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Poesía cósmica de Justo Jorge Padrón

Cien poemas de un intenso amor escritos con la tinta que fluye del corazón y los sueños, donde el autor se convierte en un mago de la lírica

Justo Jorge Padrón.

El celebrado poeta español Justo Jorge Padrón ha publicado Poemas para Kleo, hecho que viene a confirmar no solo su calidad de innovador de la poesía a nivel planetario, sino que además confirma su registro literario cósmico, sideral y a la vez, alimentado por un exquisito humanismo renovador. Es preciso situarse entonces, no solo ante una nueva poesía, sino de frente a la conquista de un lenguaje que cambia la forma de escribir y fecunda el terreno de una poesía maravillosa, en un mundo acosado por la urgencia de vivir rápido dejando de lado la belleza y el resplandor de la palabra.

Kleo por la magia de la palabra y amor sin límites es a la vez poesía astral. Los poemas de amor dedicados a ella, escritos con la mano de la ternura y amor infinito, la convierte en una leyenda mitad mujer, mitad poesía viva. Solo un poeta como Justo Jorge Padrón, pudo haber logrado fusionar la realidad y el sueño, borrar los límites del tiempo y escribir con tanta belleza y expresión sideral. Poemas para Kleo cierra así un ciclo de poesía y vislumbra la llegada de una expresión lírica amorosa distinta.

“Esta poesía –dice el poeta– reúne una serie de virtualidades que me parecen imprescindibles para la configuración de una auténtica poética, como la fuerza e intensidad del sentimiento unido al ritmo de la palabra. También la emoción, la musicalidad, la belleza y el pensamiento que íntimamente se conjugan para dar expresión poética válida en un vibrante, honda y sensual personalidad ante las pulsaciones y los diversos planos de la pasión, desde la auroral vislumbre del primer encuentro hasta llegar al éxtasis de una unión amorosa, o de la familiar y cotidiana convivencia conyugal años tras año”. (1 )

Poemas para Kleo han sido registrados durante el transcurso de varios años. Se trata entonces de una poesía vivida, vienen a ser poemas escritos caminando insomne, buscando la palabra exacta, la metáfora luminosa. Cada poema no solo conmueve y sacude desde las dendritas, sino que además permite amar y aferrarse a la vida. De hecho es un milagro literario, cuando el lector se identifica plenamente con el poeta, que lo lleva de la mano para introducirlo en un universo cosmogónico donde la soledad, la tristeza ni la muerte existen.

Se trata de 100 poemas de un intenso amor (Neruda escribió 20), escritos con la tinta que fluye del corazón y los sueños. El poeta se convierte en un mago de la lírica, en adivino y brujo capaz de percibir los latidos de las palabras que conforman un campo semántico, rico en significaciones. Por eso, se puede decir que la poesía es Kleo y el poeta registra con la memoria y la sangre, su presencia y futura vida en la inmortalidad y duración el tiempo sidéreo.

Sino, leamos: “Ella es toda la noche”:

El cosmos me despliega la faz de una mujer. / Ella es toda la noche en un beso infinito. / Ojos azules, piel que arde en el cuarzo, melena desatada, bosque de oro / por la sola extensión del universo.// Ríe tu voz y es todo el cielo quien me invoca / con tu risa de niña. La veo en cada estrella / fluyendo hacia mis ojos con un río de luz. // Ella torna las horas en un vértigo diáfano, / en la hirviente ternura que me alcanza / y me entrega la vida que he buscado, / en el brillo de los nombres que sostienen la dicha.

Pero también se podría afirmar que todo el libro es un solo poema infinito. Los grandes e importantes libros de poesía amorosa no envejecen nunca. Al contrario, con el paso de los siglos, son más nítidos y transparentes. Eso sucederá con Poemas para Kleo, el mismo poeta no podrá ver que su libro, como tantos que ha escrito, no solo será traducido a principales idiomas del mundo. Sino que los jóvenes aprenderán de memoria varios poemas para leerlos en las plazas públicas.

Justo Jorge Padrón al explicar su poesía escribe: “Aristóteles decía que ‘el uso de adecuado de la metáfora con una rápida percepción de las relaciones es la verdadera marca de un genio’. Esa abundancia, esa prontitud en la formación de figuras nos indica que la mente es llevada por el impulso de la corriente emotiva y nos ofrece la vivacidad de su pasión. La capacidad de escribir un intenso lenguaje proporciona al poeta su fuerza y sensibilidad que a su vez el cómplice de un ígneo destino que desemboca en la plenitud del hallazgo del poema. Es una intensidad que nunca se sacia. Es un continuo deseo como si los amantes vivieran en el presente sin pasado y el porvenir no existiera sino el pasado. Como si el cuerpo estuviera configurado no solo, por el deseo sino también por la imaginación que resurge como fuente de las revelaciones y profecías”.

La Academia Sueca encargada de la entrega de los Premios Nobel de acuerdo al deseo de Alfred Nobel, debería considerar a Justo Jorge Padrón, sea merecidamente distinguido con el Premio Nobel de Literatura. No solamente es un deseo y pedido de millones de lectores que habitamos el planeta. Es sobre un derecho que le asiste por la trascendencia y calidad literaria, por la astral y frondosidad de su obra literaria que el paso del tiempo, lo único que hará será inmortalizar al poeta de Poemas para Kleo.

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