El Heidelberg, plata en su debut en la Copa

El Avarca de Menorca hizo valer su condición de anfitrión y, por vez primera en su historia, consiguió el título de la Copa de la Reina de voleibol tras imponerse al primer clasificado de la Liga Iberdrola, el Heidelberg Volkswagen, por 3-1. A pesar de la derrota, el conjunto grancanario firmó un torneo brillante, en su primera participación en el torneo copero.

En un pabellón abarrotado, las baleares salieron a por todas y, haciendo gala de un juego fluido, se adjudicaba las dos primeras mangas por 25-19 y 25-23, respectivamente. El acierto en los remates y en los bloqueos auparon a las de Ciutadella, cuyo afición las llevaba en volandas para alzarse con un torneo que se les resistía después de haber perdido las cinco finales copera anteriores.

Pero el Heidelberg reaccionó en el tercer set y, por vez primera, las jugadoras de Santi Guerra superaban con claridad al conjunto menorquín. Las colegialas conseguían poner emoción a la final con un contundente parcial de 11-25.

El cuarto set se inició con idénticos derroteros y una ligera ventaja de las grancanarias (3-6), pero el Avarca no estaba dispuesto a ceder nuevamente ante su público y, tras igualar la contienda (15-15), tomaba el mando en el electrónico con un 23-19.

Todo estaba ya a su favor para conseguir el triunfo pero, después de un remate de Jimena Fernández, tuvo que ser un error en el saque del Heidelberg el que diera a las menorquinas el punto decisivo (25-22) para festejar el título ante su afición.

La decepción inicial de las jugadoras del conjunto grancanario dio paso a la alegría después de colgarse las medallas que las reconocían como subcampeonas, un logro que no está nada mal teniendo en cuenta que era su primera partición en una de la Copa a la que llegaban entre las favoritas dado su liderato en la Liga Iberdrola, donde el cuadro isleño lleva una marcha intratable (primeras con una derrota en 18 jornadas).