Un libro con vocación de lienzo

Conocer la isla de El Hierro de una forma distinta, hacerlo desde la óptica de sus propios habitantes y entendiendo su afán por conseguir un territorio propio, compartido y que con la mirada puesta en el futuro. Ese es, en parte, del objetivo del nuevo proyecto editorial del fotógrafo Alexis W. El creador acaba de publicar El Hierro La Isla del Color, un libro en el que colabora con el investigador Mario Guglielmi y en el que cuenta con diseño de Marco Padrón Díaz.

El ejemplar fue presentado en la última Feria Internacional de Turismo (Fitur), celebrada en enero, y cuenta con un mapa de localizaciones y puntos de interés de la isla del meridiano. No obstante, el pasado miércoles también fue presentado en El Hierro. «Este libro es muy importante en el sentido de que es más que un libro. He construido, de una manera consciente, una herramienta con la que poder visibilizar ese proyecto artístico y de sostenibilidad paisajística en el que llevamos trabajando los herreños hace casi 15 años», explicó su autor.

Se refiere Alexis W a Isla de Ferro, iniciativa colectiva y comunitaria impulsada por el artista que se articula a través de la de intervención «en el paisaje físico y emocional de El Hierro». «Plasma la isla como concepto, idea y espacio, es una responsabilidad de todos y durante estos años de trabajo se han ido sumando todos los estamentos de la sociedad herreña en el ámbito público y en lo privado», detalló en el texto que aporta a la publicación.

Como Isla de Ferro, el libro es también una iniciativa colectiva. «Nunca he dicho que este sea mi proyecto, es de todos», insiste el fotógrafo. De esta forma, también participan con sus textos Lucía Fuentes, el propio Mario Guglielmi, Edelmira Morales, Juan Matías Padrón, Venancio Acosta, Severo Acosta, Melo Padrón, Maximiano Trapero, Sixto Sánchez Perera, Nicolás Rodríguez, Víctor Álamo de la Rosa, Beatriz Ballester y Hernández Padrón C.

De igual manera, las impresionantes imágenes que forman paete de El Hierro La Isla del Color tampoco son solo de Alexis W. «He invitado a 15 fotógrafos de la Isla porque forma parte de nuestro espíritu. Es un proyecto de Isla, un proyecto de todos. Si no conectamos al vecino con el proyecto de Isla, estamos jodidos». Las imágenes las firman, además de W, Armando del Rosario, Vicente Machín, Juan Ramón Marcelino, Yon Bengoechea, Beatriz Ballester, José Luis Rodríguez, Juan Carlos Pestano, Amparo Aristu, Antonio Cuenca, Imeldo Bello, Tasio Armas, Javi Martín, José Lorenzo, Matías Padríón y Rafa Avero.

El fotógrafo. no concibe su trabajo sin las iniciativas editoriales en los que tanto le gusta implicarse. «Los libros son procesos creativos complejos, al menos como yo los vivo. Para mí este es un proyecto compartido donde me siento con el diseñador para hablar de una idea y de una estructura que hay que llevar luego al papel. Hay que trazar un guion y unas coordenadas. Es como un puzzle. Es un proceso muy loco pero precioso», reconoció.

Concebido como una herramienta para visualizar el trabajo de los herreños, el libro continúa con un proceso de trabajo en el que el fotógrafo ya tiene experiencia. Hizo lo mismo en proyectos anteriores como Memorias de contrabando. «Para mí ha sido muy difícil trabajar esta idea durante 15 años pero lo he conseguido: este libro ya forma parte del imaginario de la Isla», celebró. «Es un libro para los turistas, para los visitantes, una nueva experiencia para conocer El Hierro a través del discurso de la poética de los colores, un proyecto de innovación del modelo turístico –un campo donde es complicado innovar o proponer nuevas experiencias–».

Por ahora, esta publicación solo está disponible para su compra en los centros de interpretación y turismo de El Hierro. Se trata de un proyecto que nace con el respaldo del Área de Turismo del Cabildo de El Hierro y fue publicado por El Meridiano S.A. «Más que un libro, es una herramienta maravillosa para conseguir muchas cosas dentro de lo medioambiental, de lo turístico y para generar empatía y sensibilidad con el trabajo que estamos haciendo. Por ejemplo, estamos trabajando con los alcaldes para arreglarle los callejones a los vecinos y esta es una herramienta que me permite que el otro visualice ese trabajo y lo entienda», insistió el autor.

Las imágenes que ilustran el libro ahondan en ese espíritu con el que nación Isla de Ferro. Así, al hojearlo, el lector puede imbuirse del imaginario de El Hierro y ver lo que es hoy y en lo que es posible convertirse. «En los años ochenta, por ejemplo, en mi casa había un burro. Era un mundo rural, de aislamiento y de triple insularidad. Eso era lo que nos caracterizaba». Cuarenta años después, las cosas han cambiado y todo no es necesariamente mejor que entonces. «Nos hemos convertido en un referente mundial de valores positivos. Somos referente en sostenibilidad energética, reserva de la biosfera, geoparque, tenemos los fondos marinos, etcétera. Pero no vivimos en un paraíso, hay que trabajar y para eso hace falta un juicio crítico», concluyó.

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