El próximo viernes arranca la 8º Semana de Arquitectura organizada por el Colegio de Arquitectos de Gran Canaria, que tendrá como sede la Fundación Chirino, donde el tema de la programación girará en torno al vínculo entre diseño arquitectónico y salud. Por otra parte, la obra del arquitecto Manuel de la Peña, del que se celebra el centenario de su nacimiento, tendrá una relevancia especial en el marco del encuentro, en concreto sus proyectos en el sur de la Isla. Los profesores y arquitectos Elisa Valero y José Luis Gago escriben en estas páginas al respecto.
En 1959, el arquitecto Manuel de la Peña dio comienzo a la redacción del proyecto para definir urbanística y arquitectónicamente el Poblado de San Fernando de Maspalomas, con el que se llevaría a cabo la creación de un espacio urbano contemporáneo y la construcción de una arquitectura moderna y, a la vez, respetuosa con los modelos populares que Peña había estudiado detenidamente.
Inaugurado en 1961 el poblado dio paso a otros magistrales trabajos como el restaurante La Rotonda, los bungalós Los Caracoles, o el Templo Ecuménico, ejemplos todos ellos que pasan por formar parte del imaginario colectivo de los coetáneos que pudieron disfrutar del desarrollo de la actividad turística en la Isla, o de aquellos que han mostrado interés por su historia.
La Rotonda, lamentablemente demolida, concita aún la admiración de cuantos tienen oportunidad de ver sus fotos y de acudir al solar en el que se encontraba, momento que permite ponerla en escala recorriendo los restos que se perciben sobre el tablero de la solera de su pavimento.
Soprende que la curvatura del Templo Ecuménico siga representando el hito urbano que fue desde que se erigió
Los Caracoles, dispuestos justo en la parcela de enfrente, mantienen la inspirada ordenación de sus hileras de adosados, dispuestas con la levedad de sus estructuras sobre el perfil topográfico del terreno natural, un aspecto tan admirado hoy en día para la consecución de arquitecturas no lesivas ni costosas.
El Templo Ecuménico, prosigue la línea de la que fuera la filosofía que caracterizó al estudio de Peña: la volumetría como “forma” de proyectar; la levedad para que la forma se revele por su geometría; la disposición para redefinir la parcela; y, la estructura como resolución de la cimentación. Sorprendente por su curvatura sigue representando el hito urbano que fue desde que se erigió en medio de las arquitecturas circundantes.
El ingenio del arquitecto produjo una considerable cantidad de edificios en toda el área turística de Maspalomas Costa Canaria que, hoy en día, conforman el mayor conjunto de arquitectura definible como patrimonio moderno y, en San Fernando el primer casco histórico construido en el siglo XX.
Es posible que a algunos pueda parecerle demasiado atrevimiento considerar el poblado un casco histórico y, aún más, si se le califica de patrimonio. Pero no se puede obviar que fue la primera huella de la arquitectura contemporánea que se constituye en el sur y, por tanto, es el núcleo fundacional de Maspalomas. Como tal, merece la dignidad y consideración de ser referencia social y urbana, y, sin duda, cultural y patrimonial.
De la calidad de su arquitectura queda buena muestra en las fotos que realizara Fachico desde 1961, marcando la impronta de los proyectos que le sucedieron como el restaurante la Rotonda o el Templo Ecuménico, hitos fundamentales de la cultura moderna en Gran Canaria y paradigmas del estilo que debería impregnar aun hoy Maspalomas, ya que sobre ella descansa la originalidad y el estilo que le confiere su personalidad frente a otros destinos turísticos.
Su trabajo merece la dignidad y consideración de ser referencia social y urbana, y cultural y patrimonial
Renunciar a ese carácter tan marcado que Peña supo dar a sus obras sería el mayor error que puede cometerse y, para ello, es imprescindible procurar difundir y ejemplarizar una serie de edificios que pasen a convertirse en los referentes visuales de cuantos viven y visitan el municipio. Tarde es ya para llevar a los niños de los colegios a hacer un recorrido por los espacios urbanos más singulares de San Agustín, El Oasis, El Inglés y prioritariamente al núcleo fundacional de San Fernando de Maspalomas.
