Voleibol

El Guaguas viaja a Melilla para abrir las semifinales por el título de la Superliga

Los hombres de Sergio Miguel Camarero visitan el Pabellón Javier Imbroda (15.00 horas) donde les espera el vigente campeón de la Supercopa

Sergio Miguel Camarero da instrucciones a sus hombres durante un tiempo muerto

Sergio Miguel Camarero da instrucciones a sus hombres durante un tiempo muerto / José de Haro

Santiago Icígar

Santiago Icígar

Difícil compromiso el que le espera al Invictus Guaguas en su estreno en las semifinales del playoff por el título. Los hombres de Sergio Miguel Camarero visitan mañana el Pabellón Javier Imbroda (15.00 horas), una de las plazas más complicadas de la Superliga, para medirse al Melilla en una serie final al mejor de tres partidos.

El Melilla de Salim Abdelkader llega a la cita tras cerrar la temporada regular con una cuarta plaza, con un balance de 15 victorias y siete derrotas, con el título de la Supercopa bajo el brazo y tras deshacerse en cuartos del Léleman Conqueridor Valencia en una serie durísima que necesitó de los tres partidos para decantar la eliminatoria hacia el equipo de la Ciudad Autónoma.

Los grancanarios se han impuesto a los melillenses en sus dos enfrentamientos esta temporada. En la segunda jornada, los hombres de Camarero doblegaron a los Gladiadores azules por la vía rápida en el CID. En la segunda vuelta la historia se volvía a repetir, en un partido que se tuvo que retrasar respecto a la fecha inicialmente prevista por problemas logísticos en el vuelo que debía de llevar a los grancanarios hasta su destino, lo que no afectó a un Guaguas que se adjudicaba con un claro 0-3 el encuentro.

A pesar de los dos precedentes que favorecen a los insulares, el playoff ante el Melilla se antoja complicado ante un rival que nunca da un balón por perdido, con calidad en todas sus líneas y con experiencia, que además se siente cómodo con otorgar la etiqueta de favorito al Guaguas, que debe de lidiar con la presión extra de jugarse toda la temporada en la recta final de la temporada. Los grancanarios afrontan la eliminatoria con la lección aprendida en los cuartos ante el Arenal Emevé, que a punto estuvo de forzar el tercer partido y que obligó al equipo a reaccionar para cerrar la serie por la vía rápida.

Conseguir la victoria 25 consecutiva supondría a los amarillos el colocar un pie en la finalísima por el título, mientras que la derrota aumentaría la presión de un equipo forjado para ganar y que tendría que remontar en casa ganando los dos partidos restantes en el CID.