El Rocasa continúa con su vía crucis particular esta temporada en la que se mantienen como colistas desde el primer partido de la Liga Guerreras Iberdrola. Parece que las teldenses se han olvidado de como ganar sus partidos y eso se traduce en cuatro derrotas en sus cuatro compromisos ligueros disputados hasta el momento, el último ante un Granollers en el que su técnico Robert Cuesta, daba la estocada a su exequipo, culminando una remontada a la heroica tras ir perdiendo durante casi todo el partido, para mantener a las teldenses en la posición de colista una jornada más.
Iñaki Ániz ha conseguido en sus dos últimos partidos frenar la sangría de los dos primeros encuentros, pero el equipo sigue sin ser capaz de amarrar el resultado en los momentos finales, ante rivales que le han ganado la partida a base de oficio.
A pesar de la derrota, el Rocasa ofreció su mejor cara del curso hasta la fecha. en parte motivadas por su triunfo el pasado miércoles en la Copa Gobierno de Canarias, aunque se tratase de un torneo de carácter amistoso y ante un rival de la Liga Oro.
Las teldenses salieron muy concentradas desde el pitido inicial, amparados con la presencia de una sólida Silvia Navarro bajo palos y ante un Granollers que llegaba a la cita necesitado y con un desorden en su juego que favorecía las primeras ventajas de las insulares durante el partido. Un 1-7 de salida, ponía contra las cuerdas a las catalanas, que sufrían para frenar los veloces ataques de las teldenses, que mataban a su rival a la contra.
Rebasado el ecuador de la primera mitad, llegó el segundo del Granollers desde los siete metros. Un tanto que reactivó a las pupilas de Robert Cuesta que firmaron un parcial de 3-0 para reengancharse al partido.
Eider Poles, desde el punto fatídico sostenía al Rocasa junto a una infranqueable Silvia Navarro, que echaba el cierre en su portería para controlar la reacción del Granollers, para llegar al descanso con un 10-13 en el marcador.
El paso por vestuarios parecía revitalizar a las locales que ajustaban su defensa y enfocaban mejor el partido en su último cuarto, en el que se empezaban a ver las costuras y las dudas de un Rocasa que empezaba a tener miedo a ganar y lo que es pero, miedo a perder. Un gol de Ona Vila igualaba la contienda (19-19) a 11 minutos del final, dando paso a un estado de nerviosismo en los dos equipos.
El Granollers se cobraba una renta de dos goles a falta de tres minutos para el final, que ponían contra las cuerdas a las teldenses, que a pesar del tanto de Arinegua Pérez para reducir distancias no podían evitar la cuarta derrotadel curso (24-23).