Luis Miguel Ramis llega «tranquilo» y «responsabilizado» al momento «más importante» de su carrera como entrenador, al partido de vuelta de la final por el ascenso a Primera División que se disputa mañana (20.00 horas, Movistar LaLiga) en el Heliodoro Rodríguez López . Lo hace, además, al frente de un equipo especial en su carrera, un Tenerife en el que ya fue protagonista como futbolista en la década de los 90.

Después de 42 jornadas de Liga y de tres partidos de playoff, el entrenador del equipo blanquiazul se muestra partidario de aplicar la misma fórmula que hasta ahora. Así le ha ido bien. Ni siquiera se relaja por saber que el empate podría ser suficiente. «No sé gestionar esas situaciones desde el minuto uno», reconoció ayer refiriéndose a la ventaja que tiene el representativo por haber quedado mejor clasificado que el Girona en la Liga. «Por mi cabeza solo pasa hacer un buen partido y tratar de ganar», añadió descartando la opción de que el Tenerife se dedique a especular con el resultado.

Imaginando el desarrollo del duelo, advirtió de que «habrá un poco de todo» en los 90 minutos; o en los 120, si se resuelve en la prórroga. «Pueden aparecer situaciones de muchos tipos, porque el partido puede derivar en contextos diferentes, pero estamos preparados para competir en cualquier circunstancia», aclaró Ramis antes de calificar como «inteligentes» a los jugadores que dirige.

Sin sorpresas

Su plan no parece incluir ninguna sorpresa, pero sí algún matiz respecto al partido que se jugó el pasado sábado en Montilivi (0-0). Ramis apuntó que el Tenerife debería «gestionar mejor» el juego con el balón, «tomar mejores decisiones y hacer más daño» que en el encuentro de ida. «Y seremos capaces de hacerlo», anunciaba. «Tendremos que hacer un partido muy completo, porque el Girona ha evolucionado a mejor durante la temporada y también tiene las ideas muy claras; y eso implica ser muy equilibrados, adaptarnos a lo que requiera el juego e intentar salir a ganar, como siempre», indicó.

El técnico ve a los suyos preparados «para competir en cualquier circunstancia»

Ramis recordó que «no hay dos partidos iguales, sobre todo cuando son de esta importancia». En ese sentido, planteó un teórico guion marcado por la igualdad y la tensión. «Será competido, igualado, con tensión, con todas las características de un partido de esta relevancia para unos y para otros; y lo tratamos con la importancia que tiene cuando uno se pone esta camiseta; los jugadores han entendido ese mensaje», garantizó.

Míchel espera goles

Convencido de la victoria y que darán «una versión espectacular» en el Heliodoro. Así llega hoy a la Tenerife la expedición del Girona, que confía en arrimar la eliminatoria a su favor en el partido de vuelta de mañana, como así ocurrió en el cruce anterior contra el Eibar. Ayer, Míchel, su entrenador, pronosticó que el conjunto tinerfeño, aunque le vale el empate, «saldrá a proponer» porque juega en su feudo, de ahí que visualice un encuentro en coordenadas diferentes al de ida «y con goles».