El Panadería Pulido sigue disfrutando de su mejor momento en la Segunda RFEF, y se aferra al sueño de la permanencia al darle la estocada definitiva al Tamaraceite (0-3). El equipo de Juan Carlos Socorro tomó el mando del partido, en el inicio de la segunda mitad, con un penalti definido por Braulio. A continuación, los blanquiazules sufrieron la expulsión de Dani Zizu, lo que aprovechó el San Mateo para ampliar distancias a través de Raúl Sosa. En la recta final, el propio futbolista naranja, con un nueva pena máxima que trajo consigo la expulsión de Javi Sánchez, sentenció el choque.

Con cuatro victorias en las últimas seis jornadas, el cuadro de Juan Carlos Socorro ha conseguido abandonar el farolillo rojo de la tabla liguera. Más si cabe después de doblegar a un rival directo como el Tamaraceite en un encuentro que arrancó sin un dominador claro, con dos equipos que dieron muestras de sus necesidades clasificatorias y que no querían conceder espacios a su rival.

Durante unos primeros 45 minutos equilibrados, el San Mateo apostó por ejercer una presión alta para incomodar la salida de balón de los blanquiazules. Además se mostró peligroso por banda derecha con los ataques de Gabri y Raúl Sosa. La mayor parte del juego se desarrolló en inmediaciones del centro del campo lo que derivó en que las oportunidades de gol brillaran por su ausencia.

La segunda mitad continuaba por el mismo camino hasta que en el minuto 53, el blanquiazul Dani Ojeda cometió penalti sobre Raúl Sosa. Braulio asumió la responsabilidad y no falló para adelantar en el marcador al equipo de la Vega de San Mateo. Acto seguido, el cuadro de Pachi Castellano sufrió un nuevo mazazo al ser expulsado Dani Zizu, por una fuerte entrada sobre Kilian Alemán.

Con un futbolista más sobre el campo, los de Juan Caros Socorro se hicieron dueños del partido frente a un Tamaraceite, que modificó el sistema para disfrutar de más mordiente en ataque con la entrada de los jugadores de refresco. En el minuto 66, en una rápida contra de los visitantes, Braulio cedió sobre Raúl Sosa, quien en el mano a mano no falló para batir con un remate a la media altura al portero cordobés Javi Sánchez.

En la recta final del encuentro, en otra acción de contragolpe, Javi Sánchez cometió un nuevo penalti sobre Romero, que le costó la expulsión. Eros Delgado se colocó bajo palos y Raúl Sosa ejecutó con seguridad el lanzamiento para redondear el triunfo del San Mateo en el Juan Guedes.