La receptora Candela Bernardino (17 años y 1,77 metros), la central Irene Osayande (16 años y 1,95 metros) y la líbero Claudia Figueroa (25 años y 1,68 metros), son las tres jugadoras que han despertado un mayor interés en la dirección deportiva del Heidelberg, de cara a poder reforzar el plantel del equipo para ofrecerle a su técnico Santi Guerra, un equipo de garantías de cara a afrontar con éxito su debut en la Liga Iberdrola.
Las tres jugadoras se enmarcan en la política de la entidad colegial en la que Mimi Peláez apuesta por la incorporación de jugadoras jóvenes, de proyección y con un amplio margen de mejora para afrontar con hambre su estreno en la categoría.
Bernardino, formada en el Mairena, tuvo su primer coqueteo con la Liga Iberdrola la temporada pasada en las filas del Cajasol, donde no tuvo demasiadas opciones de brillar en su estreno en la máxima categoría. Sin embargo su juventud y sus cualidades encajan en las necesidades del Heidelberg que necesita una cuatro que pueda compartir posición con dos jugadoras llamadas a ser importantes en el equipo como son Asly Antivero y Julia Bonet. Invertir en presente, pero sobre todo en futuro es lo que busca la entidad insular con la incorporación de la jovencísima receptora andaluza.
Por otra parte, el segundo nombre que se encuentra sobre la mesa del director deportivo del conjunto grancanario es el de la jugadora del CCO 7 Palmas Urbaser, Irene Osayande. La central internacional con España en categorías inferiores, formada en el Torrejón, ponía fin a su cesión en el CAEP Soria a mitad de temporada del curso pasado para incorporarse a las filas del filial olimpiloco, donde ofreció destellos de su gran calidad, que la convierten en una de las centrales de mayor proyección del voleibol nacional. Su progresión la llevó a entrar en dinámica del primer equipo a las órdenes de Pascual Saurín. La alta competititividad en el primer equipo del vigente campeón de la Supercopa sería el causante de la decisión de la jugadora de buscar un equipo en el que pueda disfrutar de minutos en la máxima categoría, algo que le puede ofrecer el Heidelberg, que de momento cuenta con dos centrales confirmadas para la próxima temporada: Lola Hernández, que renovó recientemente su compromiso con las colegialas y la norteamericana Megan Jacobsen, fichada esta temporada procedente del Nantes francés.
El tercer nombre en la lista de la compra del equipo dirigido por Santi Guerra es el de una veterana aunque jovencísima Claudia Figueroa, la líbero del Gran Canaria Urbaser, que recientemente confirmaba la salida del club de su vida. Los problemas físicos en su rodilla han mermado su rendimiento durante la última temporada en el que además le ha tocado el rol incómodo de tener que compartir posición con una de las mejores líberos del voleibol español, Alba Sánchez, si bien cada vez que la grancanaria ha saltado a la pista ha jugado a un altísimo nivel.
Figueroa aportaría experiencia y liderazgo a un equipo que no está sobrado de experiencia, además de calidad y un palmarés marcado por una Liga Iberdrola y una Supercopa de España.
A pesar de ser una de las jugadoras más antiguas del Olímpico, la grancanaria ya vivió una experiencia alejada del Centro Insular de Deportes en el AVG Almería durante la temporada 2016-17, si bien en esta ocasión la oferta del Heidelberg le permitiría seguir en la isla, compartiendo posición con la renovada Vega Lope.
El nuevo proyecto colegial cuenta además con Andrea Silva como única colocadora confirmada por el momento, necesitando cerrar una directora de juego más para cerrar una plantilla en la que la opuesta cubana Dayami Sánchez está llamada a ser la jugadora franquicia del nuevo proyecto y que compartirá posición con otra ex olimpiloca como Fatou Diop, que abandonó el filial amarillo para tener una oportunidad de demostrar su potencial en la máxima categoría.
