Un cielo abierto para disfrutar de la música al aire libre y contemplar el poder de la cultura como poder transformador de la sociedad: así será LPA Culture Experience. La segunda edición del proyecto que nació en plena pandemia ultima los preparativos con un cartel que combina lo urbano con el tinte social que trae a Ptazeta de regreso a la isla el 15 de octubre junto a Lérica, Animalize, Juancho, Xurxo Carreño, Carlorenzo y El Cejas, en Infecar a partir de las 17.00 hora y un coste de 42,12 euros la entrada.
La rapera grancanaria está en plena ebullición con el éxito de Mujerón, sacada a dueto con la rapera Villano Antillano. Con casi 2 millones de visualizaciones en YouTube, colocándose entre los cien más vistos en estos últimos días, y otro millón de escuchas en Spotifty, la cantante tiene en común con la puertorriqueña haber colaborado con el productor Bizarrap, con quien dio el gran salto a la esfera mundial después de haber triunfado con el sencillo Mami en 2020. Es la sensación del panorama musical canario en consonancia con el éxito de Quevedo en su sesión con el DJ argentino. De ahí, que su inclusión en la nueva edición del LPA Culture Experience sea un reclamo para todos los públicos que la han visto recientemente actuar en el Sunblast de Tenerife o el Boombastic Benidorm en agosto.
El eje social de la cultura
La cita sería el colofón final a un proyecto con el que Marta Álvarez, responsable de la entidad organizadora Event Club junto a Nayra Santamaria, desea "romper con los esquemas y las barreras sociales que tienen algunos colectivos para acceder a la cultura". La idea comprende dos fases, primero, la de laboratorio, donde una veintena de participantes son la materia prima para elaborar un espectáculo que se representará el mismo día 15 de octubre.
"Creamos un laboratorio inclusivo en el que intentamos dar oportunidad a talentos emergentes para suban al escenario con una etapa de formación que tendrá una serie de charlas con ponentes de diferentes asociaciones que nos cuenten sus afrentas, además de recibir ponencias de los profesionales de la industria cultural, para dar respuesta y mostrar al público la importancia de la inclusión", afirma. Asimismo, la recaudación de las donaciones recogidas por la fila cero, que se podrán aportar duarnte la compra de la entrada general al concierto, irá destinada a las personas afectadas por la guerra de Ucrania, recuerda Álvarez.
La empresa cumple el año después de haber comenzado con una serie de entrevistas en pleno apogeo de la pandemia a los profesionales del sector cultural con el fin de visibilizar las duras condiciones que atravesaba la industria tras las restricciones de aforo y la cancelación de multitud de actividades. De ahí, inspiradas, mantuvieron el coraje para establecer Event Club, "vimos que estábamos montando algo muy bonito y, aparte de apasionarnos el mundo de los eventos, quisimos tener un altavoz para luchar contra las injusticias del mundo", dice con una década a sus espaldas en distintas agencias.
Ahora que viven la vuelta a la normalidad con una temporada estival plagada de festivales, decidieron trasladarse al último trimestre del año, pues observan una sobrecarga de opciones, "la gente está necesidad de cantar y bailar, pero esta situación deja sin recursos materiales o humanos, por eso hemos decidido ir a octubre, ya que solo parece que hay cosas que hacer en verano".
En colaboración con las asociaciones Gull Lasègue -especializada en el tratamiento de los trastornos de la conducta alimentaria-, la ONG Mujeres Solidaridad y Cooperación y una de ámbito LGTBI+, el festival multidisciplinar aborda la salud mental, la violencia de género, la discapacidad y lo queer entre sus líneas de acción, además del cuidado medioambiental. Hoy empezó el laboratorio presencial con las 22 personas elegidas tras la realización de un casting hecho en el Centro Comercial Siete Palmas, «tienen muchas ganas de demostrar el talento que tienen», comenta Marta Álvarez. Una muestra más de la grata acogida que han disfrutado desde que el año pasado dieran el paso estas dos mujeres emprendedoras dispuestas a hacer "esta locura" para reivindicar el papel de la cultura como símbolo de unión.
