Entrevista | Verónica Cruz Oboísta de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria
Verónica Cruz, oboísta: «El concierto es un viaje por el tiempo y la historia de la música»
«El oboe d´amore tiene un timbre muy especial, velado e íntimo», comparte la artista

Verónica Cruz, oboísta de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria. / SABRINA CEBALLOS

La oboísta Verónica Cruz, solista de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria, protagoniza el concierto de este viernes en el Auditorio Alfredo Kraus con el Concierto para oboe d’amore de Bach. Bajo la batuta de Karel Mark Chichon y dentro del programa De Bach a Ravel, la intérprete habla sobre su vínculo con un instrumento poco habitual, su trayectoria en la orquesta y las emociones que quiere transmitir al público.
La familia del oboe tiene varios miembros. ¿Dónde se sitúa el oboe d’amore dentro de ella y qué lo hace especial?
El oboe d’amore está entre el oboe, que es el más agudo de la familia, y el corno inglés, que le sigue. Es un instrumento bastante particular por su forma, su fabricación y, sobre todo, por su sonoridad, que es un poco diferente. No se utiliza mucho en música sinfónica ni como instrumento solista. Apenas hay repertorio original, salvo algunas piezas de cámara o cantatas del Barroco, de compositores como Bach o Telemann. Luego cayó en desuso durante casi un siglo y reapareció un poco en la música sinfónica con Strauss, en Sinfonía doméstica, o con Ravel, más adelante, en el Bolero, donde ya aparecen pasajes escritos para él. En el Barroco se usaba sobre todo en obras vocales, como las pasiones, el Oratorio de Navidad o la Misa en si menor de Bach. No es habitual encontrarlo como instrumento solista, ni siquiera que los músicos tengan uno propio: muchas veces se alquila. Yo conecté con él cuando estudiaba en Alemania y le tengo un cariño especial. Como soy solista de corno inglés en la Filarmónica, me apetecía tocar algo afín a mi instrumento, y por eso la elección del oboe d’amore.
¿Qué retos técnicos o expresivos plantea este tipo de oboe frente al oboe moderno?
En realidad es un instrumento construido a la manera moderna, no un original barroco. Está adaptado para facilitar la ejecución, igual que ha ocurrido con muchos otros instrumentos. Técnicamente es muy parecido al oboe, aunque un poco más grande y con una tesitura distinta. Es un instrumento transpositor, lo que significa que lo que leo en la partitura no suena exactamente igual. Requiere acostumbrarse a su forma de tocar, pero no supone una dificultad añadida más allá de esa adaptación.
«Es un instrumento transpositor, lo que significa que lo que leo en la partitura no suena exactamente igual. Requiere acostumbrarse a su forma de tocar»
En cuanto al concierto del viernes, ¿qué le atrajo de la obra que interpreta?
Es un repertorio precioso. La obra es una reconstrucción de un concierto original de Johann Sebastian Bach para clave, y la música es bellísima. Más que nada, me atraía el contacto con el instrumento: no suelo tocarlo a menudo, quizá una vez al año, en el Oratorio de Navidad o en ocasiones similares. Esta temporada tendré la suerte de interpretarlo varias veces, pero normalmente no es así. Me apetecía acercarme de nuevo al oboe d’amore y ofrecer al público algo diferente, que conozcan este instrumento y su sonoridad tan particular.
El oboe d’amore tiene una sonoridad más cálida y melancólica. ¿Qué tipo de emociones espera transmitir al público?
Tiene un timbre muy especial, velado e íntimo. La formación que me acompaña es más pequeña, lo que hace que la sonoridad sea más limpia. Se crea un ambiente muy bonito, especialmente en el segundo movimiento, que es una auténtica joya. Ya hemos empezado los ensayos y es muy emocionante. Es una música que remueve sentimientos; las armonías y tensiones son preciosas. Espero poder transmitir esa calma y serenidad al público.
Comparte escenario con Radek Baborák. ¿Cómo es compartir programa con un solista invitado de ese nivel?
Es un honor tremendo compartir escenario con alguien de la talla de Radek Baborák. En la orquesta —y en la Isla— estamos encantadísimos de recibirlo. Es uno de los grandes trompistas de todos los tiempos, y poder tocar junto a él es un privilegio.
