Toñi Ponce y Pedro Domínguez, a los mandos de un Hyundai i20 Rally2, se alzaron con la victoria en la 49º edición del Rally de Maspalomas, cita puntuable para el Campeonato BP de Rallys de Las Palmas. Los ganadores se apropiaron de la primera posición después de que su máximo rival y líder provisional hasta entonces, el equipo integrado por Alfonso Viera y Ariday Bonilla (Citroën C3 Rally2), sufriera un pinchazo en el que se dejaba cinco minutos. Julio Martínez y Pedro Viera (Porsche 911 GT3 cup Rally) ocuparon la segunda plaza, a 3:06.6. Alexander Santana y Dani Sosa (Honda Civic Type-R) acabaron en el tercer lugar, a 4:46.8, en su mejor resultado y estrenando montura.

Emocionante estuvo el arranque de la competición. Alfonso Viera y Ariday Bonilla retomaban la actividad de forma fulgurante, para poner al Citroën C3 Rally2 de Sport&You Canarias en cabeza, sorprendiendo con su competitividad a Toñi Ponce y Pedro Domínguez, con quienes intercambiaban los primeros scratchs de la mítica prueba sureña. 

La sorpresa surgía al finalizar la segunda sección a su paso por el tramo de Fataga, Toñi asaltaba al liderato tras el pinchazo sufrido por Viera en un leve toque a una llanta, en el que se dejaba toda opción a la victoria con cinco minutos perdidos.

Así y todo, Alfonso Viera y Ariday Bonilla, a dos tramos del final, hacían un nuevo scratch. Esto significaba que ambos pilotos empataban a tres mejores tiempos cada uno, pero con Ponce como sólido líder y con una sustancial ventaja sobre sus contrincantes. 

«Fatal, es desmotivador»

Viera, que se lamentaba del infortunio del pinchazo, se hundía en la clasificación al ser desplazado hasta el puesto trigésimo, desde donde remontó para finalizar en la novena posición, a 5:50.9. «Fatal, fatal, es desmotivador correr así», comentaba el piloto del Citroën en los tramos finales.

Ponce y Domínguez, con un rally ya controlado, sólo tenían que dosificar su ventaja y llegar a la meta a los pies del emblemático Faro de Maspalomas como vencedores absolutos. «Lo he dando todo, ya no podía más; Alfonso corrió mucho», decía el ganador en referencia al alto ritmo de carrera que ejercieron los dos principales favoritos al triunfo.

Julio Martínez y Pedro Domínguez, en el comienzo de la prueba arrastraban problemas mecánicos, por lo que se vieron superados por un incisivo Mingo Ramos y Pepo Batista. El del Porsche escalaba a la segunda plaza cuando el del EVO-IX golpeaba levemente el coche contra una valla en la meta de Monte León y se dejaba unos valiosos 40 segundos.

Ramos y Batista se convirtieron en una atracción para los aficionados, a los que deleitaban con largas derrapadas. El equipo del Mitsubishi EVO-IX perdía la tercera plaza del podio cuando en el último, Tunte-Maspalomas (20 km.), rompían el motor.

Alexander Santana y Dani Sosa, con el Honda Civic Type R, se hacía con una meritoria tercera plaza a 4:46.8 del ganador, beneficiados por el abandono de Ramos. Estrenando montura, supieron aprovechar la efectividad de su coche para lograr destacados cronos.

Jonathan Nuez, que regresaba tras superar una lesión física, y Daniel Quintana, a los mandos de un Opel Corsa Rally4, acabaron cuartos en una lucha fraticida con los terceros. Alejandro Martín y Dani Rosario, con el Renault Clio Rally5), acababan quintos y fueron los vencedores de la Copa Clio Trophy Canarias, monomarca de la que es líder y probable campeón a falta de la celebración del Villa de Teror de la próxima semana.