El grancanario Pedro Fleitas hace historia

El grancanario será el primer occidental que dirige en Japón una reunión de arte milenario con nueve escuelas clásicas niponas

El grancanario Pedro Fleitas será el primer occidental que dirigirá en Japón un tai kai o gran reunión internacional de Bujinkan, una organización que aglutina nueve escuelas clásicas de artes marciales japonesas, la más antigua del siglo XII, fundada por el maestro Masaaki Hatsumi.

Este evento tendrá lugar entre el 4 y el 5 de octubre de este año en el dojo (sede central) de Masaaki Hatsumi en Noda y será un tributo al soke (gran maestro), explica el isleño, quien destaca que la cita no tendrá mucho que ver con el deporte y sí con el respeto y el cariño hacia quien tuvo la valentía de abrir su experiencia al mundo.

Nacido el 2 de diciembre de 1931 en Noda (Japón), Masaaki Hatsumi, graduado en Medicina y en artes teatrales, practicó varias artes marciales antes de entrenar con el maestro Toshitsugu Takamatsu, conocido como el Tigre Mongol y quien fue el 33º patriarca de la escuela de ninjutsu togakure-ryu.

Uno de los mejores discípulos de Toshitsugu Takamatsu fue Masaaki Hatsumi, que llegó al título de «oke en seis estilos bujustu (practicados por los samurais) y en tres de ninjutsu (ninjas) y fundó el sistema bujinkan y el arte del bujinkan budo taijutsu.

Masaaki Hatsumi fue nombrado el 34ª patriarca de la escuela Togakure-ryu y sucesor de Toshitsugu Takamatsu y de todas las escuelas heredadas de él, alguna del siglo XII. Hatsumi ha adaptado las artes marciales clásicas japonesas al mundo occidental y, para ello, ha viajado durante muchos años por todo el mundo, subraya el maestro Pedro Fleitas, quien explica que la idea del tai kai nació durante un desplazamiento que en agosto del año pasado realizó a tierras japonesas.

Comenta el grancanario que, durante ese viaje, el maestro Hatsumi le dijo que «sería maravilloso» que hiciera un «tai kai» cuando se terminase la pandemia, algo que le abrumó, ya que si bien tiene experiencia en dar clases de bujinkan en Japón, se trata de un ejercicio «más libre» que una gran reunión internacional.

El propósito consiste en hacer un tributo a Hatsumi en su tierra, en su dojo, más que nada «como un acto de amor», reitera Pedro Fleitas, quien señala que hasta el momento se han apuntado 70 practicantes de bujinkan.

Pedro Fleitas es discípulo directo de Masaaki Hatsumi; se ha desplazado en más de 120 ocasiones a Japón y ha participado en diversos lugares de Europa y de América en eventos organizados por el gran maestro, quien ha visitado Canarias cuatro veces, en dos de ellas (1991 y 1992) para participar en un tai kai y en otras dos (1995 y 2007) para descansar.

El sistema bujinkan, o «camino del divino guerrero», que es patrimonio cultural nacional de Japón y tiene en Noda el principal «dojo» o lugar de entrenamiento, se basa en el taijutsu o arte del movimiento del cuerpo, con o sin armas (herramientas), las primeras de las cuales se denominan formas de golpe (dakentaijutsu), formas de combate suave o luxación (jutaijutsu) y habilidades en el movimiento (taihenjutsu).

En cuanto a las armas se utilizan tanto espadas (katanas, washizashi, kodachi, tanto y otras) como palos de diversos tamaños (bo, jo, hanbo), cuerdas (sageo), lanza (yari) y abanicos (tessen), entre otras herramientas.

En bujinkan hay diez etapas, o kyu, antes de llegar al cinturón negro, a partir del cual se establecen un total de 15 dan (grados), de forma que para obtener el quinto hay que pasar una prueba de sakki test, en la que hay que eludir un golpe por la espalda y, de superarla, se llega al nivel de shidoshi (instructor), lo cual da derecho a abrir un dojo y dar grados hasta cuarto dan.

Al obtener el décimo dan se es shihan o maestro, de un arte marcial del que no hay torneos ni competiciones, porque se trata de artes que se crearon para sobrevivir y no para ganar premios, y también porque como es un arte de guerra, muchas de las técnicas que se emplean pueden resultar mortales si se practican de una forma correcta.