Vuelve la Liga Femenina Endesa para el Spar Gran Canaria tras el parón de las Ventanas y lo hace con un partido clave ante el Movistar Estudiantes. Un cruce de caminos para ambos equipos en el que ganar puede suponer el poder mirar hacia la zona noble de la tabla y perder volver a preocuparse por la zona caliente.

El Pabellón Antonio Magariños acogerá mañana jueves (19.00 horas) un partido enclavado en la novena jornada y en el que la plantilla corta de las insulares obligará a su técnico José Carlos Ramos a tener en cuenta que el domingo reciben al Embutidos Pajariel Bembibre en el Gran Canaria Arena (19.00 horas), en un choque igual de importante que el que les espera en la capital.

En su última visita al Magariños, el Islas Canarias sumaba un ajustado triunfo por 53-56, en el que Sika Koné con un 28 de valoración fue la MVP del encuentro.

El Movistar Estudiantes llega a la cita como undécimo clasificado, con un balance de tres victorias y cinco derrotas, de las cuales tres se han sucedido de manera consecutiva, la última en su visita al Spar Girona (87-75). El equipo dirigido por David Gallego necesita hacerse fuerte en casa y sumar una victoria que le permitiría como poco superar a las insulares en la clasificación, ya que las grancanarias desembarcan en Madrid como décimas con idéntico balance que las estudiantiles, pero con mejor basket average.

Nadia Fingall es la referente en ataque de las Women in Black, con una carta de presentación de. 14,4 de valoración, 10,8 puntos, 7,8 rebotes y 2,9 asistencias. Junto a ella destaca la temporada de Laura Méndez (9,1 valoración, 10,1 puntos, 2,5 rebotes y 2,9 asistencias) y de Becky Massey (9,1 valoración, 8,8 puntos, 3,1 rebotes y 2 asistencias).

Las colegiales afrontan el partido con la única baja de Mel Gretter y con la necesidad de frenar su caída libre en las últimas tres jornadas.

Cambio de cromos en el Spar

Por su parte el Spar Gran Canaria se presenta con un balance idéntico al de su rival, si bien su trayectoria durante la temporada ha sido más parecida a la de un ascensor, intercalando victorias y derrotas.

Si antes del parón las amarillas decidían cortar a la canadiense Christina Morra, para incorporar a la interior norteamericana Rachel Lashawn Hollivay; sorprendía esta semana con el inesperado adiós de Juliunn Redmond y la llegada de su compatriota Tyler C. Scaife, en un intercambio de cromos doble que debería de mejorar las prestaciones de un Islas Canarias que aspira a seguir codeándose en la élite del basket femenino nacional una temporada más.

Al excelente rendimiento de la checa Petra Holesinska, se une el de Sika Koné que se convertía en la MVP de la octava jornada, recuperando su estatus de jugadora franquicia de las grancanarias.

La necesidad manda y las insulares afrontan la primera de sus dos finales esta semana con el objetivo de agravar la crisis de juego de las madrileñas para poder afrontar con calma su próxima cita en casa con el Bembibre, en el que en caso de ganar sería su primer triunfo en el recinto de Siete Palmas.