Teatro

‘Silencio’ de Juan Mayorga inicia la nueva programación del Cuyás

La segunda parte de la temporada 2022/2023 incluye 11 montajes de teatro, dos de danza y dos infantiles desde febrero hasta junio

Blanca Portillo en ‘Silencio’ de Juan Mayorga. | | LP/DLP

Blanca Portillo en ‘Silencio’ de Juan Mayorga. | | LP/DLP / Alberto García Saleh

El teatro de Juan Mayorga será, una vez más, el gran protagonista de la oferta escénica del Teatro Cuyás para los próximos meses. La programación correspondiente a la segunda parte de la temporada 2022/ 2023 se abrirá con su aclamada obra Silencio el 3 y 4 de febrero y, tras otros 14 títulos, se cerrará con Amistad los días 16 y 17 de junio. En total se exhibirán 11 espectáculos teatrales, dos de danza y dos infantiles.

Durante la presentación, el director general del recinto escénico, Gonzalo Ubani, recordó que Silencio, «es un homenaje al teatro», está basado en el discurso de ingreso a la Real Academia Española de su autor, Juan Mayorga, y llega justo cuando el dramaturgo ha recibido el Premio Príncipe de Asturias. Ubani hizo estas declaraciones en una presentación en la que estuvo acompañado por la consejera de Cultura del Cabildo grancanario, Guacimara Medina. Con Silencio, Mayorga rememora su discurso de ingreso a la RAE pero como si quien lo pronunciase no fuese él, sino un actor que le representara que es Blanca Portillo.

Carmelo Gómez ha recibido las mejores críticas por ‘Las guerras de nuestros antepasados’

La segunda obra, dirigida y adaptada por Helena Pimenta, es Noche de Reyes, de William Shakespeare, que llegará también en febrero (días 17 y 18), es un montaje coral de una de las «grnades obras del bardo». La compañía de la bailaora Rafaela Carrasco actuará por primera vez en este espacio con el montaje titulado Ariadna (al hilo de mito) (4 de marzo) donde la compañia demuestra un «trabajo alucinante de coordinación». Seguidamente, las funciones escolares llegará con La boba para los otros, de 2RC Teatro. Compañía de Repertorio (8, 9 y 10 del mismo mes).

Igualmente coral es la nueva propuesta de Sergio Peris-Mencheta, Ladies Football Club, un montaje sobre el nacimiento del fútbol femenino en la Inglaterra de la Primera Guerra Mundial que se verá los días 17 y 18 de marzo,

Representación de ‘Paraíso perdido’ de Johm Milton, dirigido por Andrés Lima. | | LP/DLP

Representación de ‘Paraíso perdido’ de Johm Milton, dirigido por Andrés Lima. | | LP/DLP / Alberto García Saleh

Alberto San Juan dirige Lectura fácil, adaptación teatral de la novela homónima de Cristina Morales que llegará al Cuyás los días 24 y 25 de marzo, «una bomba diseñada para reventar el concepto de discapacidad y reivindicar el derecho de todo lo vivo a gobernarse a sí mismo» coproducida por el Centro Dramático Nacional y Bitó Produccions. Días más tarde, el 31 de marzo y el 1 de abril, será el turno de Paraíso perdido, montaje dirigido por Andrés Lima a partir del célebre poema épico de John Milton. Y también en abril (13-16), Manolo Vieira subirá a las tablas del Cuyás para despedirse del público, su público, con La última y nos vamos. Le seguirán Plátanos, cacahuetes y lo que el viento se llevó, en la que Gonzalo de Castro, protagoniza una particular visión del rodaje de Lo que el viento se llevó. Basada en Moonlight y magnolias, de Ron Hutchinson, la obra, prevista 21 y 22 de abril, está dirigida por José Troncoso y se exhibirá tras los pases escolares de La fábula de la ardilla, de La Baldufa (26-29 de abril).

Otro grande de la escena, Claudio Tolcachir, dirige a Carmelo Gómez y Miguel Hermoso en Las guerras de nuestros antepasados, adaptación de Eduardo Galán de la obra de Miguel Delibes publicada en 1975 y que constituye todo un grupo contra la violencia de las guerras. La obra, que llegará al Cuyás a primeros de mayo (días 5 y 6) ha sorprendido «a la crítica por la increíble actuación de Carmelo Gómez», aclaró Ubani. Le seguirá el nuevo espectáculo de Luis Piedrahita, Es mi palabra contra la mía, donde el popular cómico, «uno de los grandes monologuitas» reflexiona sobre por qué nadie está contento con lo que le ha tocado (12 y 13 de mayo).

En ‘Retorno al hogar’ Pinter describe las tensiones entre varios miembros de una misma familia

Eduard Fernández protagoniza Todas las canciones de amor, una obra de Santiago Loza dirigida por Andrés Lima que llegará al Cuyás (19 y 20 de mayo) en «un viaje emocional entre el drama y la comedia, entre la vida y la muerte, entre el amor y el olvido y los recuerdos». Seguidamente, Paula Quintana culminará con Huerto (2 y 3 de junio) esa trilogía sobre el empoderamiento y la elevación de los cuerpos que comenzó con Las alegrías (2019) y siguió con La carne (2020).

Una escena de ‘Retorno al hogar’ de Harold Pinter. | | LP/DLP

Una escena de ‘Retorno al hogar’ de Harold Pinter. | | LP/DLP / Alberto García Saleh

A continuación tendrá lugar otro viaje muy especial: Retorno al hogar (9-10 de junio). En esta otra obra, Harold Pinter relataba con crudeza las contradicciones y tensiones entre un padre viudo que vive con dos de sus hijos y un hermano. Hasta que la llegada de su hijo mayor, el triunfador de la familia, y la esposa de éste desata todos los vientos de una tempestad provocada por un ambiente asfixiante y opresivo causado por la envidia y el desprecio entre todos los miembros del clan. Junto a Miguel Rellán y a las órdenes de Daniel Veronese, trabajan aquí actores muy populares de la televisión: David Castillo (Aida), Fran Perea (Los Serrano), Alfonso Lara (Servir y proteger), Juan Carlos Vellido (Hierro) y Silma López (Lola en la serie de Netflix ‘Valeria’). Finalmente (16 y 17 de junio), será la citada Amistad la que ponga fin a la temporada. En ella, Albaladejo, García Millán y Grao dan vida a unos amigos que lo son desde niños y que, tras compartir todo tipo de juegos, «juegan a uno -quizás el último- con el que burlarse de la vida y de la muerte».

Ubani señaló que, aunque en la anterior programación ya se vio un aumento de público con respecto a la época de la pandemia» no será hasta febrero del año que viene cuando se estabilice completamente la regularidad», aunque sigan teniendo las localidades completas en muchos espectáculos.

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