Lleva desde 2018 como corno inglés solista en la Orquesta Filarmónica. ¿Cómo describiría su evolución dentro de la orquesta?
Cuando llegué a Gran Canaria venía de estudiar en Alemania, con Lucas Macías. Pasar de la etapa de estudiante, con sus exigencias de audiciones y concursos, al trabajo diario en una orquesta, supone un gran cambio. En la orquesta hay que adaptarse a un ritmo distinto, preparar cañas semanalmente para el oboe y el corno inglés, afrontar repertorios nuevos cada semana y mantener siempre el nivel. Es una evolución muy bonita: pienso en cómo llegué, tan centrada en el estudio, y cómo ahora tengo la experiencia de haber tocado tanto repertorio y aprendido de mis compañeros, que me enseñan muchísimo cada día. Es un proceso precioso, ver cómo cambias y creces con el tiempo.
¿Ha habido algún maestro o experiencia que le haya marcado especialmente en su carrera?
Sí, muchos. Empecé en una escuela de música en Narón, mi pueblo en Galicia, y desde entonces he tenido profesores maravillosos. Recuerdo con cariño a mi primer profesor, Marcos Galán, y a Ismael Vaquero en el Conservatorio Superior de A Coruña. También a quienes me acompañaron en las jóvenes orquestas: David Villa, Esther Beaudet, Cristina Dominic… Y, por supuesto, Lucas Macías, mi profesor en Alemania, que ha sido fundamental en mi formación. Pero me gusta recordar a todos, porque nada habría sido posible sin las personas que me acompañaron desde el principio. Les debo mucho y aún mantengo relación con muchos de ellos
Si tuviera que definir su papel dentro de la orquesta en una frase, ¿cuál sería?
Aporto apoyo armónico y momentos de luz. Ocupo la posición de segundo oboe, que es completamente de apoyo armónico, pero con momentos en que el corno inglés brilla.
«Aporto apoyo armónico y momentos de luz»
¿Cómo vive el momento de salir al escenario ante el público, en su propia orquesta?
Tengo una mezcla de emociones. Estoy muy emocionada y agradecida al maestro Karel Mark Chichon y a mis compañeros por su apoyo, pero también con muchos nervios. Es algo con lo que convivimos todos los músicos, y creo que es importante darle visibilidad. Cada vez hay más interés por el coaching musical y la psicología aplicada al arte, algo muy útil para los músicos jóvenes. Los nervios se transforman en emoción y ganas, y además tenemos un público maravilloso, muy cálido y fiel, que nos arropa y nos hace sentir en casa.
En un programa que termina con La Valse de Ravel, ¿qué cree que une a Bach y Ravel, dos mundos tan distintos?
Es un programa muy extenso en cuanto a épocas, pero en realidad hay una relación interesante entre las obras. Con El caballero de la rosa de Strauss en medio, el concierto es como un viaje por el tiempo que muestra la historia y la evoluciónde la música a lo largo de los siglos. También se plasma cómo crece la orquesta. Es un hilo conductor muy bonito y un final apoteósico.
¿Qué espera que el público se lleve del concierto del viernes?
Espero que sienta una gran energía y una paz especial con el sonido del oboe d’amore y la música de Bach. Es un concierto que va creciendo hasta un final espectacular. Estoy deseando disfrutarlo también como espectadora, escuchar a mis compañeros y ver al público salir motivado y con ganas de los próximos conciertos.
- La concejala Inmaculada Medina dimite tras su imputación en el caso Valka
- Aemet prevé más nubosidad y lluvias en el norte de Canarias mientras la borrasca Claudia se aleja del país
- Raúl Lizoain acude al confesionario: 'La UD Las Palmas me llamó para volver, pero no cuajó; soy muy feliz en Albacete
- La quinta despedida de Viera de la UD Las Palmas es la definitiva: empresario, entrenador y subir al Arucas
- Inmaculada Medina, sobre su dimisión: 'Es lo que debemos hacer los responsables públicos en situaciones como esta
- Mika Mármol se aleja de la UD Las Palmas: recibe propuestas tentadoras de Primera e Italia
- Llega el pickleball: Las Palmas de Gran Canaria crea el primer espacio deportivo municipal de Canarias con cuatro pistas de este deporte
- Las 89 facturas que vinculan a la concejala Inmaculada Medina con el ‘caso Valka’