La música cuestiona los movimientos de la demografía social que asciende, desciende, se estanca, y abarca multitud de percepciones que transitan por el mundo conocido. Al margen de las cruentas realidades que inundan las pantallas, Nelson Saavedra está buscando un sonido y, para ello, necesita de lo colectivo. De sus manos surgen los acordes que toca Ensamble, un conjunto de diez músicos unidos en diciembre de 2021 y que ya ruedan por los escenarios de Gran Canaria con la intención de disfrutar y ampliar las miras musicales en las Islas.
El músico grancanario tiene 25 años y reparte el poco tiempo que tiene en tocar en grupos como Zumurrud, con quien presentó disco a principios de 2021, perfeccionar los temas de su próximo tercer trabajo discográfico en solitario y dar clases en Fábrica La Isleta. Su periplo, corto pero intenso, le hicieron trastocar el camino y dejar atrás lo clásico para especializarse en jazz y música moderna por el Conservatori Liceu de Barcelona.
Cuando inició esta producción lo único que tenía claro era el cuarteto de jazz: Kervin Barreto a la trompeta, Luis Sánchez al piano y Takeo Takahashi a la batería. Entonces, llegó Gerónimo González con el chelo, a quien conoce del barrio, y se corrió la voz sobre esta aventura que crecía en la necesidad de aglutinar más intérpretes que compartieran el espíritu experimental y diverso del Ensamble. Así, los violines se distribuyen entre Gema Barragán, Gabriela Verdú y Anabel Estévez mientras que Sonam Ramchandani va a la viola y Nelson Saavedra aporta la línea de contrabajo y los arreglos.
Música autogestionada
«Con ellos puedo hacer todas las locuras que quiera y, después de ver cómo se experimentaba en Barcelona, supe que quería hacerlo aquí», cuenta. La armonización del grupo viene tanto de su talento como del entendimiento interpersonal, por lo que trabajan con herramientas venidas de la improvisación teatral, las cuales descubrió en la capital catalana. Por ejemplo, en vez de lanzarse pelotas imaginarias utilizan fraseos musicales o, para la coordinación y la concentración, transforman un ejercicio actoral que consiste en dar pasos al unísono en escalar al mismo tiempo las notas.
En su interior campa la jiribilla del jazz y, en la difícil tarea del equilibrio, intenta no encasillar a la agrupación ni a sí mismo en ese formato, pero es demasiado pronto como para no explorar el camino. El repertorio que trastean está situado en Diario Sonoro, una serie de composiciones que se basa en una invención diaria. «Cada día escribo una frase, una armonía, una melodía o una línea de bajo donde conecto con la música. A partir de esto, desarrollo las ideas que tienen ese toque melancólico, como recordando sitios en los que nunca estuve», explica.
«Mi máxima referencia es David Mengual», de quien tuvo la suerte de ser su alumno. En clave regional y de estilo que aspira, Saavedra destaca Ensamble Salvaje, pero no se ha vuelto a escuchar más de este conjunto que bajo la batuta de del pianista grancanario David Quevedo tocó a principios de 2020. El joven ha tocado con otros músicos de la talla de Jon Robles, Toni Vaquer, Celeste Alías o Bill McHenry y, acostumbrado a la multitud de salas de conciertos y ensayos que hay en la ciudad condal, donde la noche puede acabar en una sesión de improvisación a altas horas de la madrugada, advierte de la limitación que sufren las Islas.
Lo mira por el lado positivo: «Aquí hay otra forma de autogestión con sello propio, como se ve en el grupo de Alba Gil o El Pilar Azul, van saliendo cositas aquí», y que pueden escucharse tanto en sus redes sociales como en plataformas al estilo de bandcamp.
«Esto es difícil mover a un grupo grande, pero quiero experimentar, que esto sea un laboratorio y todo el mundo pueda traer sus arreglos y tocar. No sé a dónde nos llevará esto, pero estoy en un sitio que me encanta», sonríe.
El Ensamble por las Islas
El primer bolo oficial del Ensamble fue el pasado 30 de enero en la sede de la asociación cultural Plataforma 3. Después, la Asociación Atlas les abrió sus puertas y, ante la buena acogida del público que los acompaña, Saavedra adelanta que el 14 de abril abrirán la jam session de Fábrica La Isleta. En cualquier caso, ya los han invitado el 17 de abril a participar en el festival On the Roof, en Tenerife, además de contar con un hueco en el LPA International Jazz Day. El repertorio que manejan conlleva un viaje que tiene escalas en Bolero 1 y 2, La noche mágica, Nueva ola, Paisaje inútil, Rocío, Vértigo 3 y Triángulo, ¿qué paisajes contendrán? | C.R.
