El colegiado Alejandro Yadriel Moreno Robaina, agredido en el partido de la categoría Preferente entre la UD San Antonio y el CD San Pedro Mártir, no se plantea abandonar el arbitraje, según ha anunciado este domingo el gabinete de prensa de la Federación Interinsular de Fútbol de Las Palmas mediante un comunicado.

La agresión se produjo cuando quedaba un minuto para que terminara el encuentro, disputado en la noche del viernes en el campo López Socas de la capital grancanaria, con 1-2 en el marcador; el colegiado recibió un cabezazo en la cara y sufrió fractura del tabique nasal. Tras ser atendido, fue evacuado en ambulancia.

"Uno de los jugadores nos insultó al trío arbitral. Fui a expulsarlo con tarjeta roja directa, recuerdo que el capitán -del San Antonio- me empujó y acto seguido me dio un cabezazo en la cara, y no recuerdo mucho más. Caí al suelo y de repente vi mucha gente alrededor, entre ellos a los compañeros y a un médico", ha relatado el árbitro, originario de Firgas y adscrito a la delegación de Arucas, expone la nota.

"Creo recordar que, cuando estaba dentro de los vestuarios del club, entró el jugador y me pidió perdón", añadió el colegiado.

Moreno Robaina no se plantea abandonar el arbitraje tras la agresión. "Pienso seguir adelante y luchar por los objetivos que me he marcado", subraya.

Por su parte, el presunto agresor, en un mensaje publicado en su cuenta de Facebook, expone que, "como hice ayer, nada más cometer el error que cometí, quería volver a pedir disculpas al señor colegiado, que es el gran afectado de todo esto".

También traslada sus disculpas al San Antonio, "que no tiene nada que ver con todo esto. Es un error mío, soy yo quien tiene que asumir la responsabilidad y así lo haré".

La Federación Interinsular de Fútbol de Las Palmas "lamenta profundamente" este episodio de violencia en el escrito y expresa su "más rotunda repulsa" por los hechos acaecidos "en una actividad que tiene otros fines", y donde debe "primar la deportividad".