Don Juan León, el nombre artístico del músico y productor Juan León (Las Palmas de Gran Canaria, 1962), encontró, hace años, en el folclore de Canarias, un inabarcable sustrato con el que alimentar nuevos horizontes sonoros lejos del rock de guitarras y el tecno al que se dedicó durante un buen tiempo. León estrena Piedraviva, nombre de la banda y disco, con la voluntad de seguir construyendo sonidos que resitúen en el presente el folclore que conocemos.
Piedraviva es un punto y seguido en el trabajo de experimentación alrededor del folclore y la fusión con la electrónica que tuvo su partida en el disco Del roque del infierno al faro del fin del mundo (Ruin Records, 2013); y un segundo trabajo, con otro concepto sin abandonar la esfera popular, que fue Guácaras, rituales mágicos (2018). “Es la continuación de Del roque del infierno..., pero nada es igual; aquel fue un trabajo, digamos más experimental, atmosférico, y oscuro, eran mis comienzos, un proceso de búsqueda, y la evolución ha ido, por decirlo de alguna manera, hacia el concepto de canción, que aprendí con el trabajo anterior Guácaras, con Facto [Marc Barrachina] de productor”, explica Juan León.
Piezas, composiciones a tierra, como Tango herreño, Aires de Lima, Conde de Cabra, Mazurca herreña, Santo Domingo de Lanzarote, Berlina del Hierro o Arrorró majorero, se cruzan con otras propias, caso de Mariante, sobre las andanzas de los agricultores que llegaban a la zona de costa para la pesca de la morena; El maligno, la leyenda de Guayota; o la adaptación de tres poemas de Pedro García Cabrera (La Gomera, 1905 - Santa Cruz de Tenerife, 1981), que abren igualmente una ventana a las letras insulares: Líquenes, Las dos orillas y Caballito de mar. Precisamente, Líquenes es el primer single que se publica mañana viernes en formato digital, disponible en Bandcamp, que se acompaña de un videoclip realizado por Alejandro Ramos, con animaciones de Carmen Rodríguez. El álbum completo se publica el próximo viernes 22 de enero.
Los textos
“Los textos de García Cabrera tienen mucha fuerza, aparte de la importancia y dimensión del personaje, y en este caso, se identificaba mucho con lo que queríamos hacer”, detalla Juan León. Si la percusión herreña y la colisión del folclore canario con músicas populares de Latinoamérica, con su correspondiente barniz y producción electrónica, fueron motivos en los anteriores, en el disco Piedraviva la inspiración y los motivos vienen por distintos frentes.
El tiempo en el que se gestó el disco tuvo mucho que ver en ello, así como el concurso de Carmen Rodríguez (voz) e Iván Hernández (voz y timple), que son los otros dos compañeros de viaje de Juan León en esta travesía sonora. “El tiempo se nos ha ido de las manos, llevamos unos años con esto, y la tardanza en editarlo ha hecho posible que muchas de ellas hayan cambiado; y se han hecho descartes de algunas de repertorio, queríamos que fueran piezas de las que estuviéramos realmente satisfechos”, subraya el músico.
Colaboraciones
Con producción de Juan León, grabado y masterizado en Factor Damping Studio con Vicente Ferrera, el disco Piedraviva, al igual que los anteriores, es también un disco coral, que cuenta con las colaboraciones de Aníbal García Llarena tambores, chácaras y pitos; y Lorena Morales y Daniel F Medina, chácaras; y las voces de Manolo Delgado en Mazurca herreña; Ana Cabrera, coros en Conde de Cabra; HighKili, voz en Fuerteventura; y Marco Padrón Sosa, silbo gomero en Mariante.
El arte de Julia Crespo arropa este disco, que además de su edición en digital tendrá una tiradas de 400 copias en CD. Ante la imposibilidad de presentarlo en directo con un concierto al uso, se hará un directo en streaming desde el local de ensayo.
Recuerda Juan León que el ejercicio de la música ha sido un aprendizaje continuo. “Cuando empecé con el folclore venía de estar una década con el tecno, y el salto fue un cambio sustancial”. Lo que vino después fue un cambio de ciclo “sin más pretensiones que darme un homenaje”, pero la aceptación que tuvo entre el público hizo que el proyecto diera cabida a un nutrido elenco de colaboradores. “Ha pasado gente a lo largo de muchos años, y sigue estando ahí”, señala. Las circunstancias hicieron que los caminos de León, Carmen Rodríguez e Iván Hernández se cruzaran en la Foliada, en Barcelona, en el invierno de 2018. Rodríguez ya había puesto voces, al igual que Manolo Delgado y Ana Cabrera, e Iván Hernández aceptó el envite de coger el timple, meter voces, y a atreverse en la composición y arreglos. “Comenzamos a tocar, me sentía cómodo, y compartimos la misma visión del proyecto”.
