"La literatura contribuye a conocer mejor el mundo en el que vivimos, por ello, es importante que las escritoras que han estado ninguneadas a lo largo de la historia estén representadas". Esa sentencia, tan clarividente como exigente, reúne la esencia de la misión que la filóloga Blanca Hernández emprendió hace ya tres años cuando la Biblioteca Básica Canaria (BBC) abrió una nueva etapa con la inclusión de escritoras que equilibraran la desigualdad imperante entre sus títulos. Macarena Nieves, Belén Lorenzo y Acerina Cruz son las autoras vivas que ayer acudieron a la presentación de la Casa de Colón como representantes de generaciones cuya expresión revive.

Archivo de invierno recoge aquellas estaciones que pasó Cruz en Salamanca cuando estudiaba Historia del Arte. Una vivencia tan común como única para tanta juventud isleña que ha de viajar para completar su etapa universitaria: "Me marcó bastante, como a casi todo el mundo, te desvinculas del espacio doméstico y la vigilancia constante de los padres... Y empiezas a crecer o a decrecer", recuerda. La grancanaria recibió la invitación de la BBC y optó por este manuscrito que había escrito a mano en los cuadernos que se llenaron antes de la pandemia, así tuvo tiempo a reflexionar en qué había cambiado su vida gracias a esa distancia. "Cuando llegué con 18 años a Madrid y recorría la carretera hasta Salamanca no veía el mar y me sentí, por primera vez, dentro del continente. Quise tratar esa insularidad, con todos los procesos de ida y vuelta que requiere ese tiempo".

De recodos interminables, más bien vitales, Todo lo importante vuela recoge el pulso de la palmera Belén Lorenzo. Aprecia este momento con alegría, pero también como una responsabilidad por ver su nombre entre tantas firmas que aprecia profundamente, como la de Elsa López, recién nombrada Premio Canarias de Literatura. Entre líneas, también se adivina la sombra de Dolores Campos-Herrero, una de las artífices del microrrelato canario, y ella ha seguido la senda apreciando la cotidianidad que espacia en los aforismos inéditos que publica en la antología. "El título viene precisamente de uno de ellos: el tiempo, los pájaros, el amor, todo lo importante vuela. Me inspira la interacción con la realidad, todo al final te motiva a expresarte y comunicarte, así que mi especialidad es la brevedad, donde trato estos temas vitales", asegura.

Biblioteca de futuro

Mientras, el erotismo aparece en la reedición de Fluidos de jade, compuesto por la lanzaroteña Macarena Nieves Cáceres. A través de la poesía, explora la sexualidad, las relaciones afectivas y las identidades sexuales, y recupera ese testimonio. "Me resulta curioso volver al texto después de tanto tiempo y que me parezca vigente. La poesía, que se alimenta de metáfora, es la herramienta más maravillosa para tocar todos los temas", explica. Espera que esto no quede en el aire, sino que los centros educativos, las librerías y las bibliotecas llenen sus estanterías con estos tomos que cuestan 5 euros, "tenemos más contacto con la literatura contemporánea en el exterior que en nuestra comunidad, andamos con mucha precariedad, así que este tipo de propuestas son importantes".

Te puede interesar:

De los 53 títulos originales, solo hubo dos mujeres que rompieron la tradición patriarcal en 1988, Josefina de la Torre y Nivaria Tejera. Por tanto, enmendar aquel episodio ha sido la misión en estas dos últimas entregas con el trabajo conjunto de las profesoras de la Universidad de La Laguna, Isabel Castells y Eugenia Monzón, y de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Ángeles Mateo del Pino y la propia Blanca Hernández. La primera selección fue hecha en marzo de 2021 y añadió a los títulos originales Poesía completa de Pilar Lojendio; Buscando a B, de Esperanza Cifuentes; Teatro, de Pino Ojeda; El país de mi abanico, de Elsa López; Antología, de Olga Rivero Jordán; Fuego de nadie, de Verónica García; Doce lunas de Eros, de Cecilia Domínguez Luis; Provincia del dolor, de Silvia Rodríguez; La hija de abril, de Isabel Medina; y Yo amaba a Toshiro Mifune, de Tina Suárez Rojas.

A partir de ahora, Papeles tinerfeños de María Rosa Alonso; Las Palmas casi ayer, Las Palmas casi mañana de María Dolores de la Fe, Selección poética de María Joaquina de Viera y Clavijo; La ciudad de los hombres solos de Dolores Campos- Herrero Navas; Para el perdón y para el olvido de Ignacia de Lara Henríquez; Lágrimas y flores de Victorina Bridoux y Mazzini de Domínguez; y Poesía de Agustina González y Romero, junto al trío vivo, completan la saga. Narrativas emplazadas en tiempos y géneros tan diferentes que conforman un abanico de mundos literarios a los que esperan las autoras que acudan las nuevas generaciones. "Cada una deja un testimonio público de los temas que les interesaban y que las une, es decir, cada una enriquece los discursos y recoge el espíritu de diferentes épocas", añade Hernández. Aún queda para equilibrar la balanza, pero la función fundamental de la BBC es que las escritoras no vuelvan a quedar postergadas al olvido.