su instituto cristiano, ni tampoco dejan escapar oportunidad alguna de explorar su sexualidad a espaldas del Señor. Cuando destrozan sin querer la camioneta de su padre, se asocian con un curtido cazarrecompensas para capturar a criminales y fugados. Si suena todo loco, es porque lo es. Pero la serie contiene, además, observaciones certeras sobre los días en que empiezas a tomar realmente tus propias decisiones éticas.

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