Un cómic intenta desmontar la leyenda negra de Juan Negrín

La Fundación Canaria Cine+Cómic es la responsable de la publicación, que será presentada el 28 de febrero a las siete de la tarde en la Fundación Juan Negrín de Las Palmas de Gran Canaria.

Un cómic intenta desmontar la leyenda negra de Juan Negrín

Un cómic intenta desmontar la leyenda negra de Juan Negrín / LP/DLP

Entre las iniciativas para dar a conocer la figura real del científico y político grancanario Juan Negrín está la edición de un cómic sobre su vida, trayectoria política y profesional de quien fue el único presidente del Gobierno central nacido en Canarias y el último de la II República.

La Fundación Canaria Cine+Cómic es la responsable de la publicación, que será presentada el 28 de febrero a las siete de la tarde en la Fundación Juan Negrín de Las Palmas de Gran Canaria.

Ese día por la mañana abrirá sus puertas en la sede del Ayuntamiento de la capital grancanaria una muestra sobre esta edición.

El cómic ha sido escrito por el periodista Francisco de Zárate, mientras el autor de los dibujos es Fer Calvi, con la intención clara de que resulte un medio efectivo y cercano para dar a conocer a un político que fue presidente del Gobierno republicano entre 1937 y 1939 y cayó en el olvido, cuando no en la demonización, tras la victoria franquista.

En los últimos años, se ha comenzado a reivindicar la figura de un hombre que demostró su talla científica, política y humana en uno de los períodos más convulsos de la historia reciente de España.

En esa línea estaría también haberle puesto su nombre al hospital insular de Gran Canaria o la creación de una Fundación que lleva su nombre impulsada por su nieta, Carmen Negrín.

Igualmente en 2020 la Universidad Complutense abrió las puertas a un quirófano restaurado para la experimentación animales en la que trabajó entre 1934 y 1936 que sirve como museo y a cuya inauguración asistió la nieta.

Para los autores del cómic ha supuesto un reto dar a conocer, tanto a la figura del presidente canario como a una época tan trágica y complicada, pero el resultado final hará cambiar a muchos de opinión sobre las posibilidades que este medio tiene para divulgar aspectos históricos.

En este caso de Zárate y Calvi se adentran en el que es calificado como “un período atroz”, y dan a conocer la personalidad de un hombre que demostró una capacidad enorme de resistencia y una importante altura política.

El desconocimiento generalizado que existe sobre la figura de Negrín lo atribuye de Zárate a varios factores. El primero y más evidente es que los republicanos perdieron la guerra, y durante los siguientes años el franquismo cubrió con un evidente silencio, en el mejor de los casos o incluso demonización, en el peor, a los perdedores.

A eso se unieron las divisiones surgidas dentro de su partido que llegó al punto de que fuera expulsado del PSOE, hasta que hace pocas fechas los socialistas reconocieran su error y en un acto simbólico devolvieran el carnet a su nieta.

El cómic hace un recorrido biográfico lineal desde su nacimiento y primeros años en Gran Canaria, hasta su posterior vida profesional y política.

Para documentarse, de Zárate se basó en el trabajo del historiador Enrique Moradiellos, considerado el mejor biógrafo de Negrín, y también en los trabajos de la historiadora británica Helen Graham.

Los primeros pasos que hacen destacar al grancanario fue su labor como médico y más concretamente en el campo de la investigación. Negrín recibió una sólida formación académica en Alemania, donde cursó estudios hasta el inicio de la primera Guerra Mundial, y se despertaron sus simpatías por el socialismo.

El cómic abarca su brillante faceta científica, en la que trabajó con dos premios nobel como fueron Ramón y Cajal y Severo Ochoa, para a continuación adentrarse en su labor política, primero como diputado, ministro de Economía y luego al ser elegido presidente del Consejo de Ministros.

Después llegan los complicados avatares de la guerra civil, su labor al frente del Gobierno, su caída y solitario exilio en Francia y México.

Este cúmulo de circunstancias propiciaron que surgieran diversas leyendas negras como la famosa del oro negro de Moscú, que en realidad fue un intento de conseguir armamento y dar de comer a la población, y la forma en la que dirigió el país cuando la derrota republicana era evidente.

En esta línea puede jugar un papel importante la utilización de medios como el cómic que den a conocer a las nuevas generaciones la figura de este político, una vez que se le despojen de las falsas historias montadas a su alrededor.

Pero también podrá servir para que las personas de mayor edad, tal vez las más intoxicadas por esta serie de manipulaciones, conozcan quién fue realmente Negrín y cuál fue labor científica y política.

De Zárate percibió el peso de ese olvido, en su educación, ya que "cuando yo iba al colegio, las clases de historia siempre se acababan antes de llegar a la II República, y nadie nos contó lo que pasó en ese período”.

Por ello, iniciativas como bautizar en su honor el Hospital de Gran Canaria o que el PSOE le rehabilitara como militante distinguido, y devolviera su carnet a su nieta, o el premio de la cadena Ser a la Fundación Negrín, son aplaudidas por el autor del cómic.

El mismo sentido que esos homenajes y reconocimientos públicos tiene la realización de esta biografía en cómic, que –para de Zárate y Calvi- “es un instrumento para reivindicar y poner en su justo lugar a una figura que ha estado demasiado tiempo bajo el foco de la sospecha”.