Arrancó el cuadro principal de la XI edición del Gran Canaria Yellow Bowl, torneo internacional de tenis junior perteneciente al Tennis Europe Junior Tour y regido por la Federación Europea de Tenis, que se celebra durante toda esta semana en las instalaciones de la Escuela de Tenis del Cortijo Club de Campo de Telde. Hasta 256 jugadores llegados de más de 50 países luchan desde ayer y hasta el domingo 24 de octubre por el título final en categorías sub 12 y sub14, masculino y femenino.

Las chicas de la categoría sub12 han sido las encargadas de inaugurar el torneo, protagonizando unos encuentros muy reñidos y demostrando por qué los participantes de esta competición están considerados como los tenistas más prometedores de Europa.

Han destacado jugadoras como la Campeona de Canarias Lucía Rodríguez, que apenas ha dejado oportunidades a la letona Marta Slisane con un doble 6-0 o la joven promesa británica Sevil Parviz, que a sus once años se perfila como una de las jugadoras con más proyección, que tumbó a Valentina Carreras por 7-5 y 7-6.

Entre los jugadores canarios sobresalían Alejandro González, que se imponía al francés Yohan Le Carvennec 1-6, 6-1, 10,2, protagonizando la remontada de la jornada, Alberto Pulido, que se hacía con la victoria frente al británico Daniel Joita por 6-4, 6-1 y Darío Ortega, imparable ante el alemán Paul Wallmeier con un 6-0, 6-4.

Los jugadores de la categoría sub 12 se enfrentan entre ellos en formato round robin o de liguilla, un formato de todos contra todos que garantiza a cada jugador un mínimo de tres partidos.

La Tennis Academy Cortijo Club de Campo, en Telde, lleva trabajando por el deporte base desde hace ya once años. De hecho, en estos momentos la escuela cuenta con una prometedora cantera de benjamines y alevines. «Esa es nuestra ilusión, es lo que nos mueve», asegura Mónica Megías, directora del centro. «Nuestro trabajo tiene como objetivo el fomento de la base y estamos muy orgullosos de ellos». Para Megías, que las diez pistas de tenis, seis de ellas de tierra batida alberguen una competición internacional juvenil de estas características ya supone ver cumplido el objetivo principal de la escuela: «trabajar por las competiciones juveniles.»