Los problemas logísticos ocasionados por la ola de frío que estos días afecta a la península obligan a aplazar las dos funciones de la obra Los hijos, previstas este fin de semana en el Teatro Cuyás. El espectáculo queda ahora reprogramado para los próximos 7 y 8 mayo, a las 20.30 horas, de forma que las localidades para las nuevas funciones se cambiarán automáticamente del viernes 15 de enero al viernes 7 de mayo y del sábado 16 de enero al sábado 8 de mayo, según ha anunciado el recinto capitalino.

Quienes, a pesar de todo, deseen solicitar el reembolso de sus entradas, deberán hacerlo antes del próximo 15 de febrero, en la taquilla del teatro, si las compraron de manera presencial; o llamando al 928432181, si lo hicieron a través de la página web.

En ambos casos, el horario de atención al público será de 17.00 a 20.30 horas, de lunes a viernes; y de 11.30 a 13.30, los sábados por la mañana, y dos horas antes de cada pase los sábados por la tarde, domingos y festivos con función. El Teatro Cuyás y los responsables del montaje han manifestado que lamentan las molestias que esta situación pueda ocasionar a sus espectadores y espectadoras.

Asimismo, el montaje Los hijos se basa en un texto de Lucy Kirkwood que dirige David Serrano, responsable de otros exitosos proyectos, desde propuestas escénicos, como el musical Billy Elliot o el reciente estreno, también en el Cuyás, de Los asquerosos, hasta proyectas audiovisuales, ya que Serrano ha dirigido las películas Días de fútbol, Días de cine o Una hora más en Canarias, entre otras.

Además, la obra está protagonizada por Elena Irureta, que en los últimos meses se ha convertido en uno de los rostros más conocidos de la televisión de nuestro país por su papel en la serie Patria, Susi Sánchez (Premio Goya a la Mejor Actriz 2019 por La enfermedad del domingo) y Joaquín Climent.

Sinopsis

La obra, que transcurre en un futuro próximo, reflexiona sobre la responsabilidad hacia las generaciones futuras. Así, tras una catástrofe en la cercana central nuclear en la que trabajaban, dos científicos recientemente jubilados, Hazel y Robin, viven “en una pequeña cabaña de la costa este”.

A pesar de que la electricidad está racionada y de que constantemente tienen que medir la radiación a su alrededor, tratan de mantener una vida aparentemente normal: Robin cultiva su huerto y Hazel practica yoga mientras mantienen el contacto con su hija mayor, Lauren.

De pronto, su apacible existencia se ve interrumpida por la aparición de Rose, una antigua colega física a la que no habían visto en 38 años y cuyo regreso les obliga a reflexionar sobre el impacto de sus vidas en las siguientes generaciones.